Afortunadamente, hoy día tenemos la posibilidad de elegir entre una enorme cantidad de navegadores web, pero esto no siempre fue así. Hace años este mercado del software estaba mucho más limitado en cuanto a títulos disponibles, y Netscape fue uno de los más importantes.
Cuando Internet daba sus primeros pasos y comenzaba su andadura en los ordenadores personales que los usuarios tenían en casa, evidentemente el mundo de los navegadores no estaba tan extendido como ahora. A finales del pasado siglo, la propuesta que ofrecía el gigante Microsoft con su Internet Explorer, era el máximo referente a la hora de navegar. Pero poco a poco fueron apareciendo algunas soluciones que intentaron desbancar y plantar cara a este importante software.
Uno de los títulos más importantes y que marcó una época es precisamente en el que nos vamos a centrar ahora, hablamos de Netscape.
Primeros pasos de Netscape, el navegador alternativo
En un principio, la empresa propietaria de este conocido programa, Mosaic Communications Corporation, vio la luz en abril del año 1994. La fundaron Marc Andreessen y Jim Clark y se puede decir que fue una de las pioneras en todo aquello relacionado con el uso de la World Wide Web. Precisamente por esta razón sus máximos responsables tomaron la determinación de lanzar su propio navegador web.
En un principio la denominación que obtuvo el mismo fue Mosaic Netscape que vio la luz en el mes de octubre del mismo año, 1994. Pero su nomenclatura cambió poco después y ahí fue cuando nació el popular Netscape Navigator. Uno de los principales objetivos de este proyecto fue competir de forma directa con Internet Explorer de Microsoft, que se incluyó con Windows 95.
Poco a poco su aceptación por parte del gran público fue creciendo. Uno de los grandes movimientos se produjo en 1998. Fue entonces cuando en el mes de enero Netscape comenzó su andadura como un proyecto de código abierto de la firma Mozilla. Sus máximos responsables eran plenamente conscientes de que hacer sombra al proyecto de Microsoft era bastante complicado. De ahí que tomaron la determinación de publicar su código fuente para intentar atraer a una mayor cantidad de usuarios.
Crecimiento y fin del programa
Lo cierto es que por aquel entonces fueron muchos los adeptos a este navegador alternativo y migraron desde Internet Explorer. Tal es así que unos meses después el gigante AOL, entonces conocida como America Online, tomó la determinación de adquirir Netscape Communications por una cifra en torno a los 4.200 millones de dólares. Fue esta compañía la que posteriormente lanzó al mercado el conocido Netscape 6.0 que por aquel entonces se basaba en Mozilla 0.6.
A partir de ahí se lanzaron nuevas versiones, incluida una especial para el mercado corporativo, pero la empresa nunca consiguió desbancar al gigante de Microsoft. De hecho cuando Microsoft fue hallado culpable por monopolio, en cierto modo esto desembocó en el principio del fin de Netscape. El gigante del software se vio en la obligación de pagar 750 millones de hoja de dólares de multa. Además, a partir de ese momento tuvo que compartir algunas tecnologías propias y la decisión se vio acompañada porque AOL ya podía licenciar y distribuir Internet Explorer gratis durante los siguientes siete años.
De ahí que el importante declive que Netscape sufrió, para muchos, supuso el fin del programa. En 2005 la empresa abandonó el proyecto de Netscape y echó a la calle a buena parte de su equipo. El fin del proyecto se dio en 2008 de forma definitiva tras el lanzamiento de Netscape 9.
Con todo y con ello y a pesar de los años que han pasado desde entonces, muchos que migraron a esta alternativa siguen recordando el navegador con cariño. Una de las razones es que fueron capaces de dar de lado al gigante Internet Explorer para hacer crecer este navegador que formará parte de la historia de Internet.
Probar Netscape hoy
Se trata de un navegador que lleva mucho tiempo desaparecido. En concreto, más de 16 años. Sin embargo, si lo echas de menos, y quieres recordar cómo era navegar en aquellos entonces, hay alguna forma de volver a instalar Netscape en tu PC. Eso sí, no es nada sencillo. Aunque hay algunas versiones que pueden funcionar de forma nativa en Windows 10 y 11, ponerlas en marcha es algo muy complicado, y poco recomendado.
Lo ideal, como con todo el software retro, es apostar por una máquina virtual con Windows 98. Y buscar el instalador original de este navegador en alguna web como Internet Archive.
Precauciones al probar este navegador
Pero, tal y como vamos a contar a continuación, lo recomendable a la hora de probar este navegador que os comentamos es hacerlo por pura curiosidad. Es evidente que el programa está repleto de vulnerabilidades y lleva muchos años sin recibir ningún tipo de soporte, por lo que no deberíamos hacer un uso habitual del mismo ni introducir datos personales. Quizá todo ello nos sirva para rememorar viejos tiempos, pero poco más.
Eso sí, sea cual sea el tipo de uso que hagamos de Netscape en la actualidad, a través de una máquina virtual o en nuestro ordenador original, debemos tener cuidado con las páginas web que visitamos. Debemos tener muy presente que se trata de un programa antiguo que lo más probable es que esté lleno de vulnerabilidades, ya que lleva muchos años sin actualizarse. Básicamente, os queremos decir que no deberíais visitar webs sensibles que hagan uso de datos personales.
Por supuesto, tampoco deberíamos introducir ningún tipo de credencial privada para acceder a nuestras plataformas y aplicaciones web. Esto podría poner en riesgo nuestros datos y dichas credenciales sin que ni siquiera nos demos cuenta. En resumidas cuentas, si queremos rememorar viejos tiempos y probar este antiguo navegador, por ejemplo, en una máquina virtual, no tiene nada de malo. Sin embargo, deberíamos probarlo con páginas web inocuas y que no nos pidan ningún dato personal, como por ejemplo sucede con las webs bancarias o las redes sociales.
De hecho, aunque se trate de programas centrados en la navegación por internet más actuales, si no los tenemos debidamente actualizados deberíamos prescindir de los mismos. Nos podemos sentar un contar con proyectos abandonados por sus desarrolladores hace solo unos meses y que ya no son de confianza para este tipo de tareas que os comentamos. Al igual que sucede con el resto del software, el navegador siempre debe estar actualizado a su última versión.
