NVIDIA cree que la IA acabará con los programadores: 4 motivos por los que se equivoca
Al margen de los textos automáticos o las imágenes, entre otras cosas, muchas de las plataformas IA que podemos usar hoy día se centran en el código de programación. Esto significa que ayudan a los desarrolladores de software a crear sus proyectos de un modo u otro.
A pesar de que a muchos desarrolladores y programadores estas inteligencias artificiales les son de enorme ayuda, esto no está del todo bien visto. Hay ciertos profesionales del sector que consideran estos códigos automáticos como fuera de lugar en proyectos que se podrían considerar como serios. Mientras tanto otros muchos piensan que las IAs que os mencionamos son un excelente recurso para optimizar tiempos y mejorar el código como tal.
Y no solo eso, ya que ciertas empresas empiezan a mostrar su disconformidad e incluso temor acerca de este tipo de usos. Este es el caso del gigante NVIDIA que probablemente a muchos os resulte más que familiar. Os contamos todo esto porque el consejero delegado del popular fabricante de tarjetas gráficas asegura que la IA sustituirá a la programación humana más tarde o más temprano.
Al mismo tiempo añade que llegará un momento en que ya no será necesario realizar cursos formativos para todo aquello relacionado con la programación. En resumidas cuentas, asegura que ya no es necesario enseñar programación a los niños, ya que en un futuro próximo la IA hará todo el trabajo.
A pesar de la IA, los programadores humanos son imprescindibles
Otros muchos no están en absoluto de acuerdo con estas afirmaciones, por lo que a continuación veremos las principales razones por las que este alto directivo de NVIDIA, se equivoca.
La experiencia humana para resolver problemas es mejor que la IA. Las diferentes plataformas centradas en el desarrollo de aplicaciones y que usan su propia Inteligencia Artificial basan su trabajo en conocimientos mecánicos adquiridos. Sin embargo en ocasiones se encuentran ante ciertos problemas que no son capaces de resolver y donde entra en juego la experiencia humana. Como sucede en otros muchos ámbitos, el ser humano es más capaz de improvisar y adaptarse a las necesidades de los clientes a la hora de desarrollar un proyecto. Aquí tiene un papel fundamental la imaginación.
Un programador entiende mejor las necesidades de los clientes. En multitud de ocasiones los programadores se encargan de generar aplicaciones para terceros. Estos se convierten en clientes que constantemente realizan comentarios y sugerencias acerca de mejoras y adaptaciones del código fuente que se está desarrollando. Una IA, por muy avanzada que sea, de momento siempre estará limitada a sus conocimientos previos y difícilmente sabrá interpretar las necesidades del cliente como un programador humano.
El código generado por IA no es perfecto. En multitud de ocasiones utilizamos este tipo de plataformas en concreto para generar automáticamente código de programación. En muchas ocasiones el resultado no contiene errores de compilación y funciona perfectamente. El problema viene cuando esto no es así, y es cuando precisamente entra en juego el factor humano que debe solventar esos fallos manualmente incluso afinar algunas partes. Es más, los programadores también se encargan de hacer que el código sea legible para otros humanos. Añaden ciertos fundamentos básicos de programación que todo desarrollador debe conocer. Sin su trabajo el código automático puede ser más un problema más que una solución.
Un humano reacciona más rápido ante ataques que la IA. En ocasiones se pueden detectar ciertas vulnerabilidades que afecten directamente a la seguridad del código generado. Por ejemplo en el caso de detectarse un exploit de día cero, el tiempo aquí es esencial. Y es que este problema debe identificarse y parchearse lo antes posible. Para ello hay que entender en profundidad el código generado anteriormente y por regla general un ser humano será capaz de reaccionar más rápido que cualquier IA en estas circunstancias.
Tras todo lo comentado podemos llegar a la conclusión de que la Inteligencia Artificial puede ser de enorme ayuda para los programadores que están empezando en estas tareas. Su código automático también será útil en determinados procesos de desarrollo algo más complejos y en los que queremos ahorrar tiempo. Pero en grandes proyectos tanto personales como empresariales, el programador humano sigue siendo un factor importante y diferencial.
