Uno de los principales problemas de Google Chrome, y casi de cualquier navegador web moderno, es el elevado consumo de recursos y de memoria RAM que utiliza. En cuanto abrimos unas pocas webs, e instalamos alguna extensión, el uso de memoria alcanza ya los varios gigas. Y puede subir mucho más cuanto más vamos usando el navegador. Dependiendo del ordenador que tengamos, es muy probable que, al final, Chrome vaya demasiado lento, desesperante, y eso afecte también al resto del ordenador. Por suerte, siguiendo unos sencillos consejos, es posible evitarlo.
Es cierto que Google ha trabajado duro para intentar reducir el uso de memoria en los últimos meses. Una de las últimas novedades es la posibilidad de suspender todas las pestañas que no se usan para evitar que estén cargadas innecesariamente en la memoria. Pero, a pesar de estas novedades, Chrome sigue siendo un suplicio para todos los usuarios que tienen ordenadores relativamente lentos, o antiguos.
Si notas que Chrome hace que tu ordenador vaya lento, te dejamos una serie de recomendaciones con las que poder aligerarlo y hacer que las webs carguen más rápido y el ordenador, en general, consuma menos recursos.
Evitar que Chrome esté abierto en segundo plano
Una de las opciones que vienen activadas por defecto al instalar el navegador es la posibilidad de que este se quede abierto en segundo plano. De esta forma es posible hacer que, al hacer doble clic sobre su icono, se abra más rápido. Pero no es la mejor opción para aquellos que tienen un ordenador relativamente antiguo y quieren que el PC vaya lo más rápido posible.
Para desactivar esta opción, debemos abrir el menú de Configuración de Chrome, e ir al apartado «Sistema». Aquí localizaremos la opción «Seguir ejecutando aplicaciones en segundo plano al cerrar Google Chrome«, y la desactivaremos. De esta forma evitaremos que, al cerrar la ventana de Chrome, el proceso siga cargado en el ordenador.
Activar la aceleración por hardware
En el mismo apartado donde estábamos podemos encontrar una segunda opción que nos puede ser de interés: «Utilizar aceleración por hardware cuando esté disponible«. La aceleración por hardware se aprovecha de la tarjeta gráfica, que es más potente que el procesador del ordenador, para procesar ciertos tipos de contenidos. De esta manera, la CPU queda más libre y el ordenador en general funcionará mejor.
Cuantas menos extensiones, mejor
Las extensiones son tan útiles como dañinas. Aunque nos permiten dotar al navegador de funciones que no incluye por defecto, acumular muchas extensiones en Chrome hace que el navegador tarde mucho más en abrirse, y que, una vez cargado, consuma mucha más memoria y mucho más procesador de lo que ya, de serie, utiliza.
Por ello, es recomendable intentar usar Chrome con el menor número de extensiones posible. De esta manera ahorraremos la máxima cantidad de memoria posible, y nuestro ordenador funcionará mucho mejor.
Empezar a usar Chrome de cero
En caso de que nada de lo anterior funcione, es posible que tengamos algo dañado en nuestro perfil de usuario. En ese caso, podemos usar la opción de restablecer de Chrome para empezar de cero. Esta opción restablecerá por completo nuestro perfil y borrará todos nuestros datos y archivos temporales. Tendremos que volver a iniciar sesión con nuestra cuenta de Google para volver a sincronizar nuestros datos y seguir usando el navegador con normalidad. Aunque, después de la limpieza, irá ya mucho más rápido.
También, en este paso, es recomendable comprobar que tenemos Chrome actualizado, e incluso podemos probar alguna versión alternativa, como Chromium, o la propia Beta de Chrome, para descartar otros problemas.