Tal vez hayas tenido la sensación alguna vez de que compraste un disco duro de 1 TB o 500 GB, y, sin embargo, sin instalar apenas nada en él, de repente lo ves a la mitad de su capacidad. Esto tiene varias causas concretas, y la más común de ellas es que los ajustes de Windows estén devorando poco a poco y en silencio la capacidad de tu disco duro.
Nuestro sistema operativo se «alimenta» de nuestro disco duro guardando archivos temporales, versiones antiguas del propio SO o con datos duplicados que lo llevan a ser más una sanguijuela que un sistema informático. Pero para combatir este tipo de prácticas, nos hemos encargado de traer cuatro buenas soluciones para que liberes un montón de espacio de tu disco. Y es que, aunque Windows sea el que ocupe todo tu disco, también tiene funciones para que lo liberes de su pesada carga.
Podemos utilizar el Sensor de almacenamiento, desactivar funciones que no vamos a necesitar, y demás cosas que te vamos a contar en este artículo. Así que te vamos a dar todo mascado, paso a paso, no solo para que recuperes tu terreno dentro del PC, sino también para que mejore el rendimiento de todo tu sistema operativo.
Libera así tu almacenamiento en el disco duro
Activa el Sensor de almacenamiento
El Sensor de almacenamiento es una de esas funciones incorporadas en Windows 11 que son muy queridas por la comunidad. Podemos acceder a él desde «Configuración» (Win + I para entrar), luego vamos a la opción de «Sistema», y, por último, a «Almacenamiento». Dentro de este apartado, veremos una sección con el nombre «Sensor de almacenamiento» para que lo configuremos. A través de él, vamos a poder eliminar archivos temporales de manera automática, la papelera de reciclaje e incluso las descargas más antiguas. Tan solo tenemos que configurarlo correctamente, y él se encargará de todo.
Elimina versiones anteriores de Windows
Cuando actualizamos nuestro sistema operativo, el propio sistema se encarga de hacer una copia de seguridad de la anterior versión por si las cosas van mal. Como medida de seguridad, es perfecta, pero si llevas un tiempo en esta actualización y todo va como la seda, no te va a servir de nada. Y vas a recuperar, fácilmente, una media de 10-20 GB. Para hacerlo, solo tienes que escribir en inicio «Almacenamiento». Una vez que estés dentro, solo tienes que hacer clic sobre «Archivos temporales», y de entre las opciones marcadas, elige «Limpieza de actualizaciones de Windows».
Ahora que en el último apartado hemos tenido que acceder a los Archivos temporales, tal y como ves en la imagen, también hay varios apartados que puedes eliminar para ahorrar espacio:
- Archivos de Optimización de distribución
- Archivos de registro de actualización de Windows
- Miniaturas
- Archivos temporales de Internet
- Antivirus de Microsoft Defender
- Caché del sombreador de DirectX
- Papelera de Reciclaje
Desactiva la hibernación en caso de que no la uses
El modo hibernación permite que el sistema operativo guarde el estado actual y se apague por completo, lo que hará que consuma cero energía. Pero en el caso de que no utilicemos esta función, conlleva su correspondiente archivo, que se llama «hiberfil.sys» y puede ocupar varios GB. Si quieres desactivarla, solo tienes que hacer esto:
Entra en el Símbolo del sistema como administrador (clic derecho sobre él y «Ejecutar como Administrador). Y una vez que entres, escribe este comando:
powercfg -h on