Muchos son los programas y soluciones software de la más diversa índole de las que podemos echar mano en estos momentos. Algunas más completas y complejas que otras, las hay de pago y gratuitas, e incluso las hay que no sirven absolutamente para nada.
Luego ya, dentro de ese casi interminable catálogo de productos software que sus desarrolladores ponen a nuestra disposición, cada uno elige lo que más le interesa. Con esto lo que os queremos decir es que, como os imagináis, dependiendo de nuestro presupuesto, necesidades o tipo de uso, nos decantamos por una propuesta u otra. Por ejemplo, para muchos pagar el elevado coste de un programa como Photoshop, supone una barbaridad, más con las muchas propuestas gratuitas, como GIMP, que tenemos al alcance de la mano.
Sin embargo debemos tener en cuenta que los profesionales del diseño y el retoque que expriman al máximo el software de Adobe, amortizarán ese coste en poco tiempo. Esto es algo que se hace extensible a otras muchas soluciones, aunque el software gratuito y de código abierto cubre las necesidades de la mayoría de los usuarios de a pie.
Algunas de las aplicaciones de Microsoft no sirven de mucho
De ahí que multitud de compañías, entre las que podemos englobar a la mismísima Microsoft, poco a poco van remando a favor de este software open source, al menos en parte. De ahí que haya programas pertenecientes a ciertas grandes empresas que no tienen demasiado sentido. Este es el caso, siguiendo con la misma firma con sede en Redmond, de una de sus aplicaciones que lleva una buena cantidad de años entre nosotros.
En concreto nos referimos a una aplicación UWP que podéis descargar desde la propia tienda oficial del sistema operativo, la Microsoft Store, que sirve para reproducir DVDs. Sí, habéis oído bien, para reproducir DVDs, que no Blu-ray, ya que no es compatible con ese formato, sino DVDs.
Muchos podréis pensar cuál es la razón de que llamemos la atención ante este hecho concreto. Pues bien, os lo comentamos porque este es un programa que se lanzó junto al mismo Windows 10, por el que los de Redmond cobran por descargar y usar.
Obviamente para ello tenemos que acceder a la tienda de Windows 10, buscar el programa como tal, descargarlo e instalarlo en el PC. Pero seguro que más de uno, y de dos, lo ha hecho en todo el mundo, pagando sus 15 euros de rigor.
Para qué pagar por el reproductor de DVD de Microsoft, cuando es malo
Como la mayoría de vosotros ya sabréis de primera mano, en Internet encontramos decenas de programas en este sentido con solo buscar un poco. Y no solo eso, sino que hablamos de aplicaciones mucho más completas y funcionales, y además gratis. Porque al hablar del llamado Reproductor de DVD de Windows, programa UWP, hablamos de la simpleza y sencillez en sí misma, y por 15 euros. Al mismo tiempo disponemos de aplicaciones como las potentes VLC o Kodi que podemos descargar en cuestión de segundos sin coste, que son auténticos centros multimedia en toda regla.
Y es que como os comentamos, por no tener no tiene ni soporte para disco Blu-ray, algo básico para la mayoría en los tiempos que corren. Por tanto, si alguno a lo largo de estos años se ha preguntado si merece la pena pagar ese precio por ese programa en concreto de Microsoft, la respuesta es no. Es más, no merece la pena ni aunque lo regalasen.