La tienda de aplicaciones de Windows está aquí para quedarse. Al menos, a largo plazo. Con la llegada de Windows 8, Microsoft introdujo una nueva forma de buscar, bajar e instalar aplicaciones en su sistema operativo, una plataforma similar a la que podemos encontrar en otros sistemas como macOS o Android: la Microsoft Store. Esta tienda, poco a poco, ha ido mejorando y haciéndose más clara y útil. Y, con la llegada de Windows 11, mejorará mucho más. Sin embargo, aunque no lo sepamos, hay algunos trucos que nos pueden ayudar a que la tienda sea aún más útil. Y uno de ellos es iniciar sesión con dos cuentas de Microsoft a la vez.
Cuando instalamos Windows, y creamos nuestro primer usuario vinculado a una cuenta Microsoft, esta cuenta se utiliza en los distintos servicios que nos ofrece el sistema operativo, como en OneDrive, Office, Skype y, por supuesto, su tienda de aplicaciones. Todo lo que compremos dentro de esta tienda quedará vinculado a esta cuenta, y podremos volver a bajarlo en cualquier momento, y en cualquier PC.
Sin embargo, no tenemos por qué usar la misma cuenta que tengamos vinculada a Windows dentro de la tienda de aplicaciones, sino que podemos usar perfectamente otra cuenta cualquiera, nuestra o de otra persona, para este fin.
¿Qué podemos hacer con una segunda cuenta en la Microsoft Store?
Aunque esta configuración puede tener muchas utilidades, básicamente todo se resume en una cosa: compartir compras. Al iniciar sesión en la Microsoft Store con una segunda cuenta, lo que estamos haciendo es tener acceso a todos los programas o juegos que se hayan comprado desde esa segunda cuenta. Por ejemplo, si un amigo o familiar ha comprado un juego en la tienda, nosotros podemos bajarlo e instalarlo en nuestro ordenador sin necesidad de tener que volver a pagar. Y, mientras no cerremos la sesión, el juego será totalmente funcional. Lo mismo ocurre si hemos comprado un programa (como Photoshop Elements) y queremos que otra persona pueda bajarlo y usarlo.
Y no solo eso. Esta configuración también es muy práctica a la hora de compartir el Xbox Game Pass entre varios PCs. Siempre se habla de compartir la suscripción entre dos o más ordenadores, pero generalmente no se hace referencia al PC en esta tarea. Para ello, es necesario iniciar sesión en la Microsoft Store con la cuenta Microsoft que paga la suscripción del servicio. Y, de esta manera, podremos tener acceso a todos los juegos del Game Pass sin tener que pagar nada más.
Además, si mantenemos nuestra cuenta principal dentro de la app de Xbox, aunque esta sea diferente a la de la Microsoft Store, todos los logros y los progresos quedarán vinculados a nuestro usuario personal, no al de la cuenta que paga la suscripción. Por lo que no habrá problemas con los juegos o las partidas.
¿Puede haber problemas por usar dos o más cuentas a la vez?
Siempre que se haga un uso responsable, la verdad es que no va a haber problemas. Microsoft no controla demasiado el número de equipos donde se inicia sesión con una misma cuenta Microsoft, y, aunque en las Xbox el truco de compartir la suscripción está más limitado, en PC no hay restricciones.
Eso sí, tampoco recomendamos abusar, ya que, si Microsoft detecta que una misma cuenta se está usando en muchos ordenadores a la vez, puede que eso haga saltar sus alarmas. Además, hay que tener en cuenta que, si compartimos el usuario y la contraseña con otra persona, esta podrá acceder a los demás datos que tengamos guardados en esa cuenta, como el almacenamiento de OneDrive o a nuestro correo. Mucho cuidado con esto.