Si hablamos de YouTube, hablamos de la única plataforma donde cualquier usuario puede colgar un vídeo y llegar a miles de miles de personas en todo el mundo. Pero, YouTube, no es una ONG, y tiene que pagar los servidores donde se almacenan todos los vídeos, y lo hace a través del dinero que obtiene por los anuncios que se muestra antes, durante y después de los vídeos.
En los últimos años, el número de anuncios que se muestran en YouTube es espectacular y para ver un vídeo de, por ejemplo 10 minutos, podemos tardar 15, contando con los dos anuncios que se muestran al principio y las diversas interrupciones comerciales que podemos encontrar en su interior.
Esto ha obligado a millones de usuarios en todo el mundo a utilizar bloqueadores de anuncios de YouTube. YouTube es consciente del uso que hacen millones de personas en todo el mundo, un uso que perjudica a los ingresos por publicidad que muestra la plataforma y, desde hace unas semanas, ha comenzado a bloquear la reproducción si no se desactiva previamente.
YouTube Premium si muestra anuncios
La solución para los usuarios pasa, una vez más por pasar por caja, es decir, por pagar la suscripción YouTube Premium (esa que se muestra cada vez que accedemos a YouTube) y que tiene un precio de 11,99 euros. Sin embargo, aunque optemos por pagarla, eso no nos libra de toda la publicidad de esta plataforma.
En YouTube, no solo nos encontramos con anuncios de la plataforma, en los vídeos que visitamos, sino que, además, también podemos encontrar anuncios comerciales dentro de los vídeos, anuncios incrustados por el creador del vídeo junto con enlaces promocionales y demás.
Además, justo debajo del vídeo, según podemos leer en Reddit, también se pueden mostrar anuncios de aplicaciones o web, anuncios gestionados por el creador del contenido, nunca por YouTube, por lo que, uno de los principales atractivos de YouTube Premium deja de tener todo sentido. Es probable que YouTube, en un futuro (dependiendo de cómo funcionen las suscripciones), cambie las condiciones y no permita este tipo de publicidad.
Esta técnica lo utilizan muchos creadores de contenido para sacarse un dinero extra adicional al que obtienen por los vídeos de YouTube y no hay ninguna forma de poder eliminarlos, ya que no se trata de un contenido que no controla YouTube, sino el creador del vídeo.
¿Merece la pena YouTube Premium?
De esta forma, aunque paguemos mensualmente los 11,99 euros que cuesta la suscripción Premium de YouTube, siempre nos podemos encontrar con anuncios dentro de los vídeos. El anuncio que se muestra en la parte inferior del vídeo es una molestia para los usuarios, ya que, si pagamos por no ver anuncios, no queremos ver absolutamente ninguno, independientemente de si el responsable de mostrar es el creador de contenido o YouTube.
Si esto no cambia en un futuro, lo único que conseguirá YouTube es que los usuarios accedan a esta plataforma únicamente cuando tienen la necesidad puntual de ver un vídeo en concreto y no para pasar largas horas de entretenimiento. Respecto al contenido publicitario o promocional que se muestre en el interior del vídeo y que ha sido incluido por el creador, ahí YouTube no puede hacer absolutamente nada. Lo único que hace es informar a los usuarios de que el vídeo contiene contenido publicitario, para que el usuario sepa que el contenido del que se habla está pagado.