Trucos para volver a usar USB y discos duros imposibles de formatear

Trucos para volver a usar USB y discos duros imposibles de formatear

Rubén Velasco

A menudo solemos guardar nuestros archivos personales en un disco duro externo, memorias USB e incluso en tarjetas de memoria. Gracias a ellos podemos llevar nuestros datos siempre con nosotros, o usarlos a modo de copia de seguridad para que, si algo falla, podamos recuperar estos datos. Sin embargo, ningún dispositivo electrónico es eterno ni va a durar para siempre, y es que es posible que, en cualquier momento, al conectarlo al PC nos encontremos con que no funciona.

Cuando conectamos un disco duro o un USB al ordenador y Windows no lo reconoce, o lo reconoce, pero no es capaz de montarlo y utilizarlo, empezamos a temblar. ¿Qué habrá pasado con nuestros datos? Dependiendo del tipo de problema es muy probable que se hayan perdido, y tengamos que recurrir a un programa como TestDisk para que, con suerte, podamos recuperarlos. Pero lo más habitual es que sea, o bien un fallo mecánico (y que, por lo tanto, no podremos hacer nada) o un fallo lógico.

En caso de que se trate de un problema lógico, con estos trucos vamos a poder hacer que el disco duro funcione de nuevo y, aunque perdamos los datos, nos ahorraremos tener que comprar un disco duro nuevo.

Por qué mi disco duro no funciona y no puedo formatearlo

Los motivos por los que un disco duro, una memoria USB o una tarjeta SD ha dejado de funcionar pueden ser muy variados. Por ello, para descartar que sea un problema de nuestro PC y asegurarnos de que es la unidad la que está fallando lo que debemos hacer es intentar conectarlo a otro ordenador para comprobar si funciona. Si en el otro ordenador tampoco funciona, casi seguro será culpa del dispositivo. En caso de que otros ordenadores reconozcan los datos, entonces debemos buscar la causa por la que no funciona en nuestro PC.

Si se trata de un disco duro externo, por ejemplo, puede ocurrir que lo que ha fallado es la controladora de la carcasa. Este es el menor de los males, ya que comprando una carcasa externa nueva podremos recuperar el disco duro y todos los datos. Esto solo ocurre con los discos duros externos. Si tenemos una memoria USB o una microSD, si falla la controladora tendremos que comprar un dispositivo nuevo.

Los motivos lógicos por los que puede fallar un disco duro son muy variados. Por ejemplo, un fallo en la tabla de particiones puede dejar todo el disco duro utilizado, así como un fallo en el firmware de este. También puede ocurrir que se haya copiado un virus que sea el que está impidiendo que podamos usar el dispositivo.

Por último, aunque parece algo obvio, una causa muy común es por activar el bloqueo de escritura. Las tarjetas SD, y algunas memorias USB y discos duros, traen un interruptor que nos permite bloquear la escritura en ellos. Debemos asegurarnos de que estas medidas de seguridad están desactivadas para poder escribir sin problemas en las unidades.

Trucos para reparar el disco duro

Mientras la causa por la que no funciona nuestro disco duro sea por un problema lógico no tenemos por qué preocuparnos. Siguiendo los siguientes pasos os vamos a explicar cómo solucionar los problemas de manera que podamos volver a usar el disco duro, la memoria USB o la tarjeta de memoria sin problemas.

Identificar el dispositivo

Seguro que tenemos más de un disco duro, o USB, conectado al ordenador. Por lo tanto, antes de continuar, es necesario saber exactamente cuál es la unidad que nos está dando problemas. Si Windows reconoce la unidad y la tiene montada dentro de «Este equipo», podemos verlo muy fácilmente haciendo clic sobre el botón derecho sobre ella y abriendo el panel de Propiedades. Si no, debemos ir al administrador de dispositivos (que podemos abrir haciendo clic con el botón derecho sobre el botón de inicio) y fijándonos en el apartado «Unidades de disco«.

Discos conectados a PC Windows

Comprobar que el USB funciona y tiene potencia

A veces, el problema no es que el disco esté dañado, sino que lo estamos conectando a un puerto USB en el que no funciona. Por ejemplo, las memorias y los discos USB 3.0 necesitan más voltaje del que puede proporcionar un puerto USB 2.0, por lo tanto, si lo estamos conectando a uno de estos veremos este problema.

Lo primero que tenemos que hacer es comprobar que el puerto USB funciona correctamente. Para ello bastará con conectar cualquier otro dispositivo a este puerto y ver si funciona. Si tenemos, por ejemplo, una luz USB podremos saber si tiene voltaje (aunque sea insuficiente). Si conectamos una memoria cualquiera al puerto y la reconoce Windows es que funciona.

Entonces, el problema puede ser que no tenga potencia suficiente. Los discos duros externos, por ejemplo, necesitan 5 voltios entre 1 y 1.5 amperios. Y los puertos USB 2.0 (y muchos falsos puertos 3.0 de las torres) solo proporcionan 0.5 amperios. En ese caso, lo que debemos hacer es comprar un cable doble USB y conectarlo a dos puertos USB a la vez. Uno de los cables es de datos y el otro solo de alimentación, por lo que no habrá problemas.

Eliminar por completo las particiones

Puede que la tabla de particiones se haya corrompido por algún motivo: un virus, un corte de corriente, una mala desconexión, un error en Windows… Si esta está corrupta, Windows no será capaz de montar el disco duro, y tampoco nos dejará hacer nada con él al no poder identificar esta tabla de particiones y gestionarla correctamente.

Aunque cualquier gestor de particiones nos puede permitir limpiar esta tabla y generarla de nuevo, nosotros vamos a recurrir a la herramienta más avanzada y de más bajo nivel: Diskpart. Esta herramienta viene incluida en Windows y se ejecuta desde una ventana de CMD con permisos de administrador para tener control total sobre el sistema.

Abrimos la ventana de CMD, ejecutamos el comando «diskpart», y cuando se ejecute escribiremos «list disk» para ver una lista con todas las unidades que tenemos conectadas.

Diskpart W10 - 1

Debemos elegir la unidad que queremos limpiar. Con cuidado. Podemos fijarnos en el tamaño total, en el disponible… en lo que sea. Pero es importante asegurarnos de elegir la unidad que queremos borrar. En nuestro caso, por ejemplo, vamos a hacerlo con Disk 2. Ejecutamos el comando «select disk 2» (cambiando 2 por nuestro disco) y, una vez seleccionado, ejecutaremos el comando «clean».

Diskpart W10 - 2

Cuando acabe, se habrá destruido la tabla de particiones y todos los datos que se guardaban en el disco. El disco estará como sin formato. Por ello, para usarlo, tendremos que crear de nuevo particiones como vamos a explicar en el último punto.

Formatear a bajo nivel

Otra forma de la que podemos recuperar un disco duro o una unidad es realizando un formateo a bajo nivel. Lo que se hace con esta tarea es eliminar las particiones, el MBR, la tabla de particiones y todos los índices de los archivos que hay para, después, inicializar cada uno de los sectores del disco. Así, si hay algo que no está funcionando bien, podremos acabar con ello.

Para llevar a cabo esta tarea podemos usar un programa llamado HDD Low Level Format. Como su nombre indica, este software nos permitirá realizar un formateo a bajo nivel a cualquier unidad (disco duro, USB, SD, etc) que tengamos conectado al PC.

HDD Low Level Format

El proceso es lento, pero cuando acabe tendremos la unidad como recién salida de fábrica. Eso sí, para poder usarla tendremos que crear una nueva tabla de particiones y, al menos, una partición principal.

Utilizar programas especializados en formatear unidades

Tanto si hemos usado Diskpart, como si hemos realizado un formateo a bajo nivel, Windows no mostrará el disco duro ni la memoria en Este equipo porque ni tendrá tabla de particiones ni particiones creadas. Por ello, el siguiente paso será crearlas nosotros mismos. Esto podemos hacerlo de varias formas, ya sea usando el administrador de discos de Windows 10, o programas de terceros para el mismo fin.

Llegados a este punto debemos tener en consideración que, en un principio, el propio sistema operativo de Microsoft nos propone una interesante herramienta para todo ello. Sin embargo quizá los usuarios más avanzados echen en falta determinadas funciones para gestionar sus unidades de disco que sí encuentran en programas de terceros.

Administrador de discos

Podemos inicializar y crear la nueva tabla de particiones desde el administrador de discos de Windows. Para ello, lo que debemos hacer es pulsar con el botón derecho del ratón sobre el botón del inicio y elegir «Administrador de discos«.

Al abrirlo, veremos un mensaje en el que nos aparecerá la unidad que está sin inicializar, y un asistente desde el que podremos elegir si queremos crear una tabla de particiones MBR o GPT.

Administrador de discos - Inicializar disco

Una vez inicializado el disco, el siguiente paso será crear ya las nuevas particiones. Esto podemos hacerlo igualmente desde este administrador de discos, o usar el siguiente programa.

Administrador de discos - crear particiones

Debemos elegir el tamaño que queremos que tenga la nueva unidad, el nombre y el sistema de archivos en el que queremos formatearla. Cuando terminemos el asistente tendremos ya una nueva partición creada que podremos utilizar para guardar lo que queramos.

Lo mejor:

  • Es una herramienta integrada en el propio sistema operativo de Microsoft, lo que nos evita el tener que instalar aplicaciones de terceros.
  • Ofrece todas las funciones básicas para el trabajo con las unidades de almacenamiento que tengamos conectadas en el ordenador sin apenas consumir recursos.
  • Con el paso del tiempo Microsoft ha mejorado esta funcionalidad para así adaptarse a las últimas tecnologías relacionadas con las unidades de disco.

Lo peor:

  • Los usuarios más avanzados y que quieran tener un mayor control sobre sus unidades de almacenamiento, seguramente echen en falta ciertas funciones qué encontramos en programas de terceros.
  • En ocasiones el manejo y uso de esta herramienta de Windows puede resultar un tanto confusa debido a la interfaz de usuario que presenta.

MiniTool Partition Wizard

MiniTool Partition Wizard es uno de los mejores programas que podemos encontrar hoy en día para administrar discos y crear o borrar particiones. Llegados a este punto, Windows ya debería volver a detectar el disco duro sin problemas, aunque al no tener particiones creadas no podremos usarlo.

Este programa nos va a permitir (entre otras muchas cosas) crear las particiones de nuevo para poder volver a usar el programa con normalidad. Incluso este software cuenta con una herramienta llamada «Partition recovery» que nos va a permitir escanear la superficie y, si hay rastro de los datos, nos permitirá recuperarlos.

MiniTool Partition Wizard - Recuperar particiones

La recuperación será posible si no hemos hecho un formateo a bajo nivel ni hemos sobrescrito los datos. Si lo hemos hecho, la verdad es que recuperar los datos será mucho más complicado, casi imposible.

Este programa es gratis, y desde aquí podemos descargar MiniTool Partition Wizard.

A favor:

  • Se trata de una aplicación gratuita que lleva muchos años entre nosotros y que no ha parado de mejorar y adaptarse a los tiempos que corren y a las unidades de almacenamiento actuales.
  • Por defecto nos presenta múltiples funciones relacionadas con el trabajo unidades de disco y sus correspondientes particiones.
  • La interfaz de usuario simplifica el trabajo en este programa incluso para usuarios no demasiado experimentados en estas lides.

En contra:

  • Determinadas funciones integradas en el programa consumen más recursos del equipo de lo que cabría esperar en un principio.

Probar el disco duro en otro ordenador

Hay ocasiones en las que puede ocurrir que el problema no sea del disco duro como tal, sino que haya un problema relacionado con nuestro ordenador. Puede que el puerto USB no funcione, o que Windows haya dejado dicha unidad bloqueada por el motivo que sea.

Por lo tanto, si seguimos teniendo problemas y queremos descartar que sea nuestro ordenador, lo que debemos hacer es buscar otro equipo y conectar el disco duro a él. Así podremos comprobar si en el otro ordenador el disco funciona, o de lo contrario tenemos los mismos problemas. Aunque en un principio ese cambio nos pueda parecer un tanto complicado, lo cierto es que no lo es en absoluto. Tan solo será necesario que seamos un poco manitas y tengamos cuidado a la hora de conectar y desconectar esa unidad de almacenamiento entre los dos equipos.

Si el otro PC reconoce el disco duro, podemos aprovechar para llevar a cabo los pasos que hemos conectado anteriormente, como eliminar las particiones y formatearlo de nuevo en otro sistema de archivos. También, si teníamos datos importantes en él, los podemos guardar (si siguen allí) para no perderlos.

Cuando acabemos, podemos volver a nuestro PC principal y comprobar si todo funciona con normalidad.

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