Android es un sistema mucho más abierto que su principal rival iOS. Ser un sistema abierto donde los usuarios pueden controlar un mayor número de aspectos tiene sus ventajas y sus inconvenientes, sin embargo, por defecto Android no es abierto al 100% y determinadas partes del sistema permanecen cerradas a los usuarios que no tengan un determinado nivel de permisos dentro del propio sistema.
Aunque Android sea un sistema más abierto que iOS, aún está limitado en varios aspectos. Por defecto los usuarios no podrán acceder a las carpetas internas del sistema ni realizar configuraciones avanzadas ya que el usuario predefinido de Android no tiene permisos explícitos para dichas tareas, reservadas a nivel interno para el núcleo del sistema operativo.
Para tener el control completo del sistema operativo debemos llevar a cabo un proceso denominado como «rooteo» durante el cual se habilita el usuario «root» o superusuario para que a través de un programa intermedio el usuario final sea capaz de acceder al núcleo del sistema operativo y poder realizar una serie de configuraciones que, por defecto, no serían posibles.
Este proceso conlleva una serie de ventajas e inconvenientes. En este artículo vamos a analizar las principales ventajas de hacer «root» a un dispositivo (smartphone o tablet) con Android.
Con root podemos desinstalar cualquier aplicación de nuestro Android
Generalmente cuando compramos un smartphone o una tablet con el sistema operativo de Google vienen instaladas por defecto una serie de aplicaciones. Algunas de estas pueden ser útiles para realizar determinadas tareas, sin embargo, muchas de ellas serán publicitarias, no nos interesarán y lo único que harán será ocupar espacio en la limitada memoria interna y consumir batería al ejecutarse en segundo plano.
Con root podremos eliminar estas aplicaciones (conocidas como bloatware) de manera que mejoraremos el rendimiento de nuestro sistema y podremos tener instaladas únicamente las aplicaciones que realmente nos interesen y utilicemos. Igualmente vamos a poder «congelar» aplicaciones con diferentes apps de gestión de programas de manera que, aunque quedarán instaladas en nuestro sistema, estas estarán ocultas y bloqueadas, por ejemplo, mientras probamos alternativas o para aplicaciones que utilicemos de forma esporádica.
Igualmente podremos eliminar las limitaciones que aplican los proveedores a sus dispositivos capados y disfrutar de una experiencia similar a la de un dispositivo libre.
Instalar aplicaciones avanzadas
Hay una serie de aplicaciones que realizan ajustes a nivel interno dentro del dispositivo que, por defecto, no podrían realizar.
Un ejemplo muy conocido es «Titanium Backup», una herramienta que nos permite realizar copias de seguridad de todas las aplicaciones y configuraciones instaladas en nuestro dispositivo para restaurarlas fácilmente más adelante, imprescindible especialmente en los casos de formateo o cambio de dispositivo.
Igualmente otra aplicación muy útil es Greenify. Esta app se encarga se hibernar automáticamente las aplicaciones seleccionadas impidiendo que cada X tiempo se activen de nuevo de forma automática consumiendo batería, recursos y nuestra tarifa de Internet.
Aunque por defecto Android cuenta con un Firewall interno y automático basado en iptables, con root podremos instalar una aplicación que controle el acceso a la red de todas las aplicaciones instaladas pudiendo elegir cuales podrán conectarse y cuales quedarán totalmente bloqueadas impidiendo su conexión.
Mejorar y aprovechar al máximo el rendimiento del dispositivo
Tener permisos de superusuario en nuestro dispositivo Android nos va a permitir ajustar determinados aspectos internos del sistema operativo. Ya sea a través de las diferentes aplicaciones diseñadas con este fin como modificando a mano los archivos de preferencias internas del sistema vamos a poder configurar una serie de opciones que, en ocasiones, mejorarán en rendimiento general del dispositivo.
Igualmente es necesario root para cambiar el kernel (núcleo) del sistema operativo para tener un mayor control sobre el hardware. Con ello vamos a poder incluso hacer overclock al procesador, la gráfica y la memoria para aprovechar al máximo el potencial de los componentes físicos del sistema. Existen aplicaciones diseñadas especialmente para ello y también podemos hacerlo a mano accediendo a los archivos de configuración internos del sistema operativo.
Sin embargo, aunque las ventajas con considerables y tentadoras, un gran poder conlleva una gran responsabilidad, por ello, a lo largo de esta semana también vamos a tratas los principales inconvenientes de hacer root a nuestro dispositivo Android.
¿Tienes algún smartphone de Google con los permisos de superusuario habilitados?