Nuestros ordenadores vienen equipados con una serie de unidades de almacenamiento o discos duros que nos permiten guardar todo aquello que necesitemos. Pero este espacio es finito, de ahí el éxito que el almacenamiento en la nube está teniendo en los últimos años. Esto es algo que igualmente aprovechamos para nuestros documentos ofimáticos que creamos en Word.
De hecho, en estas líneas nos vamos a centrar en este conocido programa que nos permite crear y editar todo tipo de documentos de texto. Pero en determinados entornos de trabajo manejamos una buena cantidad de elementos de este tipo, por lo que debemos mantener una buena organización. Como suele ser habitual para todo ello Microsoft da la posibilidad de almacenar estos contenidos en la ubicación de disco que deseemos. Al mismo tiempo tenemos la posibilidad de echar mano del servicio de almacenamiento propio de la firma, nos referimos a OneDrive.
Este es el servicio de almacenamiento en la nube propiedad del gigante del software que podemos utilizar de manera gratuita con tan solo tener una cuenta de Microsoft. En un principio y sin pagar un solo euro disponemos de una cantidad de espacio suficiente, al menos para el usuario final, que nos permite almacenar documentos de la suite ofimática de manera directa, entre otras cosas. El uso de este espacio en los servidores de la firma tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Esto es algo de lo que os hablaremos a continuación para que podáis elegir la modalidad que más os interese en cada caso.
Cuándo nos interesa guardar DOCX en la nube
Una de las principales ventajas que nos presenta este servicio de Microsoft, al igual que sucede con otros muchos, es la accesibilidad. Lo que os queremos decir es que tendremos acceso a todos nuestros documentos de Word desde cualquier dispositivo o lugar del mundo. Basta con que dispongamos de una conexión a internet y las correspondientes credenciales para abrir nuestros DOCX de manera inmediata.
A todo ello le debemos sumar el ahorro en los discos duros locales del ordenador que esto supone. Cabe mencionar que todo ello se hace especialmente patente si trabajamos con archivos de gran tamaño que además de texto tienen contenidos multimedia.
Ventajas de usar el almacenamiento local en Word
Estos servicios remotos de los que os hablamos se vienen utilizando de unos años a esta parte. Sin embargo, con todo y con ello muchos usuarios están acostumbrados a utilizar sus discos duros locales. Una de las principales razones por las que algunos se decantan por este método de almacenamiento, es por todo aquello relacionado con la seguridad y la privacidad. No podemos olvidar que al utilizar la nube estamos guardando archivos en ocasiones muy sensibles, en servidores de otros.
Por tanto, llegados a este punto la nube no siempre es la mejor opción. Además, para acceder a esta documentación en un futuro vamos a necesitar disponer de las correspondientes credenciales de acceso remoto, lo que quizá no siempre sea posible. En el supuesto de perder ese correo o la contraseña para acceder a la cuenta de Microsoft, difícilmente podremos descargar los DOCX que hayamos ido almacenando. Tras todo lo comentado, dependiendo de las necesidades y modos de uso de cada uno, ya podréis elegir el método de guardado de vuestros documentos en Word más interesante.