Los controladores, o drivers, son una de las partes más importantes a la hora de hacer que nuestro ordenador funcione bien. Cuando instalamos el sistema operativo, o conectamos un nuevo dispositivo al PC, Windows instala una serie de controladores genéricos para hacer que funcione. Y, si no los hay, los busca y descarga directamente desde Windows Update. El problema es que estos no son lo mejor para sacar todo el provecho a algunos componentes del PC. Y, además, suelen ser versiones antiguas y obsoletas. Por ello, una de las tareas de mantenimiento esenciales de cualquier PC es actualizar estos drivers. Aunque esto puede ser una tarea muy tediosa.
La mejor forma de actualizar los controladores del PC es ir, componente a componente, a la página del del fabricante y bajar desde allí la última versión. Debemos repetir esto para todo el hardware, tanto para la placa base (chipset, CPU, audio, almacenamiento, etc) como a la tarjeta gráfica, teclado, ratón, micrófono, mando para jugar, etc. Esto, además de complicado, suele llevar mucho tiempo. Y, por ello, muchos usuarios deciden apostar por programas que, en teoría, automatizan esta labor.
IObit Driver Booster, la forma más rápida de actualizar los drivers
IObit Driver Booster es un programa gratuito (con versión de pago) cuya finalidad es ayudarnos a analizar los drivers instalados en nuestro PC, detectar todos aquellos controladores obsoletos, y permitirnos instalar las nuevas versiones, todos ello con apenas un par de clics. Este software cuenta con una base de datos con más de 6 millones de controladores para poder reconocer e instalar prácticamente cualquier dispositivo, interno o externo, que conectemos al PC. Además, estos controladores se han obtenido desde las webs de los fabricantes, y han pasado las pruebas Microsoft WHQL para garantizar el correcto funcionamiento del PC.
Si no tenemos tiempo, o conocimientos suficientes de informática, es un excelente programa al que podemos recurrir. Sin embargo, no debemos confiar plenamente en él, ya que siempre hay una probabilidad, por pequeña que sea, de que algo salga mal y solucionar implique invertirle más tiempo del que deseemos.
¿Qué problemas podemos tener?
Por desgracia, estos programas no hacen magia. Como hemos explicado, la actualización de los controladores se realiza mediante una enorme base de datos creada, y gestionada, por ellos mismos. Y esta base de datos puede ocurrir, o bien que esté actualizada (algo común, sobre todo, con los drivers WHQL), o que tenga algún error y nos instale en el PC un driver que no corresponde con nuestro componente. Y aquí empiezan los problemas.
Es verdad que este tipo de programas siempre suelen hacer una copia de seguridad de los controladores que tenemos instalados de manera que, si tenemos algún problema, podamos revertir los cambios. Pero ya nos va a llevar más tiempo restaurar dicha copia que si lo hubiéramos hecho a mano desde el principio. Suele ser habitual (según nuestra experiencia) que esto ocurra al actualizar los drivers de audio, e instalar unos genéricos (de Realtek, por ejemplo) en lugar de los optimizados por el fabricante de la placa base.
Además, IObit Driver Booster es un programa gratuito, con funciones y características limitadas para los usuarios que paguen. Es decir, si queremos hacer uso de todas las funciones que nos ofrece este programa tendremos que pagar una suscripción. Y, a pesar de pagarla, veremos banners de otros programas de la compañía, algo que puede resultarnos molesto.