Estos son los pros y los contras de los 6 navegadores web más usados del momento
Aunque los conocidos como navegadores de Internet llevan muchos años entre nosotros, lo cierto es que en los últimos tiempos y en buena medida debido a los avances logrados en las conexiones a Internet, tanto en calidad como en precio, que nos están ofreciendo los diferentes proveedores, los desarrolladores de estos programas han tenido que trabajar más duro que antaño.
Y es que, como ya viene siendo habitual, estemos trabajando con nuestros dispositivos móviles, o desde nuestro PC de sobremesa, lo cierto es que la mayoría ya tenemos el navegador abierto en todo momento, ya que el uso de Internet es constante.
Llegados a este punto, cada usuario tiene sus propias preferencias en este sentido, ya que unos priorizan unos apartados por encima de otros a la hora de decantarse por una de las múltiples propuestas de las que disponemos hoy día. Es por ello que cada desarrollador intenta ofrecer el producto más equilibrado posible para adaptarse de ese modo al mayor número de clientes.
Podemos decir que algunos apuestan por la versatilidad, otros por el diseño, la seguridad, la funcionalidad, la flexibilidad a la hora de ampliar sus funciones, el bajo consumo de recursos, el rendimiento, o la sencillez, entre otros puntos a tener en cuenta. Sin embargo, sea como fuere, con el paso de los años algunas de estas propuestas poco a poco se han ido ganando un sitio en este mercado, sector que por el momento viene claramente comandado por el software de Google, Chrome.
Sin embargo el gigante de las búsquedas no puede quedarse parado, ya que tiene otros perseguidores que, aunque lejos por el momento, están igualmente en constante crecimiento y en cualquier momento, por la razón que sea, pueden darse la vuelta las tornas. Este es el caso de Mozilla Firefox, Opera, Tor o incluso el software de Microsoft que tan poca aceptación está teniendo hasta la fecha, el sucesor del exitoso Internet Explorer, Edge.
Es por ello que en estas líneas vamos a hacer un repaso de las principales ventajas e inconvenientes que podemos encontrar en algunas de las propuestas de este tipo más extendidas en pleno año 2018.
Google Chrome
Empezaremos por el líder del mercado, como hemos comentado, ya que en estos instantes cuenta con más de un 50% de penetración en todo el mundo, lo que dice mucho a su favor. Decir que uno de los secretos de su éxito son las casi infinitas posibilidades de expansión de las dispone, todo ello gracias a las extensiones, tanto propias como de terceros, que podemos descargar e integrar en el navegador.
Al mismo tiempo y con el paso de los años, los ingenieros de Google lo han ido mejorando para ganar en rendimiento general, algo inevitable para el extendido uso de las mencionadas extensiones que utilizamos por regla general en este caso. Sin embargo, algo que se ha intentado, pero que no se ha conseguido resolver del todo, es el elevado consumo de recursos del sistema que hace Chrome, algo de lo que muchos de sus usuarios siguen quejándose en gran medida.
Mozilla Firefox
Esta es la que se podría considerar como la segunda alternativa más extendida hoy día, el eterno perseguidor, como dicen algunos. Sin embargo hace unos meses recibió una de las mayores, sino la mayor, actualización de su historia convirtiéndose en Firefox Quantum, lo que le ha hecho ganar en rendimiento y al mismo tiempo ganándose la confianza de muchos usuarios. Además, se ha logrado optimizar en gran medida el consumo de recursos del equipo, incluso trabajando con un número elevado de pestañas y se han introducido nuevas medidas para salvaguardar nuestra privacidad, algo muy importante en los tiempos que corren.
Eso sí, todavía no ha alcanzado la fluidez de Chrome en determinadas circunstancias, así como el número de complementos tampoco es igual, pero está creciendo a pasos agigantados.
Microsoft Edge
Cuando hablamos del navegador de Internet que la firma de Redmond preparó como sustito del exitoso durante años, Internet Explorer, hablamos de un software en el que la firma tenía puestas muchas esperanzas debido a que venía implementado en Windows 10, pero que no ha resultado ser así, ni por asomo. De hecho, hablamos de una propuesta que ronda el 5% de penetración, algo especialmente doloroso para Microsoft, más si tenemos en cuenta que es el navegador por defecto, al menos en principio, del sistema operativo.
Lo cierto es que como punto a su favor podemos destacar tanto la fluidez de su funcionamiento, integración con el sistema, además de las funciones relacionadas con la lectura que implementa. Sin embargo muchos usuarios siguen desconfiando de su seguridad y privacidad, tal y como sucedió en los últimos tiempos con Internet Explorer, y la cantidad de añadidos disponibles aún no es ni mucho menos comparable al de Chrome o Firefox, por ejemplo.
Opera
Opera es otro de esos navegadores que lleva una buena cantidad de años entre nosotros pero que, por una razón u otra, a pesar de tener adeptos en todo el mundo, nunca ha llegado a despegar del todo, al menos de una manera significativa. En estos momentos ronda en torno al escaso 1% de penetración, todo ello a pesar de que para muchos es un gran navegador de Internet. Así, uno de sus puntos más favorables es que resulta muy fluido en su funcionamiento gracias al modo Turbo del que dispone, que comprime el tráfico web y reduce la cantidad de datos que se transfieren.
Al mismo tiempo también cabe destacar las funciones de privacidad que integra, sin embargo, punto muy importante, al igual que en el caso anterior, dispone de muy pocos complementos que el usuario puede integrar en el software.
Internet Explorer
A pesar de la existencia de Edge, Internet Explorer sigue llegando instalado por defecto en Windows 10 para todos aquellos que quieran seguir usándolo, aunque su aceptación actual no tiene nada que ver con la de hace unos años. Y es que con el paso del tiempo ha venido perdiendo terreno ampliamente con respecto a sus competidores, en buena parte debido a los problemas que tuvo con la seguridad de nuestros datos. En IE 11 se han solucionado buena parte de estos problemas, pero ya no ha logrado ganar el terreno perdido, todo ello a pesar de que se trata de un navegador limpio, que consume pocos recursos del sistema, y bastante fluido.
Sin embargo, de nuevo esta es una propuesta que no puede competir con Chrome o Firefox en lo que se refiere a extensiones y complementos, por lo que sumado a la desconfianza que se ha ido ganado, ha quedado bastante apartado de la cabeza en este sector.
Tor Browser
Como muchos ya sabréis, en este caso os vamos a hablar del que para muchos quizá sea el principal referente en lo que a la seguridad y privacidad se refiere a la hora de movernos por Internet. Y es que para muchos, más que un navegador como tal, se trata de un conjunto de herramientas que se encargan de velar por nuestra privacidad cuando nos movemos por la Red. Así el tráfico es enrutado por nodos aleatorios de todo el mundo, por lo que seguir nuestro rastro por parte de terceros al usar Tor Browser, es harto complicado.
Es por ello que, como resulta evidente, la principal ventaja de usar esta propuesta es la privacidad que garantiza a sus usuarios, pero claro, todo esto tiene un precio, que es precisamente el mayor inconveniente que presenta Tor, nos referimos a su rendimiento, bastante más bajo que el de sus más directos competidores.
¿Cuál es vuestro navegador de Internet favorito?