Elige la mejor opción para guardar copias de seguridad: DVD, disco duro USB o la nube

Algo que llevamos repitiendo desde hace años es la necesidad de llevar a cabo copias de seguridad de nuestras unidades de disco del PC de forma periódica. Seguro que si sufrimos algún ataque por parte de un virus o nuestro ordenador tiene un problema grave, en el futuro lo agradeceremos.
Lo más conveniente es llevar a cabo una copia de seguridad completa al menos de la unidad principal del equipo. Aquí se incluye el sistema operativo, las aplicaciones instaladas y nuestros datos personales. Pero si eso nos parece excesivo, también podemos llevar a cabo estos backups de determinadas carpetas que consideremos como esenciales. Más adelante, en la desagradable situación de que no podemos acceder a nuestro equipo, siempre podremos recuperar esa copia de seguridad de manera rápida y sencilla.
De hecho hay muchas aplicaciones, incluida una función en el propio Windows, que facilitan e incluso automatizan estas tareas, por lo que no tenemos excusa. Pero aquí os queremos hablar del medio más adecuado a la hora de almacenar todos estos datos. Hay que tener en cuenta que algunas copias de seguridad están compuestas por varios gigas de ficheros y carpetas, por lo que debemos elegir bien la fuente donde vamos a almacenar todo ello. En los tiempos que corren quizá los destinos más habituales sean los DVDs, un dispositivo externo como un disco duro o un pendrive, o decantarnos por un servicio de almacenamiento en la nube.
A continuación os vamos a hablar de las opciones más interesantes, sus pros y sus contras, dependiendo del método por el que nos decantemos para guardar todo esto.
Razones por las que usar un DVD
Teniendo en consideración las opciones disponibles con las que nos encontramos en estos instantes para almacenar cantidades masivas de datos, quizá para muchos el DVD haya quedado desfasado. Pero hay que tener en consideración que este soporte físico, a pesar de los años que lleva entre nosotros, sigue siendo muy utilizado para estas tareas.
Debido a sus velocidades de transferencia y a que se trata de un componente sensible y propenso a dañarse, las copias de seguridad que vamos a necesitar en breve no deberían guardarse usando este sistema. Sin embargo si lo que necesitamos es almacenar grandes cantidades de datos para almacenar durante un largo periodo de tiempo, esta es una solución muy efectiva. De ahí precisamente que sea el método de almacenamiento que siguen utilizando muchas empresas para guardar datos a largo plazo.
Hay que tener en cuenta que estos soportes están fabricados para durar hasta 60 años si los cuidamos bien. Mientras que las unidades de disco tanto internas como externas empiezan a fallar bastante antes.
Cuándo es mejor utilizar un disco externo o un pendrive
Quizá este sea el soporte más habitual hoy día para almacenar nuestras copias de seguridad. Evidentemente esto es algo que nunca deberíamos hacer en las unidades locales del ordenador, de ahí el uso de estas que son externas. La principal ventaja de este sistema de almacenamiento es la comodidad que nos proporciona, así como su velocidad de lectura y escritura. Por ejemplo nos podemos decantar por discos externos SSD o memorias flash USB, donde la velocidad es muy alta.
Además normalmente los ordenadores detectan de forma automática estos dispositivos para recuperar o guardar esas enormes cantidades de datos. Sin embargo para hacer un backup a largo plazo, quizá no sea la mejor opción. En ese caso es mejor que echemos un vistazo a la alternativa mencionada antes.
Pros y contras de utilizar la nube para las copias de seguridad
Quizá el método de almacenamiento más actual y que además no para de crecer sean las plataformas de almacenamiento en la nube. Hay muchas empresas nos ofrecen sus servicios de estas características para guardar nuestros archivos y carpetas. Además algunos, como OneDrive de Microsoft, nos dejan automatizar estas tareas de backup. No cabe duda de que en este caso la principal ventaja es que podremos acceder a todos los datos almacenados desde cualquier dispositivo y lugar.
Bastará con que dispongamos de una conexión a Internet y un navegador para acceder a nuestro espacio remoto en la nube. Pero este método para nuestras copias de seguridad no es perfecto. Y es que no siempre vamos a tener disponible una conexión a Internet, por ejemplo si el equipo que deseamos recuperar está dañado. Además la transferencia de datos aquí es mucho más lenta que si por ejemplo utilizamos un disco externo o un pendrive. A todo ello debemos sumarle que estamos almacenando datos personales y privados en un servidor ajeno, lo que no gusta a todo el mundo por motivos de seguridad.