Los sistemas de almacenamiento de los que hacemos uso de manera constante en los equipos actuales no han parado de crecer y mejorar. Y aquí no solo nos referimos a las unidades internas de los ordenadores, sino también a los discos externos o las memorias USB.
Todo esto se refiere a elementos de la importancia de la capacidad, fiabilidad y velocidad de estos importantes elementos. De hecho a estas alturas podríamos decir que las mencionadas memorias USB se han convertido en los sustitos perfectos para los CDs y DVDs de antaño.
A todo esto le debemos sumar que poco a poco, con el paso del tiempo estos dispositivos han ido aumentando su capacidad, todo manteniendo su reducido tamaño físico. Mientras que en un principio lo habitual era disponer de memorias USB de 512 megas o un giga de capacidad, en estos momentos incluso las podemos encontrar de varios teras. Esto, como os podréis imaginar, os ofrece una gran cantidad de ventajas con respecto a los CDs y DVDs que tan populares se hicieron en su momento.
Pero claro, debido principalmente a su comodidad de transporte y facilidad de uso, lo más adecuado es que podamos usar estos elementos en cualquier equipo. Además del equipo como tal, lo que intentamos es que podamos usar la memoria USB en el mismo, se base en el sistema operativo que se base. Precisamente es de ello de lo que os hablaremos a continuación. Pero para lograrlo debemos tener en cuenta algunos parámetros del USB además del mencionado espacio de almacenamiento que en un prinipio nos proponga de forma predeterminada.
Utilidades y ventajas de las memorias USB
Estas son más cómodas de usar, con un tamaño más reducido, rápidas y versátiles. Mientras que hace años muchos usaban, por ejemplo, CDs y DVDs para transportar datos, ahora echan mano de estos útiles dispositivos. Además con el tiempo su capacidad ha ido en aumento, por lo que su uso cada vez se hace más extenso.
Como quizá la mayoría de vosotros ya hayáis podido comprobar de primera mano, estos dispositivos de almacenamiento a los que nos referimos son muy útiles y cómodos para poder copiar archivos de un ordenador a otro. Esto nos permite guardar grandes cantidades de datos de la mejor manera, todo ello con la libertad de formatos que nos presentan. Así, podremos guardar y transportar todo tipos de ficheros, como programas, música, vídeos, fotos, textos, etc.
Además estas las podemos usar prácticamente en casi cualquier dispositivo tecnológico actual. La principal razón de todo ello es que la mayoría de estos ya tienen algún puerto USB disponibles para poder conectar productos de este tipo, entre otros. Pero claro, a pesar de la compatibilidad hardware que nos encontramos en este sentido, el contenido de una llave USB no siempre será accesible en cualquier otro sitio.
Cómo hacer que una memoria USB sea compatible en más sistemas
Pues bien, tras todo lo comentado hasta este momento, a la hora de formatear uno de estos productos externos, si no lo vamos a usar en otros sistemas operativos lo mejor es utilizar el sistema de archivos por defecto. Por ejemplo en Windows nos decantaríamos por el mencionado anteriormente NTFS. Por el contrario, si vamos a compartir datos con otros sistemas o productos, tendremos que decantarnos por alguna otra opción. En concreto en este caso nos referimos a los dos estándares de este tipo más usados y compatibles en estos momentos, FAT32 y ExFAT.