Las diferentes versiones que Microsoft ha lanzado de su sistema Windows a lo largo de las últimas décadas han supuesto un elemento muy importante en la historia del software. En estos instantes se cumplen 18 años que la primera versión con arquitectura de 64 bits, vamos a repasar qué supuso realmente este paso hacia adelante.
Debemos tener en consideración que el sistema operativo que instalamos en nuestro ordenador es uno de los elementos software más importantes. A partir del mismo podremos elegir los programas a instalar, su tipo, arquitectura y modo de uso. Por tanto, podríamos afirmar que el paso de los 32 a los 64 bits en Windows supuso un paso importante tecnológicamente hablando.
Además, este se dio en una de las versiones el sistema de Microsoft que más aceptación ha tenido a lo largo de la historia, nos referimos a Windows XP. La primera versión de este la pudimos ver a finales del año 2001, aunque no fue hasta 2005 cuando avanzó hasta la arquitectura de los 64 bits. En concreto nos referimos a los 18 años que han pasado desde que Microsoft decidió poner a disposición de todo el mundo Windows XP Professional x64 Edition. Sin duda aquí lo más significativo fue la llegada de la arquitectura de 64 bits al sistema operativo de los de Redmond.
Para que os hagáis una idea esta versión fue una variación del sistema operativo de 32 bits, Windows XP, para PC, pero ahora basada en la arquitectura x64. Así, se desarrolló para mejorar el direccionamiento de memoria soportados por las arquitecturas AMD64 e Intel 64, al igual que para los procesadores de 64 bits que se lanzasen más adelante.
Qué trajo consigo el primer Windows de 64 bits
Lo primero que debemos tener en cuenta es que este cambio incrementa el máximo de memoria RAM soportada por el sistema. De este modo se supera el límite de los 4 gigas impuestos hasta la fecha. A partir de ahí Microsoft declaró que el nuevo límite se incrementaría a medida evolucionen las capacidades hardware. Sin embargo, cuando llegó ese momento los usuarios no se vieron en la obligación de olvidar las aplicaciones con la antigua arquitectura.
Y es que Windows XP Professional x64 Edition usaba la tecnología WOW64 para la ejecución de aplicaciones de 32 bits. Sin duda una de las mayore ventajas que trajo consigo el cambio fue el incremento del que os hablamos en la cantidad máxima de memoria RAM. Por ejemplo, este nuevo sistema operativo ya podía manejar mucha más memoria, empezando por 128 gigas de memoria física y 16 teras de memoria virtual del PC. Llegados a este punto es importante saber que los procesadores de 64 bits realizan tareas de cálculo factoriales al menos dos veces más rápido que los basados en 32 bits.
En cuanto a la seguridad, el paso de XP a la nueva arquitectura descartó automáticamente la llegada de los códigos maliciosos desarrollados con la antigua arquitectura. Hay que tener en cuenta que en esos momentos eran la mayoría, lo que aportó a los usuarios un sistema operativo más fiable a la vez que seguro. Es evidente que en términos generales todo esto supuso un importante aumento de rendimiento general de nuestros equipos de sobremesa, algo en lo que se continuó trabajando con los años.