Ayer fue martes de parches. Y, como es habitual, Microsoft lanzó sus nuevos parches de seguridad para Windows. La finalidad de estos parches es solucionar todas las vulnerabilidades que se hayan detectado en Windows, Office y otros productos en el último mes, desde el lanzamiento de los últimos parches. Además, estos nuevos parches de seguridad son muy importantes ya que son los primeros que recibe el nuevo Windows 11. Vamos a ver en detalle estas actualizaciones.
¿Qué sistemas operativos se han actualizado?
Estos nuevos parches de seguridad están disponibles para todas las versiones de Windows que cuenten con soporte. Esto quiere decir que cualquier usuario que utilice desde Windows 7 hasta el último Windows 11 podrá actualizar su sistema para protegerse de los últimos fallos detectados.
En el caso de Windows 7, por ejemplo, siempre que se tenga contratado el plan de soporte extendido, los usuarios recibirán un parche para corregir 19 vulnerabilidades importantes. En el caso de Windows 8.1, Microsoft ha solucionado un total de 27 vulnerabilidades importantes. Pero, en ninguno de estos dos sistemas operativos se han corregido vulnerabilidades críticas.
Ya entrados en Windows 10, la versión más antigua con soporte es la 1909, la cual ha corregido 37 vulnerabilidades, siendo una de ellas crítica y el resto importantes. Las versiones 2004, 20H2 y 21H1 han corregido por su parte 39 vulnerabilidades, una de ellas críticas y las 38 restantes importantes.
Y, por último, los usuarios que ya hayan actualizado a Windows 11 han corregido 39 vulnerabilidades, 2 de las cuales críticas y el resto importantes.
Fallos de seguridad más graves corregidos en estas actualizaciones
Windows 10 y Windows 11 comparten un mismo fallo de seguridad crítico: CVE-2021-40461. Este es un fallo de día cero en Windows Hyper-V que permite la ejecución de código remoto en el PC de los usuarios. Además, los usuarios de Windows 11 cuentan con otra vulnerabilidad a mayores, CVE-2021-38672, también relacionada con Windows Hyper-V.
Además de este fallo de seguridad, el resto de las vulnerabilidades son más simples, destacando algunos problemas en Internet Explorer y en el nuevo Edge para Windows que podían poner en peligro la seguridad de los usuarios.
En todas las versiones de Windows 10, estos parches de seguridad también corrigen un problema que impedía que algunos programas, como Office o Adobe Reader, se abrieran correctamente, haciendo que dejaran de responder. Esto ocurría en equipos con Microsoft Exploit Protection for Export Address Filtering (EAF) activado. Además, en Windows 11, también se ha solucionado un error grave relacionado con los software de red Intel «Killer» y «SmartByte» que afectaba seriamente al rendimiento de las conexiones.
Junto a estos parches de seguridad, Microsoft ha lanzado actualización para todos los componentes de .NET Framework de todos sus sistemas operativos. Esta actualización llega, igualmente, a través de Windows Update.
Cómo descargar
Como es habitual, estas actualizaciones llegarán a todos los usuarios de Windows de forma automática a través de Windows Update. Podemos forzar la búsqueda de actualizaciones directamente desde nuestro SO, o dejar que se descarguen automáticamente mediante la configuración de actualizaciones automáticas del PC.
Si tenemos problemas con estas actualizaciones, podemos descargarlas e instalarlas a mano desde los siguientes enlaces en función de nuestro sistema operativo:
- Windows 7: KB5006743.
- Windows 8.1: KB5006714.
- Windows 10 versión 1909: KB5006667.
- Windows 10 versión 2004, 20H2 y 21H1: KB5006670.
- Windows 11: KB5006674.
Por último, Microsoft avisa de algunos errores en Windows 7 y 8.1 al instalar estos últimos parches que pueden afectar al rendimiento general del sistema al trabajar con clústers de discos.