Las conexiones VPN nos permiten reenviar nuestro tráfico a través de un servidor externo de manera que podamos ocultar nuestra IP y nuestro país de origen y podamos navegar de forma privada y anónima por Internet. Hoy en día podemos encontrar una gran cantidad de redes privadas virtuales (VPN) para elegir, tanto gratuitas (y no recomendadas) como de pago (mucho más fiables y seguras). Y, desde hoy, contamos con una opción nueva donde elegir, que nos llega de la mano del propio Google.
Google One es el plan de suscripción de Google por el cual, desde 1.99 euros al mes, podemos tener espacio de almacenamiento adicional en la nube de Google para guardar nuestros archivos o nuestras fotos, así como otras ventajas adicionales. Podemos elegir entre varios planes el que mejor se adapta a nosotros, partiendo del plan de 100 GB o 1.99 euros, hasta el más completo, de 2 TB, por 9.99 euros al mes. Además de tener más espacio de almacenamiento, este último plan incluye un VPN gratis para poder proteger las conexiones de nuestro móvil Android o iOS. Y, ahora, también de Windows o macOS.
Así funciona el VPN de Google en Windows
Si somos usuarios del plan de 9.99 euros al mes de Google One, además de los 2 TB de almacenamiento en la nube, también vamos a poder hacer uso de esta red privada de Google para proteger las conexiones de nuestro móvil. Esta podemos activarla o desactivarla cuando queramos simplemente con un interruptor que encontramos en la app de Google One y, así, podremos reducir el rastreo y seguimiento online a la vez que mejoramos nuestra privacidad.
Desde hoy, esta VPN también llega a todos los usuarios de Windows. Simplemente tenemos que bajar e instalar en nuestro ordenador la app de Google One, iniciar sesión con nuestra cuenta de Google y activar o desactivar la conexión segura con el interruptor, muy parecido a como lo hacemos con el móvil.
Además, es importante tener en cuenta que esta VPN tiene algunas limitaciones. Por ejemplo, Google no nos permite elegir el país por el que vamos a salir a Internet, por lo que no podemos usarla para evitar las restricciones geográficas. Y tampoco podemos usarla para ver deportes en directo o acceder a otro contenido en streaming. De hacerlo, Google puede cortarnos la conexión.
También es importante tener en cuenta que este servicio no está disponible en todos los países. España, por suerte, sí es uno de ellos, por lo que desde nuestro país vamos a poder usar esta conexión privada virtual sin problemas.
Otros VPN muy sencillos para elegir
La verdad es que la VPN de Google no aporta gran cosa, y tampoco destaca sobre otros muchos servicios que hacen lo mismo. Ni nos permite elegir ubicación, ni nos ofrece otras muchas opciones para personalizar al máximo nuestras opciones de privacidad. Para una protección tan básica tenemos otras opciones donde elegir, como el VPN de Mozilla, que podemos disfrutar por 60 dólares al año, o el VPN de Opera, que podemos usar de forma totalmente gratuita.
También tenemos otras VPN mucho más completas y seguras, como puede ser NordVPN, o VPN gratis, que debemos usar con mucho cuidado pero que nos pueden servir para salir del paso, como es el caso de Urban VPN.