De todos los sistemas operativos de Microsoft, posiblemente Windows XP sea el más querido los usuarios. Pese a que lleva sin soporte más de ocho años aún existen usuarios que se resignan a abandonarlo y siguen usándolo o manteniéndolo instalado, sobre todo en dispositivos antiguos. Si me manera habitual u ocasional necesitamos usarlo, hoy os vamos a contar cómo poder hacer capturas de pantalla desde el propio sistema operativo.
Si queremos realizar alguna captura de pantalla de cualquier elemento que tengamos a la vista en la pantalla de nuestro ordenador con Windows XP, podremos hacerlo con la tecla Impr Pant de nuestro teclado o bien de forma más completa con diversos programas desarrollados por terceros, que siguen ofreciendo compatibilidad con el clásico sistema operativo de Windows.
Capturar la pantalla en Windows XP
A diferencias de versiones posteriores del sistema operativo de Microsoft, Windows XP no cuenta con una herramienta propia de recorte de pantalla. Si embargo esto no quiere decir que no sea posible realizar capturas en XP de forma nativa sin necesidad de instalar programas adicionales, pues podremos hacerlo usando un botón. Eso sí, seguramente no sea todo fácil o intuitivo que debería ser, pero igualmente válido, pues sólo necesitaremos usar un botón «Imprimir pantalla» de nuestro teclado.
Haz la captura con la tecla ImpPnt
Lo primero será saber qué imagen queremos capturar. En este caso, a modo de ejemplo, haremos una captura del popular juego de Solitario de Windows. Una vez situado en pantalla, pulsaremos el botón de Imprimir pantalla (ImpPnt) de nuestro teclado, que suele estar ubicado en la parte superior derecha.
Al pulsar esta tecla, el sistema se encargará de hacer una copia de toda la imagen de la pantalla en el Portapapeles. En caso de que no queramos capturar toda la pantalla, haremos lo siguiente. Seleccionamos la ventana que deseamos capturar (en este caso el Solitario) y manteniendo pulsada la tecla ALT del teclado, pulsamos de forma simultánea el botón de Imprimir pantalla. De esta forma, la captura solamente se hará de la ventana seleccionada e igualmente se copiará en el Portapapeles. Éste, salvo que lo tengamos personalizado, sólo podrá guardar una copia a la vez, por lo que siempre guardará la última que hagamos, borrando la que hubiera anteriormente.
Una vez guardada la captura, ya sea a pantalla completa o de una ventana, lo siguiente que vamos a hacer es guardar la imagen en nuestro disco duro y la forma más sencilla es usar el clásico Microsoft Paint.
Pégala y guárdala como imagen con Paint
Para abrir Paint, disponemos de varias maneras, como hacer clic en Inicio y posteriormente en Ejecutar. Aquí escribimos mspaint y pulsamos Enter o en el botón de Aceptar.
Una vez abierto, ya podemos pegar la captura guardada en el portapapeles en el editor. Para ello, podemos optar por hacer clic en Editar dentro de la pestaña del menú y luego en Pegar. También podemos usar la combinación de teclas Ctrl + V para pegar directamente la imagen en Paint.
Una vez ya aparece la captura en Paint solo nos queda guardarla como archivo de imagen. Para ello, pulsamos en Archivo y posteriormente en Guardar. Ahora, le damos un nombre y un tipo de archivo (JPEG, BMP, PNG…) y hacemos clic en Guardar.
De esta forma tan sencilla, aunque algo más laboriosa de lo que debería ser, hemos podido realizar una captura de pantalla en Windows XP, sin necesidad de instalar ningún software adicional y guardarla como un archivo de imagen.
Usa aplicaciones de terceros
Pese a que en la actualidad las nuevas aplicaciones que se van desarrollando no suelen ser compatibles con sistemas operativos tan antiguos, lo cierto es que sí que podemos encontrar algunos softwares que siguen ofreciendo compatibilidad con Windows XP y que nos pueden servir de gran ayuda para realizar las capturas de pantalla.
Gadwin PrintScreen
Este programa nos permite llevar a cabo diferentes combinaciones de accesos rápidos con los que poder hacer una captura a pantalla completa, un área concreta y realizar recortes. Podemos guardar las capturas en formato JPEG, GIF y BMP, así como realizar ediciones básicas sobre ellas, como rotar, recortar o añadir un borde o sombreado. La aplicación es gratuita para uso doméstico y la podemos descargar desde su sitio web oficial.
Por defecto podemos hacer una captura de pantalla completa pulsando el botón de Imprimir pantalla, para optar por una captura de una ventana pulsamos Mayúscula + Imp pantalla. Por último, si queremos una captura de un área seleccionada hacemos clic en Ctrl +Imp pantalla. Una vez tomada la captura podemos hacer tareas básicas de edición como añadir un texto, recortar la imagen o girarla, así como ajustar su tamaño y añadir algunos efectos y filtros.
PicPick
Se trata de una útil aplicación todo en uno que nos va a permitir realizar capturas de pantalla y editarlas para modificar la imagen captada de forma rápida. Cuenta con funciones como el selector de color, paleta de colores, pizarra, regla, etc. Las capturas pueden ser a pantalla completa, en una ventana activa o de un área que hagamos de nuestro escritorio. Cuenta con una versión portable que no requiere de instalación y que podemos descargar gratis.
Una vez ejecutamos la aplicación en su parte superior nos permite crear una imagen nueva o abrir una existente. Mediante el botón Screen Capture podemos optar a diferentes tipos de pantalla a realizar, ya sea completa, una ventana, captura con scroll, un área o captura libre. Se ejecuta en segundo plano y se integra en la barra de tareas, por lo que con solo pulsar el botón derecho en su icono de la barra de tareas y se desplegará una lista de funciones. De esta forma no es necesario acceder a la aplicación para poder llevar a cabo todas y cada una de sus funciones.
Una vez realizada la captura se nos abre el editor donde encontraremos diferentes opciones a realizar como añadir efectos, rotar la imagen, ajustar el tamaño, añadir texto, etc. Cada una de las herramientas que lo incorpora cuenta con sus propias funciones que nos irán apareciendo a medida que vamos presionando su icono.