El Portapapeles que por defecto integra el sistema Windows y que aprovechan muchas de las aplicaciones que aquí instalamos, es una función básica en el día a día. Esto es algo que se hace extensible a cuando usamos apps como Excel, Word, Chrome, etc. Como muchos de vosotros probablemente ya sabréis, este es un elemento clave en el trabajo diario con el sistema operativo como tal, y con las aplicaciones instaladas en el mismo.
De hecho se podría decir que esta es una funcionalidad que solo echaríamos en falta si desapareciese de nuestros equipos. Esto se debe básicamente a que estamos tan acostumbrados a su uso, que ni siquiera somos conscientes de su enorme utilidad. Así, de manera casi instantánea, la funcionalidad nos permite intercambiar, copiar, cortar y pegar todo tipo de contenidos entre aplicaciones o apartados de Windows. Es más, todo ello lo podremos lleva a cabo a través de las conocidas combinaciones de teclas Ctrl + C y Ctrl + V que usamos de manera casi automatizada.
Eso sí, algo que debemos tener muy en consideración, es que esto no solo nos será de utilidad en el sistema operativo de los de Redmond para tratar con archivos o carpetas. Al mismo tiempo esta es una funcionalidad que podemos usar con todo tipo de contenidos para intercambiarlos entre programas. Aquí entran en juego elementos tales como imágenes, tablas, direcciones de Internet, o textos. De hecho en estas mismas líneas nos vamos a centrar en este último que os hemos mencionado, los textos.
Cómo sacar provecho al portapapeles integrado en Word
Pues bien, os contamos todo esto porque en estas mismas líneas nos queremos centrar en un popular software que muchos de vosotros usáis a diario. De hecho se podría considerar como uno de los más utilizados en todo el mundo y que funciona en la mayoría de los PCs, este no es otro que el editor de textos Word de Microsoft. Hacemos una especial mención a este programa debido a que el mismo hace un uso más avanzado de este elemento que os hemos comentado ante, el portapapeles. Por si no lo sabéis, cada vez que copiamos algún texto al Portapapeles al tiempo que usamos el procesador de textos, este se almacena en el propio programa.
Como os peodréis imaginar, esto nos será de mucha ayuda en multitud de ocasiones, más si tenemos en cuenta el extendido uso del mismo. De este modo tendremos la posibilidad de intercambiar contenidos de texto con otros programas, lo que nos agilizará el trabajo con los mismos. Pero la ventaja que nos presena Word con respecto al portapapeles convencinal de Windows, es que no solo nos vale para una vez. Esto se traduce en que para todo ello, el mismo Word, en una misma sesión, almacena todo aquello que vayamos copiando en este elemento. Así el programa como tal no necesita borrar el contenido que hayamos ido almacenando con anterioridad. Eso sí, en el momento en en el que cerramos el programa, este portapapeles de Word, se vacía automáticamente.
Ventajas del portapapeles de Word
Esto, como es fácil imaginar, nos podrá ser de mucha ayuda, ya que tendremos esos textos copiados anteriormente, guardados, por si los volvemos a necesitar.De este modo y de manera sencilla, si tratamos con muchos textos reptitivos en el procesador de textos, este portapapeles nos resultará muy útil. Sin embargo igualmente se puede dar el caso de que necesitemos eliminar ese contenido guardado con anterioridad de modo automático. Esto se puede dar, por ejemplo, por temas relacionados con la privacidad al usar la aplicación. Cualquiera que se siente frente al PC antes de cerrar Word, tendrá acceso a los contenidos guardados aquí. Esto no siempre es lo más recomedable, por lo que veamos cómo evitarlo.
Y es que hay que tener en cuenta que el Portapapeles es una de las ubicaciones de almacenamiento dedicadas en la RAM para almacenar datos temporalmente. Por tanto, su uso intensivo se puede convertir en un problema en determinadas ocasiones. Esto es algo que se hace especialmente patente en dispositivos antiguos o con unas especificaciones internas un tanto limitadas.
Así, este espacio no es ilimitado, por lo que en ocasiones, si lo llenamos demasiado, puede dar error. Es por ello que el poder gestionar y administrar de la mejor manera este espacio, nos puede resultar igualmente muy útil, así que os vamos a mostrar cómo lograrlo. Como no podía ser de otro modo, lo primero que tenemos que hacer en una misma sesión con el editor de textos, es usar este Portapapeles de manera convencional.
Cómo eliminar el contenido del Portapapeles de Word
Por tanto, llegados a este punto, cabe mencionar que esta es una funcionalidad que en la aplicación de Microsoft Office encontramos en la pestaña de Inicio. Así, en la parte izquierda, veremos que disponemos de todo un apartado dedicado a este elemento en concreto. Desde aquí podremos copiar, cortar o pegar directamente, pero lo que a nosotros nos interesa en este caso, no es eso.
A nosotros lo que realmente nos interesa en estas líneas es el pequeño botón con una flecha que se sitúa a la derecha del titular Portapapeles. Así, al pulsar sobre el mismo, veremos que aparece un listado con todo lo copiado aquí en la última sesión con el programa. Junto a cada una de las entradas almacenadas, vemos una lista desplegable que nos permitirá borrar ese contenido independientemente, así como pegarlo en el documento actual.
Por otro lado, en la parte superior de la interfaz, vemos dos botones que nos permiten hacer esto mismo, pero para todas las entradas guardadas. De este modo y como podemos comprobar, tanto para aprovechar como para borrar esta función del Portapapeles en Word, Microsoft nos pone las cosas muy fáciles. Esto, como os comentamos con anterioridad, nos será muy útil espcialmente por motivos relacionados con la privacidad. De este modo evitamos que usuarios no deseados tengan acceso a los contenidos de texto copiados en este portapapeles con anterioridad. Esto es algo que se hace especialmente patente si son varios los usuarios que trabajan en un mismo PC, o con el mismo documento.