Así es como tengo configurado el WhatsApp de mi hijo para protegerlo de desconocidos

WhatsApp fue la primera aplicación de mensajería a través de Internet que se lanzó al mercado y que supuso el principio del fin de los SMS. Conforme fue evolucionando, además de enviar mensajes, fue incluyendo la posibilidad de enviar fotos y vídeos, y convirtiéndose en un estándar al igual que Netflix para ver series y películas o Spotify para escuchar música: nadie envía mensajes de texto, envía WhatsApps.
Al tratarse de una plataforma completamente gratuita, cuando los más pequeños de la casa consiguen que los padres les den un teléfono móvil, esta es la primera aplicación que se instalan, para pasarse todo el día enviando mensajes y todo tipo de chorradas. Pero, utilizar WhatsApp conlleva un problema ya que esta plataforma solo funciona a través de un número de teléfono, número de teléfono que debemos compartir con otras personas para poder entablar una conversación.
Debido a su funcionamiento, cuando se trata de menores de edad, supone un problema para su seguridad, ya que cualquier persona que conozca su número, puede entablar una conversación sin que nos demos cuenta. WhatsApp, no dispone de control parental para poder limitar la actividad de los más pequeños, por lo que controlar su actividad en la aplicación es bastante complicado.
Sin embargo, realizando unos cambios ajustes y cambios en la aplicación, he conseguido crear una especie de control parental de WhatsApp para que mi hijo pueda utilizar la aplicación de forma totalmente segura, ajustes que a continuación, comparto con vosotros.
- Silenciar las llamadas de desconocidos. WhatsApp es cada vez más utilizado para hacer llamadas de teléfono, y se ha convertido en una fuente de spam muy molesta. Para evitar que cualquier persona se pueda poner en contacto con nuestro hijo a través de una llamada que probablemente nuestro hijo contestará, WhatsApp nos permite silenciar todas las llamadas de los contactos que no tenemos almacenados en la agenda de contactos.
- Revisar la lista de contactos. Es recomendable revisar periódicamente que contactos tiene establecidos en la aplicación contactos ya que esta es la principal fuente de información de WhatsApp a la hora de permitir crear nuevos chats, aunque no la única, ya que también podemos crear nuevas conversaciones sin tener el número almacenado.
- Limitar el acceso a la foto de perfil. Dentro de las opciones de privacidad de WhatsApp, podemos limitar que personas pueden acceder a nuestra foto de perfil, una función que debemos limitar únicamente a los contactos que tiene almacenados en la agenda para evitar que terceras personas con acceso a su número, pueda ver la imagen de perfil y que el menor pueda utilizar la que quiera en la que se muestre su cara.
- Introducir una contraseña de acceso. Si queremos que nuestros hijos únicamente utilicen la aplicación de mensajería WhatsApp cuando estamos presentes, la mejor forma de hacerlo es añadiendo un método de protección a la aplicación. De esta forma, siempre que quiera utilizar la aplicación, sólo podrá hacerlo si nos encontramos presentes. Este método puede suponer un problema sin tenemos la necesidad de desbloquear su uso cuando no estamos presentes, siendo el control parental otra interesante opción a considerar y de la que hablamos a continuación.
- Controlar y el uso desde iOS y Android. Tanto iOS como Android, incluyen un sistema de control parental que permite, no solo controlar el tiempo que pasan nuestros hijos utilizando la aplicación, sino que, además, también nos permite limitar su uso o incluso bloquearlo directamente de forma remota sin que estemos presentes. De esta misma forma, también podemos desbloquear su uso cuando creemos o pensamos que puede utilizarlo sin necesidad de utilizar el método de bloqueo que ofrece la aplicación y de la que hemos hablado en el primer punto.