La conectividad disponible en los diferentes dispositivos con los que trabajamos hoy día es un elemento clave. Aquí entran en juego tanto equipos de sobremesa como dispositivos móviles, por lo que si tenemos problemas para conectarnos a una red Wi-Fi, deberíamos saber solventarlos de manera rápida y sencilla.
Precisamente de todo ello os vamos a hablar a continuación en el caso de que estéis intentando conectaros a una red inalámbrica desde vuestro PC y no podáis. Hay que tener en consideración que son varios los factores que aquí pueden influir de manera directa y que afectan negativamente a la conectividad del dispositivo. En este caso pueden influir elementos tales como la conectividad del propio equipo, el router, los controladores, el entorno que nos rodea y mucho más.
Esto quiere decir que, si nuestro PC no tiene conexión a Internet, pero el resto de los dispositivos cercanos siguen funcionando conectados a la Wi-Fi, algo pasa. De ahí precisamente que en estas mismas líneas os vayamos a mostrar una serie de soluciones rápidas y sencillas que en la mayoría de las ocasiones solventarán este problema. Además, las soluciones de las que os hablaremos a continuación están al alcance de cualquiera. Con esto os queremos decir que, aunque no tengamos demasiados conocimientos en estos temas, podremos solucionar el problema rápidamente.
Conecta tu equipo a cualquier Wi-Fi en segundos
Estas soluciones te permitirán conectar tu equipo a cualquier red de Wi-Fi a la que tengas acceso más rápido de lo que piensas.
Acércate al router: en este caso estamos hablando de una conexión inalámbrica que nos ofrece un punto de acceso, por lo que la distancia juega un papel clave. Además los equipos o paredes que haya entre medias también pueden estar afectando negativamente a nuestra conexión Wi-Fi. Acércate lo máximo posible al router y vuelve a probar a ver si se soluciona el fallo.
- Actualiza los controladores: en la mayoría de las ocasiones, especialmente si estamos trabajando con un ordenador portátil, la tarjeta de red viene incluida en el equipo. Si tenemos problemas de conexión lo recomendable aquí es actualizar los controladores de red, algo que podemos llevar a cabo rápidamente desde el Administrador de dispositivos. Una vez en este apartado, pinchamos con el botón derecho sobre la tarjeta de red y la podemos actualizar automáticamente.
- Asegura el hardware: también se puede dar el caso de que estemos intentando conectar a través de un dispositivo USB que nos proporciona conectividad inalámbrica. Sin embargo, este puede tener algún tipo de fallo de funcionamiento. Lo mejor que podemos hacer es probar este mismo dispositivo en algún otro equipo. Si el problema persiste ya sabemos dónde está el fallo.
- Ejecuta el solucionador de problemas: Windows nos ofrece una serie de funciones llamadas Solucionadores de problemas que se refieren a múltiples apartados del sistema. Desde la aplicación de Configuración, en Actualización y seguridad, nos encontramos con estos. Como os podéis imaginar hay uno específico para este tipo de fallos hoy llamado Adaptador de red que os recomendamos ejecutar.
- Las credenciales son correctas: la mayoría de las redes Wi-Fi a las que accedemos están protegidas por un nombre de red y su correspondiente contraseña. Es importante que nos aseguremos de que estamos introduciendo de manera correcta todos los caracteres de ambos elementos para poder acceder a esa red inalámbrica. En la contraseña como tal tendremos que distinguir entre mayúsculas y minúsculas, error bastante común.