Las extensiones de Chrome son tan útiles como peligrosas. Gracias a ellas podemos llevar las funciones de nuestro navegador web a un nuevo nivel, pero al mismo tiempo estas pueden ser utilizadas para espiarnos, rastrearnos y poner en peligro nuestra seguridad. Con el paso del tiempo, hay extensiones que van ganando una gran popularidad, como ha ocurrido con The Great Suspender, una de las más utilizadas para suspender pestañas inactivas y ahorrar RAM al navegar. Sin embargo, de un día para otro sus intenciones pueden cambiar, y pasan de ser una extensión útil y fiable a ser malware, como ha ocurrido con esta misma.
The Great Suspender siempre ha sido una de las extensiones consideradas «imprescindibles» para los usuarios de Chrome. Una extensión totalmente gratuita y de código abierto, gracias al cual se podía conocer a fondo su funcionamiento. Sin embargo, en junio de 2020, su creador vendió la extensión a una nueva organización desconocida. Y desde entonces, su seguridad y fiabilidad ha caído en picado.
No es raro que algunas empresas se interesen por programas y extensiones populares y hagan ofertas a los desarrolladores. Luego ya depende del propio desarrollador si decide vender su creación, y su alma, o no hacerlo. En el caso de The Great Suspender, el creador no tardó en aceptar la oferta que le hizo la compañía y dejarlo todo en sus manos. Y, sin darnos cuenta, la extensión se ha convertido en un auténtico spyware que debemos borrar de nuestro PC cuanto antes.
The Great Suspender se llena de scripts de seguimiento remotos
La versión 7.1.8 de esta extensión llegaba a la tienda de extensiones de Chrome con cambios bastante relevantes. Esta versión introducía una serie de scripts remotos y utilizaba análisis de seguimiento remoto. La extensión solicitó una serie de permisos adicionales, entre otros, el permiso para manipular todas las solicitudes web del usuario.
Google pasó por alto estos cambios, aunque a Microsoft no le gustaron y suspendió la extensión de su tienda de extensiones. El desarrollador subió una nueva versión después de ella, eliminando la secuencia de comandos, pero manteniendo los nuevos permisos.
Si la extensión es de código abierto, entonces ¿por qué nos preocupamos? Si entramos en su repositorio podemos ver que la última versión disponible es la 7.1.6, una versión de mayo de 2020, antes de la venta a la compañía desconocida. No hay ningún rastro de las versiones 7.1.7, 7.1.8 y la última, 7.1.9, que podemos encontrar en la Chrome Store.
Actualmente, la extensión eliminó los scripts de seguimiento, pero tiene permisos para controlar absolutamente todo nuestro tráfico. No sería raro que en cualquier momento volvamos a ver nuevos scripts de seguimiento, e incluso cómo inyecta publicidad en las webs que visitamos. Por lo tanto, lo mejor que podemos hacer es borrarla cuanto antes.
Eliminar la extensión de Chrome
Para desinstalar esta extensión de Chrome, lo que debemos hacer es escribir en la barra de direcciones «chrome://extensions/», la URL que nos permite acceder a la lista de extensiones instaladas en el PC. Una vez allí, localizaremos The Great Suspender y, haciendo clic sobre el botón «Quitar», la desinstalaremos del navegador.
Ahora solo nos queda acceder a este enlace y reportar a Google el mal uso de la extensión. Quién sabe, igual entre todos podemos conseguir que Google la marque como «peligrosa» y la elimine de la tienda, evitando que sus nuevos dueños se aprovechen de su popularidad para robar datos de sus usuarios.