A pesar de los servicios de correo electrónico entre los que podemos elegir y que llevan años entre nosotros, el de Google es la opción favorita de la mayoría. Muchos usuarios disponen de varias cuentas de Gmail con las que operan de manera constante.
Y es que debemos tener en cuenta que al igual que sucede con otros muchos servicios y plataformas del gigante de las búsquedas, usar este servicio es gratis. De ahí que muchos utilizan varias cuentas, por ejemplo para temas relacionados con su trabajo, el ocio, o para otras tareas. No en vano, en estos instantes podemos afirmar que en todo el globo Gmail tiene alrededor de 1800 millones de usuarios, que no es poco.
Por descontado, esto es algo que no ha pasado desapercibido para los actores maliciosos, donde ven un amplio campo de cultivo para sus malas artes. Con esto queremos decir que debido al extendido uso del servicio de correo que os mencionamos, lo ponen como foco para sus actividades maliciosas. En múltiples ocasiones en el pasado ya os hemos hablado y diversas campañas lanzadas para robar datos de los usuarios de Gmail.
Ahora os vamos a hablar de una advertencia que lanza la propia agencia norteamericana FBI. Básicamente, esta se centra en avisarnos acerca de un nuevo método que se acaba de detectar y que utiliza esta plataforma de correo electrónico en contra de los usuarios. En resumidas cuentas, nos hablan de una estafa cuyo principal objetivo es robarnos la cuenta de correo como tal, por lo que perderíamos el control sobre la misma.
Para muchos usuarios que tienen en cuenta de Gmail, tanto personal como profesional, la pérdida de esta puede suponer un serio quebradero de cabeza.
Esta es la estafa con la que perdemos la cuenta de Gmail
Y no solo eso, ya que este nuevo método también nos puede hacer perder nuestras cuentas de redes sociales asociadas al correo de Google. De ahí los peligros que esto supone y el aviso por parte de los expertos en seguridad del FBI. En concreto, esta campaña maliciosa intenta aprovechar una vulnerabilidad detectada en las cookies del propio servicio de correo electrónico.
Debemos tener presente que debido a este fallo de seguridad en las cookies de Gmail, los atacantes incluso pueden saltarse la protección de doble factor si la tenemos activada. Su puesta en marcha requiere que el usuario en un principio acceda a algún sitio web malicioso o haga clic en un enlace con algún tipo de malware. Esto descarga el software enviado por los atacantes que se instala en nuestro equipo sin que nos demos cuenta.
A partir de ahí estos actores maliciosos ya tienen la capacidad de robar las cookies de inicio de sesión del servicio de correo y hacerse con las credenciales. A partir de ahí ya podrán tomar el control de la cuenta y acceder a todo su contenido.
Con el fin de evitar esta estafa que os comentamos en Gmail, tenemos la posibilidad de llevar a cabo varias medidas de precaución. Para empezar en este caso no recomendable activar la opción de Recordar este dispositivo en el servicio de correo. Además, deberíamos borrar las cookies de manera periódica en nuestro equipo. Tampoco está de más echar un vistazo a los inicios de sesión más recientes que se han llevado a cabo en nuestra cuenta de Gmail.