El fin del soporte oficial para Windows 10 llegará pronto, y ello dejará nuestro PC expuesto a posibles amenazas de seguridad. Por ello, es crucial que sepas cómo actuar si tu decisión es mantenerte en dicho sistema operativo llegado el momento. Si bien puede ser una opción no del todo recomendada, con las medidas de protección adecuadas podrás continuar sin cambiar de sistema operativo.
Existen diversas estrategias que puedes utilizar para seguir utilizando Windows 10 de manera segura. Siempre puedes acudir a instalaciones de software externo de seguridad, crear copias de seguridad o actualizar las aplicaciones pertinentes. Sea cual sea el camino que escojas, ten en cuenta que deberás andarte con pies de plomo para no llevarte un susto. El soporte oficial es de suma importancia, y este tocará su fin el 14 de octubre de este mismo 2025.
Programa de actualizaciones de seguridad extendidas (ESU)
El fin del soporte oficial para Windows 10 genera una serie de necesidades que deberemos subsanar por nuestra parte. Si bien no recibirás actualizaciones de seguridad por parte de Windows, sí que podrás hacerlo acogiéndote al sistema ESU.
Microsoft, ante la llegada de este escenario, ha anunciado una extensión de su programa de actualizaciones de seguridad extendidas para todos los usuarios de Windows 10. Esta opción, en un principio, solo estaba disponible para las empresas. Pero ahora se ha ampliado a usuarios individuales.
Eso sí, hablamos de un programa de pago con un coste de unos 30 euros al año. Al pagar esta cifra, el soporte oficial de pago se extenderá tres años más, por lo que extenderá la vida útil de Windows 10 hasta octubre de 2028. Su adquisición proporciona actualizaciones de seguridad constantes, siempre que sean importantes y críticas para nuestro sistema. El único requisito que necesitamos, aparte del pago anual, es que nuestro dispositivo ejecute Windows 10 en su versión 22H2.
Medidas de seguridad extra
Si no te quieres acoger al sistema de pagos de Microsoft, siempre podrás seguir utilizando tu Windows 10 con las siguientes herramientas incorporadas en tu equipo:
Software potente de seguridad. Utiliza un antivirus que conozcas o que algún profesional te pueda recomendar. Por lo general, los antivirus seguirán actualizando sus funciones para Windows 10, por lo que no tendrás inconveniente alguno en utilizarlo. Puedes optar por antivirus como Avast, Kapersky, Avira o AVG para proteger tu PC.
Actualiza tus aplicaciones a menudo. El hecho de que mantengas tus aplicaciones actualizadas a su última versión te permitirá rehuir de brechas de seguridad en ellas que puedan ser explotadas por ciberdelincuentes. Por ejemplo, si posees navegadores como Google Chrome o Firefox, tómate esta medida como algo esencial para tu seguridad.
Utiliza navegadores web seguros. Por lo general, los principales navegadores seguirán recibiendo actualizaciones de sus proveedores. Chrome o Firefox pueden ser buen ejemplo de ello. Además, otra práctica altamente recomendada es que instales extensiones de seguridad que bloqueen anuncios o scripts. Personalmente, te puedo recomendar uBlock Origin o NoScript.
Cuidado con lo que descargas y webs que visitas. También es muy importante tomar medidas de precaución adicionales a la hora de visitar determinadas páginas web potencialmente peligrosas desde un Windows 10 sin soporte. Y de igual modo deberíamos poner un especial cuidado con los archivos que aquí descargamos para no correr riesgos.
Configura el Firewall de Windows 10. El Firewall de Windows restringe ciertas conexiones entrantes y salientes de ciertas aplicaciones, por lo que siempre podrás limitar el acceso a internet de aplicaciones esenciales.
Recuerda que, a pesar de que estas medidas pueden ayudar a paliar posibles riesgos futuros, el hecho de que un sistema operativo reciba soporte oficial de manera permanente es la primera línea de defensa contra los hackers.