Cada vez son más los que buscan la oportunidad de ganarse la vida en Internet. Sin embargo, la verdad es que ahora mismo está muy complicado. Las redes sociales y las plataformas de streaming están más que saturadas, el dinero se va siempre para los mismos, y es imposible abrirse un hueco en ellas, y mucho menos empezando de cero. Sin embargo, hoy aparece una nueva oportunidad de ganar dinero en Internet. Y todo gracias a Telegram.
Seguro que conoces Telegram. Y, si no, habrás oído hablar de él por el intento de bloqueo a nivel de España que ha sufrido la semana pasada. Esta plataforma de mensajería, aunque pretende competir con WhatsApp, en realidad va mucho más allá que la herramienta de Meta, yendo siempre un paso por delante en cuanto a innovación. Además, también se trata de una herramienta mucho más social, donde millones de usuarios utilizan los grupos y canales de Telegram para estar al día de novedades o avisos de todo tipo.
Telegram + Publicidad = Win-Win
Aunque Telegram es gratis, obviamente hace mucho dinero. Aunque nunca veremos publicidad en los chats ni grupos privados, los canales sí que suelen tener ciertos anuncios (que no dependen del creador del canal) que ayudan a la plataforma a mantener sus gastos. Además, tiene una modalidad de «Telegram Premium» que cuenta con una buena cantidad de añadidos para mejorar la experiencia de los usuarios.
El dinero generado de estos anuncios iba íntegramente para Telegram. Hasta hoy. Y es que la compañía acaba de anunciar un nuevo plan de recompensas para creadores con el que busca incentivar a los usuarios a crear canales dentro de la plataforma. Este plan recompensará a los creadores de los canales con un 50% de los ingresos que se generen de la publicidad mostrada dentro de sus canales.
La única condición para poder optar a este nuevo plan de recompensas es que el canal cuente con, al menos, 1000 usuarios. Los propietarios del canal pueden elegir qué hacer con ese dinero, si bien quieren retirarlo sin comisiones, o reinvertirlo en crear sus propios anuncios en Telegram, nuevos nombres de usuario coleccionables o montar sorteos de suscripciones Premium para sus seguidores.
La publicidad no se basará en los datos de los usuarios, sino que será exclusiva de las campañas que se lancen para los canales. Y, además, solo aparecerá en los canales, por lo que el resto de la interfaz, y los chats, estarán libres de anuncios.
TON, la criptomoneda de moda
Además de recompensar a los creadores de contenido, Telegram quiere convertirse también en una nueva plataforma publicitaria. Pero, en lugar de ofrecer costosas campañas de difusión, como puede ser Google Adwords, va a aprovecharse de TON.
TON es una criptomoneda muy usada dentro de Telegram en canales y en bots. Sus ventajas son que ofrece unas comisiones muy bajas y, al mismo tiempo, unas velocidades de transacción muy elevadas. De esta forma, todos los usuarios que quieran promocionar sus canales dentro de esta plataforma de mensajería, podrán hacerlo de forma muy sencilla pagando tan solo un puñado de Toscoins. Podrán tener el control absoluto de su campaña publicitaria, y hasta elegir en qué canales quieren aparecer.
Simplemente elegiremos el mensaje, el enlace, el límite de dinero que queremos gastar y los canales donde vamos a aparecer. Y, tras pagar en TON, Telegram se encargará del resto.
¿Y con los canales de WhatsApp?
De sobra sabemos que WhatsApp va siempre al rebufo de Telegram. Cuando la plataforma de mensajería azul lanza una nueva función o característica, Meta también acaba por llevarla a WhatsApp. Y, por norma general, suele hacerlo incluso mal. Aunque es cierto que WhatsApp tiene canales, estos no son, ni de lejos, parecidos a los que nos ofrece Telegram, ni en funcionalidad ni en características u otras funciones.
Por el momento, Meta no ofrece ningún tipo de recompensa para los usuarios que decidan crear sus propios canales. Además, aunque Meta decidiera hacer algo similar para potenciar la creación de estos canales, el reparto de beneficios no sería 50/50 como en Telegram, sino más bien, con suerte, un 20/80. E incluso nada, quedándose la compañía con el 100% de los ingresos de esta publicidad que, sí o sí, verían todos los usuarios.