Google Chrome es el navegador web más utilizado en todo el mundo. Por tanto, es uno de los primeros programas que solemos bajar e instalar en cualquier ordenador. El gigante de las búsquedas nos ofrece dos formas diferentes para descargarlo. La primera de ellas, usando una conexión a Internet, y la otra descargando el instalador standalone de Chrome que nos permite hacer una instalación offline. Vamos a ver cómo bajar el navegador de ambas formas.
Con el fin de ayudarnos a tener siempre la última versión, cuando descargamos Google Chrome lo que estamos bajando en realidad es un descargador. Cuando lo ejecutamos, este se conecta a los servidores de Google y se encarga de bajar la última versión del navegador e instalarla en nuestro ordenador. El proceso no es muy lento, pero si tenemos una mala conexión a Internet, o directamente si por alguna razón no estamos conectados, no podrá terminar correctamente. Algunas veces puede resultar molesto. Por suerte, existe una alternativa que nos permite instalar Chrome sin necesidad de una conexión a Internet.
Diferencias entre el instalador offline y online de Chrome
Mientras que la versión online del instalador de Chrome solo incluye las instrucciones necesarias para descargar la última versión disponible y ocupa muy pocos MBs, el instalador offline incluye la aplicación completa, es decir, todo lo necesario para poder instalar Chrome sin necesidad de una conexión a internet. La versión offline está pensada principalmente para que las empresas puedan realizar la instalación de forma remota en todos los equipos sin tener la necesidad de uno por uno, equipo por equipo, de ahí que esta opción solo esté disponible para empresas, aunque como particulares, también podemos aprovecharla y descargarla.
La versión offline es ideal para llevarlo en dispositivo externo de almacenamiento y usarlo allá donde lo necesitemos para instalarlo el equipo donde no hay conexión a internet o esta es tan débil que no permite descargar el navegador directamente a través del instalador. Sin embargo, cuando no tenemos problemas para conectarnos a Internet, la versión offline deja de tener todo el sentido ya que, con descargar el instalador, la aplicación se encargará de descargar la parte restante y completar la instalación como tal.
Instalar Chrome sin conexión
De manera predeterminada, Google proporciona un instalador de unos dos megas, el cual no contiene los archivos reales necesarios para poder instalar Chrome en nuestro ordenador. En su lugar, cuando lo ejecutamos, lo que hace es conectarse a Internet para descargar los archivos necesarios a lo largo de un proceso de configuración, para posteriormente proceder a instalarlos. Este es el mismo proceso que siguen en la actualidad la mayoría de las aplicaciones, un proceso que no acaba de tener sentido ya que, lo único que hace es prolongar el tiempo de instalación al necesitar de dos pasos: el primer descargar el instalador y, el segundo, que el instalador descargue la versión completa para instalar.
Además, esto puede suponer un problema si no tenemos una buena conexión a Internet, ya que el instalador puede darnos problemas de descarga y terminar tardando una gran cantidad de tiempo en instalarse e incluso darnos fallos durante la instalación que imposibilite terminarla. Es por ello por lo que la solución pasa por obtener un instalador independiente que no requiera de conexión a Internet para poder instalarse correctamente y sin tener que descargar archivos adicionales.
Descargar el instalador offline de Chrome
Google nos ofrece varios instaladores de su navegador. El primero que vamos a mostrar en la lista será el más común, el que necesitaremos la mayoría. Sin embargo, si tenemos alguna necesidad especial, según la configuración del equipo, podemos recurrir igualmente a cualquiera de los otros:
- Google Chrome para 64 bits (recomendado).
- Google Chrome para 32 bits.
- Google Chrome para 64 bits (instalar para todos los usuarios del PC).
- Google Chrome para 32 bits (instalar para todos los usuarios del PC).
Algo que debemos tener muy presente es que debemos respetar las diferentes arquitecturas de las versiones disponibles de este instalador offline. Eso quiere decir que por ejemplo no podremos hacer uso de la versión de 64 bits en un ordenador de 32, tenga o no tenga conexión a internet en este momento. Si nuestro equipo tiene un procesador de 64 bits, es absurdo instalar la versión de 32 bits, ya no nos permitirá sacarle todo el rendimiento al hardware de nuestro equipo.
Si lo preferimos, también podemos descargar los instaladores sin conexión para las versiones de desarrollo de este navegador. De todas formas, nosotros recomendamos usar estas solo para pruebas, ya que no solo pueden tener errores, sino que, al recibir actualizaciones mucho más frecuentes que la versión estable, quedarán obsoletas mucho antes.
- Instalador offline de Chrome Beta
- Instalador offline de Chrome Dev
- Instalador offline de Chrome Canary
Una vez descargada la versión que queramos la ejecutamos. En unos instantes ya la tendremos instalada y funcionando con normalidad. Obviamente, para descargar los anteriores instaladores sí necesitaremos una conexión a Internet. La descarga ocupa más o menos 90 MB. Y podemos llevarla siempre con nosotros en un USB.
Estarán disponibles todas las funciones del navegador, como la posibilidad de usar extensiones, la sincronización con Google, e incluso la función de actualización para tener siempre la última versión instalada en nuestro ordenador. Algunas empresas tienen limitada la posibilidad de instalar extensiones, para evitar que los datos de la empresa pueden verse afectados por un problema de seguridad de las extensiones o por una extensión maliciosa que haya diseñada para este fin.
¿Qué podemos hacer si queremos actualizar el navegador y no tenemos Internet? La solución es fácil. Lo único que hay que hacer es volver a bajar el instalador sin conexión de Google Chrome utilizando los mismos enlaces, enlaces que siempre nos permitirán descargar la última versión disponible en cada momento. Al instalar la nueva versión disponible mantendremos todos nuestros datos, las configuraciones, extensiones y el perfil, por lo que no será necesario volver a configurar la aplicación.
Descargar Google Chrome desde Internet
Google Chrome es un navegador totalmente gratuito y está disponible para cualquier sistema operativo que podamos utilizar a diario. Para poder usar este navegador, lo primero que debemos hacer es descargar el instalador del mismo desde el siguiente enlace.
Este instalador, que ocupa unos pocos bytes, se conectará a los servidores de Google cuando lo ejecutemos en nuestro ordenador y descargará la última versión disponible hasta la fecha del navegador. Instalará esta versión y cuando finalice el proceso, ya tendremos Google Chrome instalado en nuestro PC y podemos borrar el archivo que hemos descargado previamente, ya que su utilidad ha finalizado.
Si solemos utilizar más a menudo nuestros smartphones para navegar por la red, entonces será en ellos donde tengamos que descargar el navegador. Todos los smartphones que llegan al mercado con Android vienen con esta aplicación instalada por defecto, por lo que no tendremos que hacer nada para empezar a usarla. Si en nuestro Android no viene instalado Google Chrome, o somos usuarios de iOS, podemos descargar las últimas versiones de este en nuestras respectivas tiendas de aplicaciones.
Descargamos el navegador como si se tratase de cualquier otra aplicación y listo. Ya podemos empezar a disfrutar de sus características para navegar por la red.
Además, mantener Google Chrome actualizado debe ser una prioridad para todos los usuarios. Cuando instalamos el navegador en nuestro ordenador, este se encarga de crear una serie de servicios que comprueban las nuevas versiones automáticamente, las descargan y se instalan automáticamente para estar siempre a la última.
Si no nos fiamos, también podemos buscar actualizaciones manualmente. Para ello abriremos el menú de opciones de Chrome y elegiremos el apartado «Ayuda > Información de Google Chrome» Esto se encargará de comprobar si tenemos instalada la última versión. De no ser así, esta misma página se encargará de descargar e instalar automáticamente la nueva actualización de manera que, cuando reiniciemos el navegador, se termine de instalar la nueva versión y podamos estar a la última, con toda la seguridad.
Descargar Google Chrome Canary y Beta
Google lanza actualizaciones periódicas de su navegador, Google Chrome, cada varias semanas. Cada una de estas versiones suelen traer algunos cambios, nuevas funciones y mejoras y, sobre todo, correcciones de errores y vulnerabilidades.
Para que un parche o una novedad pueda llegar a la versión estable de Google Chrome antes debe haber sido probada a conciencia. Y esto es posible gracias a los usuarios de las ramas Canary y Beta de Chrome.
Las versiones Canary y Beta de Chrome son las versiones de desarrollo de este, versiones que suelen ir una o dos versiones por delante y que reciben las últimas mejoras y novedades para que los usuarios puedan probarlas y ayudar a Google con su retroalimentación para mejorarlas.
En la red podemos encontrar concretamente 3 versiones de desarrollo de Google Chrome:
- Canary: Versión totalmente inestable. Permite probar antes que nadie las nuevas funciones y características. Se actualiza casi a diario con nuevas funciones y características.
- Beta: Más estable que la anterior. Esta versión trae novedades que casi con total seguridad llegarán a las versiones estables de Chrome.
- Dev: Se actualiza todas las semanas y viene con las últimas APIs para que los desarrolladores puedan crear nuevas webs y si las existentes no dan problemas.


Todas estas versiones se pueden descargar de forma totalmente gratuita. Además, ahora los usuarios pueden instalarlas de forma independiente, como otros navegadores, ya que funcionan de forma totalmente independiente de cualquier navegador.
Descargar la versión de Chrome para empresas
Otra opción, quizá mejor que la anterior pasa descargar la aplicación de Chrome es utilizar la web de descargar que Chrome a disposición de las empresas. Muchas son las empresas que deben revisar la aplicación para comprobar que cumple los estándares necesarios de seguridad para poder utilizarla de ahí la existencia de esta página. A diferencia del primer método que os hemos mostrado más arriba desde donde descargamos un instalador que se conectará a internet para comprobar si existe una nueva versión, este método descargará la versión de 32 o 64 bits después de comprobar rápidamente la arquitectura del a través del inspector web del navegador que utilizamos para descargar.
De esta forma, si utilizamos un equipo de 64 bits, se descargará la versión de 64 bits, versión que no es compatible con equipos con procesadores de 32 bits. Sin embargo, las aplicaciones de 32 bits si son compatibles con procesadores de 64 bits. Además, desde esta web, también podemos descargar la versión estable final que actualmente está disponible para todos los usuarios o la versión estable disponible en ese momento en versiones de 32 y 64 bits. También podemos descarar la versión para macOS para procesadores Intel como para procesadores ARM.
A pesar de tratarse de una versión para empresas, no es necesario registrarse para poder descargar cualquier de las versiones disponibles a través de esta página web, por lo que podemos visitarla y descargar las nuevas versiones para llevar siempre encima cuando queramos sin ninguna limitación.
Cuidado con las falsas actualizaciones del navegador
Ya sea a través de Internet o de manera offline, ya os hemos mostrado diferentes maneras de hacernos con el navegador de Google para poder utilizarlo en nuestros diferentes dispositivos. Su importancia es tal que Google pone un especial cuidado en todo ello, de hecho nos encontramos ante uno de los grandes proyectos del gigante de las búsquedas. Pero al igual que sucede con otros muchos programas de este mismo sector del software, debemos poner un especial cuidado con todo aquello relacionado con las actualizaciones de los programas que usamos.
Tanto si nos referimos a los sistemas operativos como a todos los programas que aquí instalamos, dichas actualizaciones son elementos sumamente importantes para mantener el programa al día al tiempo que evitamos todo tipo de fallos de seguridad. Los atacantes son plenamente conscientes del enorme uso de este programa de Google. De ahí que haya diferentes métodos para hacerse con nuestros datos de un modo u otro.
Google no para de lanzar actualizaciones para parchear las más recientes vulnerabilidades detectadas, pero nosotros como usuarios también debemos poner de nuestra parte. Y es que a la hora de actualizar el programa como tal, deberíamos hacerlo a través de las vías oficiales. Es decir, siempre será preferible echar mano de la actualización automática que se lleva a cabo desde el propio programa, o descargar la última versión tan solo desde la web oficial del mismo.
Os contamos todo esto porque a lo largo de los últimos tiempos se han detectado multitud de ataques en forma de falsas actualizaciones que podemos encontrar en Internet. Uno de los casos más sonados y habituales es el que se lleva a cabo a través del código malicioso ClearFake que además lo podemos encontrar en diferentes idiomas para adaptarse a la configuración de Chrome y engañar mejor a los usuarios. Este es un tipo de malware que podemos encontrar en sitios web maliciosos que nos ofrecen una actualización del navegador, y que infectan nuestro equipo nada más pulsar en el correspondiente botón.
A partir de ahí ya se encargan de instaurarse en Chrome e intentar hacerse con la mayor cantidad de datos personales y privados como sea posible. Para evitar este tipo de problemas, como os dijimos antes, lo mejor es actualizar a través de las vías oficiales de Google.
Chrome Portable: otra opción para no depender de Internet
Además del instalador offline oficial que acabamos de ver, existe otra alternativa no oficial para descargar e instalar Chrome en nuestro ordenador sin tener que pasar por su software de descarga: usar un Chrome Portable.
Los programas portables son aquellos que no necesitan instalación en el ordenador. Estos programas suelen venir dentro de un archivo comprimido, o paquete autoextraíble, junto con todas sus dependencias. De esta manera, solo con descomprimir o extraer el programa, ya lo tendremos listo para utilizarlo, sin tener que instalar nada. Podremos ejecutarlos sin problemas desde un dispositivo de almacenamiento externo ya sea un pendrive, un disco duro externo o incluso una tarjeta de memoria. Además, al no realizar una instalación del sistema tampoco realiza modificaciones en el Registro de Windows.
Eso sí, debemos tener en cuenta que los programas portables tienen algunas limitaciones. Sobre todo, a la hora de actualizarse. Debemos estar muy pendientes de actualizar estos programas a la última versión manualmente, sobre todo por la seguridad. De no hacerlo, podemos estar poniéndonos en peligro. También debemos tener cuenta que las versiones portables de Chrome no son oficiales, por lo tanto, debemos bajarlas siempre de sitios web fiables.
El mejor sitio para descargar Chrome portable de forma segura es PortableApps. Debemos tener mucho cuidado con el navegador portable, ya que los datos personales se guardarán dentro de su propia carpeta si no utilizamos la sincronización con una cuenta de Google, y si esta carpeta cae en malas manos (si lo llevamos en un USB, por ejemplo, y lo perdemos), toda nuestra información quedará expuesta.
Dar una oportunidad a Chromium
Google Chrome, como su nombre indica, es el navegador de Google. Este, a pesar de estar basado en Chromium (un navegador de código abierto) es totalmente privativo. Y esto se debe a que Google nos obliga a pasar siempre por su aro.
Si nos gusta Chrome, pero no queremos depender tanto de Google, ¿por qué no le damos una oportunidad a Chromium? Este motor, gratuito y de código abierto, también se puede encontrar en forma de navegador independiente. Y con él vamos a conseguir una experiencia prácticamente igual a la del navegador de Google, pero sin todos los «extras no deseados» que nos ofrece Google.
El problema es que Chromium es algo más complicado de descargar e instalar, ya que no hay un instalador oficial como tal, sino que Google solo nos ofrece el código para que lo compilemos nosotros. Aun así, podemos encontrar versiones ya compiladas, y actualizadas, perfectas para sustituir a Chrome. Por ejemplo, desde este enlace podemos bajar una versión portable de Chromium, la cual nos puede acompañar siempre en un USB.
Otra opción pasa por utilizar otros navegadores también basados en Chromium, como es el caso de Edge, el navegador incluido de forma nativa en Windows que, además, es compatible con todas y cada una de las extensiones disponibles para Chrome. Además, ofrece más opciones de configuración de seguridad que Chrome, ya que el navegador de Google las reúne en una opción de configuración mientras que Edge permite personalizar el funcionamiento tanto de los rastreadores, como los bloqueadores de publicidad, archivos maliciosos y demás.
Otra opción pasa por utilizar navegadores como Opera o Vivaldi, navegadores que también están basados en Chromium, por lo que también podemos instalar las extensiones que habitualmente podamos utilizar en Chrome. Vivaldi, además, incluye un gran número de opciones de seguridad adicionales que no las vamos a encontrar ni en Chrome ni en Edge, por lo que es una excelente opción a tener en cuenta si buscas seguridad a la hora de navegar por internet.