Google Podcasts es, junto a Google Reader, el servicio que más voy a echar de menos

Si algo he aprendido a lo largo de los años es que no te puedes fiar de los servicios que te ofrecen las grandes compañías. Y mucho menos sin son gratis. Google siempre nos ha dado todo tipo de servicios. Y, además, la mayoría de ellos son totalmente gratuitos. Eso sí, por muy buenos que sean, si no reportan a la compañía los beneficios que esperan obtener (ya sea en forma de dinero, Big Data, etc), no le va a temblar la mano a la hora de cerrarlos. Aunque eso implique perder grandes proyectos como Reader o el último en caer: Pódcasts.
Han cumplido ya 11 años, pero no olvidamos. Aquel mes de julio de 2013, Google anunciaba el cierre de su servicio Reader, el mejor lector de noticias, feeds y RSS que existió en la red. Para aquellos que no lo conocieron, este servidor de RSS permitía añadir las webs que quisiéramos leer para que se fueran guardando en ella todas las noticias publicadas y poder leerlas bajo demanda sin tener que estar pendiente de la web en cuestión. Es una herramienta imprescindible en periodismo, y muy útil para el resto de la gente.

No culpamos a Google por cerrar su servicio si no le era rentable. Le culpamos por haber decidido eliminar todo rastro del mismo por completo, evitando publicar el código (a pesar de las peticiones formales) para que nacieran proyectos para recuperarlo. Y le culpamos por obligarnos a migrar a servicios, como Feedly o Inoreader, de pago, privativos y limitados.
Ahora la historia se ha vuelto a repetir.
Un duro adiós a Google Pódcasts
El pasado mes de abril, Google decidió acabar con Google Pódcasts, el mejor servicio de pódcast que podíamos encontrar en la red. Se trata de un servicio libre de publicidad, sin anuncios, y muy intuitivo desde el que podíamos acceder tanto a los pódcasts de la plataforma como a cualquier otro que tuviera un feed XML público.
Google quiere llevarse todos los pódcasts a YouTube Music, una plataforma que, si bien es mala para la música, es aún peor para escuchar este tipo de contenido. Pero no solo eso, sino que, repitiendo las puñaladas del pasado, Google ha decidido cerrar por completo la app, a pesar de que podría funcionar como un cliente sin problemas y sin necesidad de mantenimiento. Así lo encontramos al intentar entrar en la app.
Google ha ampliado un mes el plazo para poder exportar nuestras listas de programas para llevarlas a la plataforma que queramos. Pero, sea como sea, a finales de agosto el servicio va a cerrar sus puertas por completo. No podremos usar la app ni como cliente ni como nada. Y si queremos escuchar estos programas desde los servidores de Google no nos va a quedar otra que pasarnos a YouTube Music. Y, eso sí, pagar.
Mi viaje hasta el self-hosting
No nos podemos fiar de las grandes compañías. Cualquier servicio que usemos gratis, en cualquier momento, puede pasar a ser de pago, o simplemente desaparecer de un día para otro. Tras el cierre de Google Reader probé muchas otras alternativas para leer mis feeds: Feedly, Inoreader, The Old Reader… pero todas ellas buscaban una cosa: sacarme el dinero.
Finalmente, opté por lo más sensato: dejar de depender de terceras empresas y montar mi propio servidor en casa. Ahora, todo lo que puedo auto-alojarme me lo monto en mi servidor para no depender de nadie. Como alternativa a Google Reader uso FreshRSS, un excelente lector de feeds con un desarrollo muy activo y una gran comunidad. Y para sustituir a Google Podcast tengo montado Audiobookshelf, que también me sirve para tener disponibles, en streaming, mis audiolibros.
También tengo montado un recetario (Mealie), una alternativa a Pocket (Wallabag) para guardar webs, mi Plex privado, Qbittorrent… y la lista de servicios no hace más que crecer. Y la verdad es que es lo mejor que he podido hacer para evitar nuevos disgustos.