La Play 3, o PS3, ha sido una de las consolas más polémicas de la pasada generación. No solo por su desorbitado precio, el cual apenas bajó hasta la llegada de las ediciones SLIM, sino también por la multitud de fallos generados por la alta temperatura y por lo complicado que era programar para ella por la arquitectura del procesador elegido por Sony. A pesar de todo, esta consola ha marcado unas pautas muy notables en la generación actual, y además dio a luz a una serie de juegos de muy alta calidad que, hoy, podemos volver a jugar fácilmente en el ordenador.
La Play 3 es una consola relativamente moderna, además de que guarda una gran complejidad. Esto implica que, aunque podemos encontrar emuladores, estos no son compatibles con el 100% de los juegos, pueden tener errores de precisión y fidelidad y, además, requieren de un hardware muy potente para poder volver a jugar los juegos.
Además, existen formas de volver a jugar a los juegos de la PS3 mucho mejores que con un emulador. Por ejemplo, muchos de los juegos míticos de esta consola se pueden encontrar hoy en día para PC. Y también tenemos la posibilidad de suscribirnos a PlayStation Now para volver a jugar a casi todos estos juegos de la Play 3 en streaming, sin emuladores, y de forma 100% legal.
Mejores juegos de la PlayStation 3 para volver a jugar
Desde luego, la tercera consola de sobremesa de Sony ha sido una bestia, desde su lanzamiento hasta su final. Gracias a ella hemos podido disfrutar de todo tipo de títulos, desde grandes producciones hasta independientes soberbios. También es cierto que ha tenido sus juegos malos, para qué nos vamos a engañar. Pero la PS4, y la PS5, no serían tal como las conocemos si no hubiera sido por el salto que esta consola supuso respecto a la PS2.
En su larga vida, han pasado por ella grandes juegos. Algunos de los más importantes a los que podemos volver a jugar gracias a los emuladores que vamos a ver luego son:
- GTA IV y V
- Uncharted 1, 2 y 3
- Batman Arkham Asylum / City
- Red Dead Redemption
- The Last of Us
- Bioshock 1, 2 e Infinite
- Mass Effect 1, 2 y 3
- Metal Gear Solid 4
- The Elder Scrolls IV – Oblivion
- Burnout Paradise
- The Elder Scrolls V – Skyrim
- God of War 3
- Little Big Planet
- Assassin’s Creed 1, 2
- Borderlands 1, 2
- Demon Souls
- Dark Souls 1 y 2
- Fallout 3
- Far Cry 3
Además, tampoco podemos olvidar que esta consola ha sido la que ha introducido el sistema PlayStation Plus para poder jugar online, y la propia PS Store para comprar juegos en formato digital sin tener que ir a la tienda. Por supuesto, tampoco podemos olvidarnos de grandes periféricos como el PS Move o las guitarras y baterías de Rock Band y Guitar Hero. Una gran consola tanto para jugar en solitario como acompañado.
A continuación, vamos a ver todas las opciones que tenemos para jugar a juegos de PS3 en el ordenador.
Requisitos para usar un emulador de PlayStation 3
La PS3 es una consola relativamente moderna, y muy potente. Por tanto, no es sencillo emular el hardware de esta plataforma para poder cargar sus juegos. Para hacerlo es necesario contar con un ordenador muy potente, el cual sea capaz de procesar toda la información sin generar pausas u otros problemas. Por ello, si estamos pensando en jugar a juegos de esta consola en un emulador, debemos cumplir, al menos, los siguientes requisitos.
SSD para guardar los juegos. Esto es vital, ya que necesitamos una velocidad de lectura y escritura muy alta para que los juegos vayan fluidos.
- Un procesador Intel o AMD relativamente moderno (no más de 5 años), con 6 núcleos, y de gama alta (Intel Core I / Ryzen).
- Tarjeta gráfica NVIDIA o AMD RADEON compatible con Vulkan. Recomendable una tarjeta de la serie RTX de NVIDIA.
- 8 GB, o más, de memoria RAM.
- Windows 10 o Windows 11 de 64 bits.
Con estos requisitos, podremos conseguir una emulación más o menos aceptable.
Emuladores de PS3 para Windows
Esta consola de Sony ha sido, desde su lanzamiento, una de las más polémicas en todos los sentidos. El uso del procesador CELL encareció mucho el precio de lanzamiento (costaba 600 euros), complicó mucho el trabajo a los desarrolladores, quienes tardaron en dominar la potencia de este chip. Y, por supuesto, complicó en gran medida la emulación de la consola.
Por suerte, igual que los desarrolladores consiguieron exprimir su rendimiento al 100%, algunos emuladores han llegado a ver la luz del día. Y, siempre que tengamos un PC de gama muy alta, podremos emular los juegos de esta consola en el PC. Vamos a ver las mejores opciones.
Esto nos permitirá rememorar algunos de los títulos míticos de esta consola de Sony directamente desde nuestro ordenador gracias al software del que os hablaremos a continuación. Además, aquí nos vamos a encontrar con una buena cantidad de juegos disponibles que tenemos que cargar en los correspondientes emuladores de los que os hablaremos. A todo ello le podemos sumar el hecho de que el consumo de recursos del equipo por parte de este software no es demasiado exigente, por lo que no deberíamos tener problemas a la hora de ejecutar títulos en los equipos actuales.
Veamos además los puntos más a favor o en contra de cada una de las soluciones de estas características, así como su configuración básica para sacarle el máximo provecho.
RPCS3
Sin duda, el mejor emulador de PS3 que podemos encontrar hoy en día para PC. Es uno de los más veteranos y el que mayor compatibilidad ofrece con los juegos de esta consola, y eso que no llega al 60% del total del catálogo. Se trata de un emulador de código abierto escrito en C++ que podemos descargar y ejecutar en Windows, Linux y BSD.
El desarrollo de este emulador se centra, sobre todo, en mejorar la jugabilidad de los juegos más característicos de esta consola en PC. Y para ello, además de permitirnos jugar a 60 FPS de manera fluida, también permite jugar a muchos títulos en 4K, como los Uncharted y el Red Dead Redemption. También aplica una serie de filtros a los juegos para mejorar sus acabados.
Podemos descargar este emulador de forma gratuita desde el siguiente enlace.
Lo mejor y lo peor
Una de las principales facultades de este emulador es que es de código abierto. Gracias a ello podemos conocer en detalle cómo funciona y, si tenemos conocimientos, incluso ayudar a mejorarlo. Además, destaca también por ser capaz de mover algunos de los juegos más emblemáticos de esta plataforma, e incluso mejorar su funcionamiento respecto a la consola.
Eso sí, debemos tener en cuenta que, dada la potencia original de la consola, será necesario tener un PC bastante potente para poder mover los juegos de la misma. Y también, una limitación importante es que su compatibilidad no llega ni al 60% del catálogo de la consola, por lo que fácilmente muchos juegos se nos quedarán en el tintero.
Cómo configurarlo
Una vez que ya tenemos descargado el programa de la web, lo siguiente que tenemos que hacer, antes de empezar a jugar, es configurarlo. Lo primero que debemos hacer es instalar una actualización de firmware de PlayStation 3. Para ello debemos descargar el archivo PS3UPDAT.PUP de la propia web de PlayStation. Y, dentro de RPCS3, nos dirigimos a “File” y seleccionamos “Install Firmware”. Así se instalará la última versión que hemos descargado.
Una vez hemos hecho esto sólo necesitamos instalar el juego que tengamos de PS3. Para ello, de la misma forma que la instalación de firmware, nos dirigimos a «File» y seleccionamos “Install .pkg”. Seleccionamos el archivo, y este se instalará automáticamente en el directorio «dev_hdd0disc». Una vez hemos hecho esto ya podemos ejecutarlo eligiéndolos en la lista de juegos, o bien desde File > Boot Game. Si el juego cuenta con un archivo .RAP, debemos añadirlo a la carpeta dev_hdd0home0000001exdata antes de ejecutarlo.
Aunque ya podremos jugar, antes vamos a ver cómo configurar algunos de los elementos más importantes de este emulador. Lo primero, las teclas del teclado que vamos a utilizar para emular el DualShock 3. Para ello, en Configuration elegimos Pads y se nos abrirá el menú de configuración de los diferentes usuarios, en el caso de la imagen, seleccionamos en Player 1 Configure y se nos abrirá el menú de configuración de los controles.
También podemos elegir si queremos tener más rendimiento, o mejor calidad, a la hora de usar el emulador. Para ello, en las opciones de CPU, podemos elegir entre tres opciones de decodificación:
- Interpreter(Precise), es la más lenta pero también la más precisa para emular. Si no te funciona bien el juego en los demás modos, utiliza este.
- Interpreter(Fast), ajuste por defecto, los juegos deben ejecutarse rápido.
- Recompiler(LLVM/ASMJIT), el modo más rápido. Tarda más en cargar los juegos, pero estos funcionarán mucho más rápidos, aunque puede no funcionar en algunos juegos.
Y también podemos configurar varias opciones relacionadas con la gráfica:
- Render:
- OpenGL, el más compatible.
- Vulkan, necesita de una GPU compatible
- DRD12, DirectX12, el más lento y necesita Windows 10 como sistema operativo (así como una GPU compatible)
- Aspect Ratio
- Ponlo a 16:9
- Resolution
- Intenta poner para cada juego la resolución máxima a la que funciona en la PS3, sino deja la que viene por defecto.
- Frame Limit
- Ponlo en auto
SI queremos, también podemos repasar el resto de las opciones que nos encontraremos, pero ya no son críticas para el correcto funcionamiento del emulador. Ya tenemos todo listo para empezar a jugar a la Play Station 3 en el PC gracias a RPCS3.
ESX Emulator
Este es otro emulador para PS3 que podemos ejecutar en nuestro ordenador. También está escrito en C++, pero en lugar de crear un entorno de emulación completo este carga el Kernel XMB original de la PS3 para ofrecer una emulación nativa de los juegos, aunque con limitaciones, como el acceso a PSN. Este emulador es capaz de ejecutar la mayoría de los juegos exclusivos para esta consola a resolución nativa sin apenas glitches o errores. Eso sí, es necesario tener un hardware muy (pero que muy) potente para poder emular con precisión estos títulos.
Para muchos este es uno de los emuladores de esta consola en concreto más importantes y funcionales de los que podemos echar mano hoy en día. De ahí su enorme éxito a lo largo de los últimos años y gran penetración de mercado para los amantes de la consola de Sony. No en vano podemos afirmar que con el fin de jugar a juegos de la PlayStation 3 en el PC, ESX es una opción más que interesante.
Todo ello lo demuestra si tenemos en cuenta que es capaz de ejecutar juegos de altos requerimientos hardware con mayor fiabilidad que otras propuestas similares. Así, también es importante saber que el emulador admite que lo usemos incluso en altas resoluciones como 4K. Como no podía ser de otro modo, esto mejorará nuestra experiencia con los juegos.
Ya os podréis imaginar que este programa requiere un archivo ROM para jugar. Tendremos la posibilidad de ejecutar títulos tan populares como God Of war 3 o NINJA GAIDEN 3.
Podemos bajar este emulador desde su página web.
Pros y contras
Su principal punto fuerte es que, en lugar de emular todo el hardware y el software de la consola, este emulador carga el sistema operativo de la PlayStation 3, el Kernel XMB, lo que nos permite movernos por la interfaz como si se tratase de una consola real. A parte de eso, poco más nos aporta.
En cuanto a sus limitaciones, podemos destacar que se trata de un emulador limitado en catálogo, ya que, aunque carga el XMB, sigue habiendo graves problemas de compatibilidad respecto a la consola original. Además, los juegos que funcionan no se pueden mejorar como sí ocurre con su rival.
Cómo funciona
Lo primero que tenemos que hacer para poder utilizar este emulador es bajar la última versión disponible a nuestro ordenador. En la web oficial, el apartado de descargas da problemas, por lo que nosotros recomendamos bajarlo de cualquier otra web, siempre que lo hagamos con seguridad. Una vez bajado, descomprimimos el fichero ZIP que acabamos de descargar, y, dentro, ejecutaremos el programa desde el archivo «esx-0.9.8.exe». Veremos la ventana principal del programa.
Antes de empezar a jugar, lo primero que tenemos que hacer es revisar la configuración. Para ello, hacemos clic sobre el menú «Configuration». Y aquí debemos fijarnos en dos aspectos. El primero, el apartado de gráficos, desde el que podremos configurar todo lo relacionado con la GPU.
Y el segundo, y más importante, el apartado de los mandos, para poder configurar los controles del emulador y poder jugar como mejor nos venga.
Una vez tengamos todo configurado, ya solo nos queda empezar a jugar. Para ello, volvemos a la ventana principal del juego, y desde el apartado ESX podremos elegir cómo queremos cargar el juego.
A jugar.
Alternativas para jugar a la Play 3 en el PC
Como decimos, los emuladores de PS3 están aún en una fase de desarrollo muy verde. Y es complicado que la cosa vaya a mejorar, ni a corto ni a medio plazo. La complejidad de la consola impide que un emulador pueda correr dichos juegos (misma razón por la que la PS4 y la PS5 no son retrocompatibles con la PS3).
Pero, si echamos de menos algún juego, tenemos estas alternativas legales.
Juegos de Play 3 en Steam
Aunque PS3 tuvo una buena cantidad de juegos exclusivos, hoy en día dichas exclusividades han quedado un poco de lado. Muchos de los iconos de esta consola ahora mismo se pueden comprar (y a muy buen precio) en tiendas de juegos como Steam, para jugarlos de forma nativa en el ordenador. Un ejemplo de ello es el Heavy Rain.
Y los juegos que fueron exclusivos temporales, o multiplataforma que también salieron para la XBOX 360, también se pueden jugar hoy en día en PC, como, por ejemplo, el Final Fantasy X, una de las mejores joyas de su generación.
Lo mejor y lo peor de este método
Sony, durante mucho tiempo, ha sido muy cerrada con sus videojuegos, permitiendo solo a los usuarios de una de sus consolas poder jugarlos. Este es uno de los motivos, sin ir más lejos, que la emulación ha avanzado más que en otras plataformas, como Xbox. Sin embargo, su mentalidad está cambiando, y ahora es muy fácil encontrarnos con títulos, que siempre han sido exclusivos, para jugarlos en PC.
Las ventajas de esto son muchas, desde no depender de una consola para poder disfrutar de los juegos hasta poder tener una experiencia mucho mejor (4K, 60 FPS, etc) respecto a la que podemos tener en una consola PlayStation.
Pero también existen inconvenientes. Por ejemplo, necesitamos un ordenador potente, y más caro que la consola en cuestión, para poder jugar a estos títulos. Y, si ya los compramos en su día, tendremos que volver a pasar por caja.
PlayStation Plus, para olvidarte de los emuladores de PS3
Además, si queremos jugar a otros juegos (como los Uncharted) que no están en Steam ni en otras tiendas para PC, existe un servicio adicional que nos va a permitir hacerlo: PlayStation Plus. Con la renovación que sufrieron los planes de PlayStation, Sony decidió eliminar PlayStation Now, una suscripción por 99 euros anuales nos permitía jugar a títulos de PlayStation del pasado cómodamente desde nuestro ordenador, sin necesidad de utilizar una consola.
En la actualidad, si queremos disfrutar de lo que fue PlayStation Now, debemos contratar el plan PlayStation Plus Premium, el plan de todos los disponibles para la consola de Sony más caro y que tiene un precio de 16,99 euros mensuales. Para poder disfrutar de los clásicos de la PS2, PS3 y PS4 (no están disponibles todos los juegos de esta consola) en un PC para lo que necesitamos una conexión a internet de banda ancha, un mando DualShock o compatible y descargar la aplicación correspondiente, aplicación que se encargará de mostrar los juegos que se reproducen en los servidores de Sony.
Lo mejor y lo peor
Gracias a la nube es posible volver a jugar a estos títulos clásicos sin necesidad de comprar un ordenador ni comprar los títulos de nuevo. Simplemente debemos pagar la suscripción a PlayStation Plus Premium para poder acceder a una gran base de datos de juegos, tanto de la PlayStation original como de la PS2, PS3 e incluso algunos títulos de la PS4. Algo muy cómodo, rápido y sencillo que nos va a permitir jugar a cualquier juego desde cualquier dispositivo y en cualquier lugar.
Eso sí, debemos tener en cuenta que el juego en la nube, o «streaming», implica tener un importante input lag, lo que puede empeorar la experiencia de juego. Además, la calidad a la que jugamos puede ser inferior a la de la consola, y mucho inferior a la de un PC.
Descargar BIOS de PS3
Muchos emuladores necesitan una BIOS para poder funcionar. La BIOS es un volcado del chip de la memoria (en binario) que es el encargado de entender cómo funciona la máquina y cargar los juegos. Gracias a la BIOS es posible conseguir un rendimiento superior al que conseguiríamos emulando a la fuerza el sistema.
PlayStation 1 y PlayStation 2 necesitaban sus correspondientes BIOS para funcionar. Estas, aunque son fáciles de encontrar en la red, son ilegales de descargar, ya que contienen todo el código privativo de la compañía. Sin embargo, con PS3 la cosa cambia, ya que este sistema no usa una BIOS como tal, sino un firmware que actúa como sistema operativo. Los emuladores son capaces de cargar una capa de compatibilidad por encima del hardware para que los juegos puedan funcionar.
Es por este motivo por el que no hay BIOS de PS3 ni se necesitan para jugar. Pero, también, es el motivo por el que el rendimiento anda un poco escaso, y algunos juegos no funcionan bien del todo.
¿Cuál es el mejor emulador de PS3?
Vistas las pocas opciones que tenemos disponibles podemos pensar, ¿cuál es la mejor opción que podemos elegir para emular esta tercera consola de sobremesa de Sony?
A pesar de estar limitado en muchos sentidos, el que mejor nos va a funcionar es RPCS3. Sus desarrolladores han apostado por una emulación de más bajo nivel, pudiendo conseguir mejor compatibilidad que otros programas, algo mejor de rendimiento y la posibilidad de reescalar los juegos y mejorarlos con filtros. Por tanto, de elegir uno, nos quedaríamos con este.
Además, si optamos por las opciones legales, la mejor opción es PlayStation Plus. El servicio de juego en streaming de Sony nos va a permitir jugar a los juegos de esta consola desde cualquier lugar. Y, además, no dependeremos de ningún hardware concreto. Eso sí, hay que estar dispuesto a pagar la suscripción mensual, suscripción que no es precisamente barata.