Desarrollar un videojuego hoy en día cuesta mucho dinero. Y ese coste se traduce a la hora de añadirlo a nuestra biblioteca. Actualmente, una gran producción cuesta de lanzamiento 80 euros. Y, muy pronto, nos vamos a acercar a los 100 euros. Un ejemplo de eso es el Mario Kart World de la Nintendo Switch 2, que ya cuesta 89.99 euros. Y el GTA VI, que apunta claramente a superar la barrera de los 100 euros tal como declaró Strauss Zelnick, CEO de Take-Two. El problema está cuando un videojuego llega al mercado con fecha de caducidad. Y es justo aquí donde el movimiento Stop Killing Games entra en acción.
Stop Killing Games es un movimiento que nació en abril de 2024, justo cuando Ubisoft anunció el cierre de los servidores de The Crew. Este juego se lanzó el 1 de diciembre de 2014 para PC, PlayStation y Xbox, y ha estado en marcha durante 10 años. La decisión de Ubisoft de cerrar los servidores puede responder a un descenso en su base de jugadores. Los datos de plataformas como SteamDB mostraban que, en los meses anteriores al anuncio, el número de jugadores simultáneos había caído por debajo de 150. Los motivos son, entre otros, el lanzamiento de The Crew 2 (2020) y The Crew Motorfest (2023), sus dos secuelas.
Pero hay un problema: este juego obliga a estar conectado siempre a Internet. Incluso para jugar al modo de un jugador. Por lo tanto, el cierre de los servidores dejará el juego totalmente inutilizable.

Lo mismo va a ocurrir con Anthem. Este shooter con toques RPG de EA depende también de una conexión permanente a Internet. Y la compañía ha anunciado hoy mismo, 4 de julio de 2025, que el 12 de enero de 2026 cerrará sus servidores, quedando el juego totalmente inutilizable.
Qué busca Stop Killing Games
Este movimiento lucha porque las desarrolladoras se encarguen de que los juegos sigan siendo funcionales una vez acabe su soporte y se cierren los servidores. Esto se puede hacer de dos formas diferentes.
Habilitando un modo offline. Algunas compañías, como Microsoft, hicieron esto mismo con Redfall, un juego que requería conexión a Internet permanente. Cuando Arkane anunció el cierre de los servidores, la desarrolladora prometió un último parche en el que se habilitaba el modo offline para que, cuando los servidores cerraran, el juego se pudiera seguir jugando sin problemas. Y cumplió su palabra.
Permitir servidores privados. En última instancia, si no quieren desarrollar un modo offline, lo que pueden hacer es permitir a los usuarios montar sus propios servidores privados. De esta forma, quien quiera jugar, podrá hacerlo montando una instancia en su PC.
Este movimiento no pide a las desarrolladoras que se liberen el código ni nada parecido. Lo que quieren es que los juegos que se han comprado (da igual que sean en formato digital, o en físico) puedan seguir funcionando pese al cierre de servidores.
Acciones legales en marcha
Esta plataforma empezó a funcionar el año pasado cuando Ubisoft anunció el cierre de los servidores de The Crew. Entonces, comenzó la Iniciativa Ciudadana Europea (ICE), donde busca recoger 1 millón de firmas para que la Comisión Europea evalúe legalmente la posibilidad de obligar a las empresas a mantener los juegos activos o proporcionar alternativas. El plazo para recoger el millón de firmas acaba el 31 de julio de este año, y a fecha de 4 de julio de 2025 ya se han alcanzado las 1.083.030 firmas. Sin embargo, se sospecha que algunas firmas puedan venir de fuera de la Unión Europea, o se hayan generado con bots, por lo que se piden otras 400.000 firmas adicionales para ir sobre seguros.

Al menos, con 1 millón de firmas, la Comisión Europea deberá responder oficialmente, y podría llegar a abrir audiencia pública o proponer reformas.
Además, también han iniciado una petición independiente al Parlamento de Reino Unido para que estudien la misma posibilidad. El objetivo, en este caso, eran 100.000 firmas, y las han conseguido este mismo mes. Por lo tanto, el Parlamento de Reino Unido sí evaluará la petición.
Otras peticiones que se han elevado a causa del cierre de los servidores de The Crew son:
- Francia: queja al DGCCRF. El problema ha escalado hasta los niveles más altos de la agencia, y está a la espera de decisión.
- Alemania: presentada queja al Verbraucherzentrale. El problema ha escalado, y está a la espera de decisión.
- Australia: queja presentada al parlamento australiano. Dijeron que no iban a actuar, y que presentaran la solicitud a la ACCC. EL problema ha escalado y está a la espera de respuesta.
- Canadá: petición presentada al Parlamento Canadiense sobre la destrucción de videojuegos. No lo han considerado importante, y no actuarán.
- Estados Unidos: quejas presentadas a la FTC. Sin respuesta, como era de esperar.
- Brasil: presentada una demanda contra Ubisoft por «The Crew». Desestimada por no tener las cifras de ventas del juego.