Windows 10 va ganando terreno poco a poco. Este es el sistema operativo más moderno de Microsoft y, junto a 8.1, los únicos que aún tienen soporte y siguen recibiendo actualizaciones. Si queremos disfrutar al máximo de un ordenador nuevo, de Internet, de todo lo que nos ofrece la tecnología, y hacerlo de forma segura, es necesario contar con un sistema operativo moderno. Sin embargo, hay usuarios que tienen PCs viejos, o simplemente no les gusta cambiar, y prefieren correr riesgos antes de dar el salto a una versión más moderna de Windows. Y uno de los sistemas operativos que más retiene a los usuarios es Windows XP.
Windows XP ha sido uno de los mejores sistemas operativos lanzados por Microsoft. Probablemente hasta mucho más querido que Windows 7. Este sistema operativo vio la luz del día en el año 2001 y aguantó con soporte hasta 2014, recibiendo a lo largo de su vida un total de 3 Service Pack. Este sistema operativo ya lleva 6 años sin soporte, aunque es cierto que Microsoft ha publicado alguna actualización fuera de soporte para tapar las vulnerabilidades más críticas.
Seguro que si usas este sistema más de una vez habrás visto un mensaje que recuerda de los peligros de seguir utilizándolo. Pero, si lo has ignorado, aquí te dejamos 5 motivos por lo que deberías cambiar cuanto antes de sistema.
6 años sin actualizaciones, y muchos fallos conocidos
Este es el motivo principal por el que deberíamos plantearnos muy en serio abandonar XP y buscar otros sistemas operativos. Si normalmente Windows se actualiza una vez al mes, y todos los meses se corrigen más de 100 vulnerabilidades, podemos imaginar todos los fallos que se habrán descubierto en los 6 años que este sistema lleva sin soporte.
Solo por el mero hecho de estar conectados a Internet, podemos estar en peligro. Y podemos pensar que con un antivirus podremos estar seguros a pesar de las vulnerabilidades, pero eso nos lleva al segundo punto.
XP podría incluso ser peligroso para otros sistemas operativos que tengamos instalados en el PC, y hasta para los demás ordenadores conectados en LAN, ya que puede utilizarse como nexo para distribuir gusanos o llevar a cabo otros ataques.
Cada vez menos programas son compatibles con Windows XP
Es cierto que los desarrolladores han dado un gran soporte a esta versión de Windows. Sin embargo, ya no les interesa seguir desarrollando programas compatibles con él, ya que, tras 19 años, XP tiene muchas limitaciones que lastra el desarrollo de muchos programas.
Navegadores, antivirus… la variedad de software compatible con este Windows es cada vez menor. Es complicado encontrar programas nuevos que funcionen en este SO, y los viejos pueden tener vulnerabilidades.
El código fuente de Windows XP es público, por lo tanto, aparecerán nuevas vulnerabilidades
Hace unas semanas se filtró el código fuente completo de Windows XP. Este código circula libremente por la red, y cualquiera puede bajarlo a su ordenador. Los investigadores de seguridad han demostrado que se trata del código fuente completo de este sistema operativo, lo que significa que cualquiera podrá analizar hasta l última línea de su código, averiguar cómo funciona y romper su seguridad por completo.
Y no solo de XP, como comparten una gran cantidad de partes con Windows 7, y Windows 10, el filtrado del código de XP nos ha puesto en peligro a todos.
No es compatible con el hardware nuevo
Si tenemos un PC viejo, podremos usar XP. Pero si tenemos componentes relativamente nuevos (placa, procesador, gráfica, etc), entonces este sistema no va a funcionar. Ni Microsoft ni los fabricantes dan ya soporte a XP, por lo que, o bien directamente no cargará, o lo hará con los controladores genéricos, y ni de lejos podremos obtener un buen resultado con ellos.
Incluso, por si fuera poco, hoy en día descargar una ISO de Windows XP es hasta complicado.
Cada vez menos protocolos compatibles
Por supuesto que Windows XP funciona, y podemos cometer la locura de conectarnos a Internet con él. Sin embargo, debemos tener en cuenta que muchas webs no van a funcionar, por varios motivos. El principal es porque los protocolos de seguridad nuevos, usados (y requeridos) por las webs no son compatibles ya con XP. Además, las webs modernas usan estándares nuevos que no son compatibles ni con Internet Explorer ni con las versiones de otros navegadores (como Chrome o Firefox) compatibles con este sistema operativo.
Por lo tanto, aunque Internet funciona, podremos hacer muy poco con él.