Ya os hemos comentado en multitud de ocasiones lo poco recomendable que es utilizar un sistema operativo sin soporte oficial. Hablamos de versiones como Windows 7 y 8, por lo que deberíais actualizar lo antes posible.
Con todo y con ello y a pesar de los peligros que esto conlleva, todavía hay millones de usuarios que trabajan en sus equipos con alguna de estas versiones del sistema. Hay que tener en cuenta que son totalmente vulnerables, ya que Microsoft no envía actualizaciones para parchear los últimos fallos de seguridad, por ejemplo.
Además, funcionalmente están mucho más limitados que otras versiones más actuales como Windows 10 y 11. Y la cosa va peor, tal y como os vamos a mostrar a continuación si os encontráis en esta situación y disfrutáis de vuestros contenidos multimedia aquí. Debemos tener en cuenta que en estos instantes Microsoft está eliminando los servicios DRM heredados en esta versiones antiguas de Windows.
Todo ello se traduce en que a partir de ahora no tendremos la posibilidad de escuchar música ni ver vídeos desde Windows 7 u 8. Todo esto que os contamos se debe a que el gigante del software acaba de añadir otra característica a la lista de las obsoletas de Windows. Después de etiquetar Paint 3D y las fuentes Adobe Type1 como obsoletas en el pasado mes de agosto, ahora ha puesto sus ojos en las características DRM heredadas.
Aquí nos referimos a la gestión de derechos digitales que se utilizan para permitir la reproducción de contenidos multimedia como música y vídeos, protegidos. Básicamente, esto se traduce en que la función de reproducción de estos archivos se eliminará de Windows.
Microsoft no quiere que uses Windows 7 ni 8
Es importante destacar que este es un cambio que afecta al DRM en Windows 7 y Windows 8, y por el momento no menciona a Windows 8.1. No está claro si este sistema en concreto también se verá afectado, pero por supuesto Windows 10 y 11 quedan al margen de todo ello.
De hecho, la empresa menciona específicamente al Reproductor de Windows Media y a Silverlight. Esto se traduce en que los usuarios de Windows 7 y 8 que utilicen Windows Media Player para reproducir contenidos con DRM, ya no podrán hacerlo una vez que la firma elimine la funcionalidad.
Aún hay usuarios que usan este Reproductor de Windows Media para copiar CDs con contenido protegido y los reproduce desde aquí, pero ya no podrá. El programa como tal ya no reproducirá ningún contenido protegido, lo que puede incluir a contenidos comprados de forma legal.
Este no es sino más que otro movimiento por parte del gigante del software para convencer a esas personas que siguen usando sistemas sin soporte, para que migren de una vez por todas a Windows 11. Debemos ser plenamente conscientes del riesgo que corremos al trabajar con software que ya no recibe actualizaciones, más si trabajamos con datos privados y sensibles aquí.
Es importante tener en consideración que tenemos la posibilidad de actualizar a las versiones más recientes del sistema operativo sin desembolsar un solo euro, algo que deberíamos llevar a cabo cuanto antes.