Antes de que existieran las etiquetas como «H1» o «H2» para las distintas versiones de Windows, Microsoft utilizaba nombres largos y temáticos que utilizaba para sus actualizaciones. Tal vez puedas recordar algunos como «Aniversary Update» o «Fall Creators Update». Y te vamos a decir por qué tomó esa decisión.
Dichos nombres creaban cierta confusión y no eran universalmente reconocible en todos los lugares por igual. Por ejemplo, «Fall Creators Update» estaba vinculado a la estación de otoño del hemisferio norte. Y era algo totalmente ilógico y segregador para los usuarios del hemisferio sur. De hecho, era común encontrar usuarios que no superan exactamente cuándo se lanzaba cada actualización.
Es por ello que, desde el año 2018, Microsoft cambió a una nomenclatura más simple basada directamente en los semestres de un año, que son dos: «H1» y «H2». Cada uno indicando la primera y segunda mitad del año respectivamente. A través de este método, se logró evitar confusiones y es válido de igual manera para toda ubicación geográfica.
El problema de los nombres temáticos
Durante años, Microsoft dio nombre a sus actualizaciones de Windows con elementos temáticos que hacían referencia a acontecimientos o estaciones. Como prueba de ello, encontramos los «Anniversary Update», «Fall Creators Update» o incluso «Spring Creators Update».
Pero esta forma de nombrar, que por entonces, aparentemente era la adecuada, resultaba complicada de identificar para muchos usuarios. De hecho, otoño o primavera no coinciden en los mismos meses entre el hemisferio sur y norte en la tierra. De hecho, son simétricamente opuestos.
La confirmación de este problema vino de una fuente interna. Raymond Chen, ingeniero de software veterano en Microsoft, lo explicó en su blog «The Old New Thing». Además de ello, desde Redmond también se dieron cuenta de que no existía un orden cronológico para las versiones, lo que podía confundir a usuarios y desarrolladores.
La nueva nomenclatura basada en semestres
A partir del año 2018, Microsoft cambió radicalmente el nombre de sus actualizaciones para hacerlas más sencillas y universales. En lugar de los nombres temáticos, las versiones comenzaron a identificarse según la mitad del año: «H1» o «H2». Por ejemplo, una actualización lanzada en la primera parte del año tiene el nombre de «Windows 10 versión 20H1». Donde el «20» se corresponde con el año 2020. De esta manera, el formato se convirtió en un concepto más intuitivo y simple de entender, eliminando cualquier confusión regional. De hecho, Microsoft ya ha confirmado que la actualización de 2025 se llamará Windows 11 25H2.
Además de ello, también ha cambiado la frecuencia de las actualizaciones importantes. Ahora se limitan a una versión anual. Lo que evita cualquier saturación de versiones y ayuda a que los usuarios y empresas mantengan su sistema más estable. Por consiguiente, al saber la fecha exacta de la próxima actualización, cualquier cliente de Windows puede prever el tiempo restante hasta la siguiente actualización.
Como ves, aunque pueda parecer una simple anécdota, es un ejemplo sobre cómo una decisión estratégica tan simple puede simplificar y ayudar a identificar las versiones de Windows. La clave de este asunto ha sido apostar por una nomenclatura más lógica y ajustada a la población mundial.
| Aspecto | Sistema Antiguo (pre-2018) | Sistema Nuevo (post-2018) |
|---|---|---|
| Ejemplo de Nombre | Anniversary Update, Fall Creators Update | 22H2, 23H2, 24H2 |
| Lógica Subyacente | Temática / Estacional / Marketing | Cronológica / Semestral / Técnica |
| Claridad Global | Baja (confusión por estaciones) | Alta (universalmente entendido) |
| Principal Inconveniente | Sesgo geográfico y falta de orden cronológico claro | Menos atractivo para marketing, pero más funcional |
