Muchos son los usuarios que utilizan más de una cuenta de correo de Gmail, para separar el trabajo, estudios y ocio y que nuestra dirección de correo electrónico no se convierta en un caos cuando buscamos información.
Sin embargo, para consultar cada una de las cuentas de correo que tenemos, debemos cerrar sesión y volver a iniciar, con el riesgo de conlleva el no cerrar correctamente la sesión personal e intentar conectarnos a nuestro centro educativo o trabajo con una cuenta que no tiene acceso o que no queremos compartir con otras personas.
Gmail es una de las plataformas de correo electrónico más populares y utilizadas en todo el mundo. Gran parte de su éxito se debe a que es necesario tener una cuenta de Gmail para poder acceder a todos y cada uno de los servicios de Google. Además, también es necesario si utilizamos un dispositivo Android.
Pero, más allá de estas necesidades, Gmail es la mejor plataforma de correo electrónico que podemos encontrar en el mercado, no solo por los 15 GB de espacio (que se comparten con Google Drive y Google Fotos) sino que, además, incluye un gran número de funciones adicionales que muchos usuarios desconocen.
Una de estas funciones es la que nos permite unificar en una misma cuenta de Gmail otras cuentas de la misma plataforma o de otras. De esta forma, si queremos consultar los correos, lo único que debemos hacer es introducir los datos de la cuenta principal y gestionarlos.
Cómo sincronizar dos cuentas de Gmail
El proceso que os mostramos a continuación nos permite sincronizar dos o más cuentas de correo electrónico, ya sean de Gmail o de cualquier otra plataforma. Lo primero que debemos hacer es acceder a la cuenta principal, es decir, a la cuenta que nos permitirá consultar todos los correos electrónicos que recibamos en otras cuentas de Gmail u otras plataformas.
A continuación, accedemos a la cuenta de Gmail secundaria, cuenta de correo que vamos a sincronizar con la principal para que desde esta se pueda acceder a su contenido sin iniciar sesión en la secundaria. Seguidamente, accedemos a las opciones de configuración de Gmail pulsando sobre la rueda dentada situada en la esquina superior derecha y pulsando en Ver todos los ajustes.
A continuación, pulsamos en la pestaña Reenvío y Correo POP/IMAP. Dentro de esta pestaña, dentro del apartado Reenvío, pulsamos en el botón Añadir una dirección de reenvío.
En el siguiente paso, debemos introducir la dirección de correo electrónico donde queremos recibir los correos electrónicos de esta cuenta, por lo que debemos introducir la dirección de correo de la cuenta principal.
Una vez pulsamos en Siguiente, se nos pedirá verificar que somos los legítimos propietarios de la cuenta desde donde vamos a realizar el reenvío.
Una vez hemos confirmado que somos los legítimos dueños de esa cuenta, se mostrará una ventana en la que nos invita a confirmar que queremos realizar el reenvío de todos los correos a otra cuenta. Para confirma que queremos realizar el proceso, pulsamos en el botón Continuar.
Además, también vamos a recibir un email de confirmación en la cuenta donde vamos a recibir los correos, es decir, en la cuenta principal. Este email contiene un enlace sobre el que debemos pulsar para finalizar el proceso y confirmar que queremos realizar el reenvío automático de los correos.
Una vez hemos confirmado que ambas cuentas pertenecen a nosotros, volvemos a la pestaña Reenvío y Correo POP/IMAP, donde se mostrará la dirección de correo que hemos confirmado. A continuación, debemos seleccionar la casilla Reenviar una copia del correo entrante a seleccionando la cuenta que se muestra por defecto y que es la que hemos establecido en el proceso anterior.
A continuación, debemos seleccionar que es lo que queremos que pase con el correo una vez reenviado de entre las cuatro opciones que nos ofrece:
- Conservar la copia de Gmail en Recibidos
- Marcar la copia de Gmail como leída
- Archiva la copia de Gmail
- Eliminar la copia de Gmail
A no ser que tengamos la necesidad de responder a los correos que recibimos en la cuenta secundaria, lo ideal es seleccionar Eliminar la copia de Gmail para así liberar espacio en la cuenta secundaria y evitar que se llene el buzón de correo. Pero, si queremos conservar una copia y marcarla como leída, la opción que debemos elegir es Marcar la copia de Gmail como leída.
Finalmente, nos dirigimos a la parte inferior de este apartado y pulsamos en Guardar cambios. A partir de este momento, todos los correos que recibamos en la cuenta secundaria se mostrarán en la principal directamente en la bandeja Recibidos.
Filtrar los mensajes reenviados
Gmail no marca, en la bandeja de entrada principal, los mensajes que han sido reenviados desde otras cuentas, por lo que, a simple vista, resulta imposible identificarlos. La solución a este problema es tan sencilla como crear un filtro que añada una etiqueta a todos los mensajes que proceden de una cuenta en concreto. Para hacerlo, accedemos a las opciones configuración de Google y pulsamos en la pestaña Filtros y direcciones bloqueadas y pulsamos en Crear filtro.
Todos los correos que recibimos de otras cuentas tienen como destinatario el email de las otras cuentas, por lo que es lo que debemos establecer para crear un filtro.
Seguidamente, pulsamos en Crear filtro y en la siguiente ventana, marcamos la casilla Aplicar etiqueta y seguidamente en Nueva etiqueta, cuyo nombre puede ser la dirección de correo electrónico de donde procede el correo.
Finalmente pulsamos en Crear filtro. A partir de este momento, todos los correos que recibamos de otra cuenta de Gmail recibirán la etiqueta que hayamos creado y estarán disponibles dentro esa etiqueta Carpeta, en la carpeta derecha de Gmail.
Alternativa: usar un cliente de correo
Siguiendo los pasos anteriores podemos unir todas las cuentas de correo que tengamos en una sola. Sin embargo, puede llegar a ser un poco complicado trabajar con todas ellas de esta forma, e incómodo si mezclamos las personales con las familiares.
Como alternativa, podemos recurrir a un cliente de correo electrónico. Estos programas tuvieron una gran popularidad en los años 90 y los 2000, aunque actualmente están algo en desuso, a pesar de ser herramientas muy útiles. Tenemos varias opciones, como, por ejemplo, Outlook, el cliente de Microsoft, o Thunderbird, una alternativa libre y gratuita para gestionar todas las cuentas de correo que queramos desde un solo lugar.