De entre los muchos componentes internos que forman parte del sistema Windows de Microsoft, el registro es de los más importantes, a la vez que uno de los más delicados. Tocar este apartado sin saber muy bien lo que estamos haciendo, puede dañar seriamente el software como tal y sus aplicaciones.
Hay que tener en consideración que el registro de Windows es un elemento especialmente dedicado a los usuarios más avanzados. Desde aquí tenemos la posibilidad de modificar cientos de configuraciones tanto del sistema operativo como de los programas que instalamos. Pero como os contamos, es importante que sepamos bien lo que estamos haciendo.
Si realizamos algún cambio erróneo a través del editor del registro, podríamos dañar el propio Windows o alguno de los programas que aquí hayamos instalado. A continuación os vamos a mostrar algunos ajustes que podéis realizar en el registro de Windows, y que deberías conocer. Hablamos de cambios básicos pero en los que igualmente debemos tener cuidado.
Es más, antes de hacer cualquier modificación aquí, deberíamos llevar a cabo una copia de seguridad del registro completo. Para ello accedemos al editor a través del comando regedit que ejecutamos en el cuadro de búsqueda, por ejemplo. Una vez en la nueva ventana nos situamos en la opción de menú Archivo / Exportar. Así volcamos todo el contenido del registro actual a un fichero en forma de copia de seguridad.
Una vez disponemos de este fichero que os comentamos, ya podremos aventurarnos a realizar los cambios que os vamos a mostrar a continuación en el registro.
Cambios básicos e importantes del registro de Windows
En la ventana que aparece del editor del registro nos encontramos con una enorme cantidad de entradas que podemos modificar. No tenemos más que navegar a las rutas que os vamos a mencionar a continuación para realizar los cambios mencionados en Windows. En ocasiones tendremos que crear nuevas claves inexistentes en nuestra versión del sistema operativo. Esto lo hacemos a través del menú contextual que aparece con el botón derecho del ratón.
Personaliza el menú contextual de Windows. Al hablar del menú contextual nos referimos al que aparece al pulsar con el botón derecho del ratón en cualquier apartado del sistema. Podemos modificar las opciones aquí existentes a través del registro desde la entrada que os mencionamos a continuación. Aquí podemos añadir los programas que deseamos que aparezcan en este menú creando las nuevas claves con el nombre de valor Icon. En información del valor, tecleamos la ruta de disco de la aplicación.
HKEY_CLASSES_ROOT/Directory/Background/Shell
Quitar la pantalla de bloqueo de Windows. Aunque no es lo más recomendable, podemos eliminar la pantalla que nos solicita la contraseña de acceso a Windows. No tenemos más que asignar el valor 1 a la entrada NoLockscreen en esta ruta:
HKEY_LOCAL_MACHINE/SOFTWARE/Policies/Microsoft/Windows
Personalizar las animaciones. El registro del sistema nos permite modificar las animaciones de los menús en Windows. Aquí no tenemos más que cambiar el valor de la entrada llamada MenuShowDelay, el número se refiere a los milisegundos que durará. Todo a través de esta ruta que os mencionamos:
HKEY_CURRENT_USER/Control Panel/Desktop
Activar el modo oscuro. Igualmente tenemos la posibilidad de aplicar el modo oscuro a todo el sistema operativo a través del editor del registro de Windows. En este caso tendremos que asignar el valor 0 a la entrada llamada AppsUseLightTheme. Esto es algo que logramos desde aquí:
HKEY_CURRENT_USER/SOFTWARE/Microsof/Windows/CurrentVersion/Themes/Personalize
Borrar la memoria virtual. En el caso de que nuestro equipo cuente con bastante memoria RAM y deseamos ahorrar espacio en disco, este es un cambio que deberíamos llevar a cabo. En el registro no tenemos nada que asignar el valor 1 a la entrada ClearPageFileAtShutdown. Lo logramos a través de la siguiente ruta:
HKEY_LOCAL_MACHINE/SYSTEM/CurrentControlSet/Control/Session Manager/Memory Management