La gran mayoría de los usuarios que de algún modo utilizan un navegador de internet, echan mano del popular Google Chrome. Esto es algo que viene sucediendo desde hace años y cuya tendencia no parece que vaya a cambiar en breve. Sin embargo, hay otras muchas propuestas interesantes como sucede en el caso de Mozilla Firefox o Microsoft Edge.
Son muchos los factores que influyen en el éxito de Chrome, empezando por la gran integración que tiene con el resto de las plataformas y servicios de la firma. Al mismo tiempo buenas parte de aquellos que usan durante un tiempo esta propuesta, no están en absoluto de acuerdo con la privacidad que nos ofrece. Aquí hablamos de la enorme cantidad de datos que el propio navegador almacena acerca de nuestra información personal y navegación.
Es por todo ello que multitud de usuarios acaban decidiendo migrar a otras alternativas un tanto más privadas pertenecientes a otras firmas. Por ejemplo, este es el caso del mencionado navegador que nos presenta Mozilla con su Firefox. Muchos de vosotros ya sabréis que la mayoría de los navegadores actualmente se basan en el motor de renderizado de la propia Google, Chromium. Por el contrario, Firefox se encuentra fuera de ese extendido grupo, lo que para muchos es una ventaja.
Os contamos todo esto porque en el caso de que hayáis tomado la determinación de migrar a esta propuesta más privada, antes de nada, deberíais realizar algunos cambios. En concreto nos referimos a determinados ajustes que deberíais personalizar o modificar antes de empezar a navegar con este programa.
Mejora el funcionamiento de Firefox desde el principio
Hay que tener en consideración que pasamos una buena cantidad de horas en la mayoría de los casos usando este tipo de programas. La principal razón de todo ello es que internet se ha convertido en parte importante de la vida de muchos. Esto se refiere tanto a nivel personal como profesional. Por tanto, ajustar el funcionamiento de nuestro navegador desde el primer momento en el que empezamos a usarlo, nos puede ahorrar más de un quebradero de cabeza.
Si nos centramos en Mozilla Firefox, lo primero que debemos hacer es establecer el nivel de privacidad que deseamos utilizar aquí. Esto es algo que podemos modificar desde su ventana de configuración en el apartado Privacidad & Seguridad eligiendo entre los tres niveles disponibles.
Igualmente os recomendamos establecer una página de inicio personalizada, ya sea usando la que nos ofrece el propio programa, o cualquier otra. Además, con el fin de sacar el máximo provecho navegador en todo tipo de plataformas y dispositivos, os recomendamos crear una cuenta en Firefox. Así la podréis usar en otros equipos como el teléfono móvil, entre otros. De esta manera al mismo tiempo tendremos la posibilidad de sincronizar todos nuestros datos de manera automática, lo que será de mucha ayuda. Llegados a este punto, es interesante saber que, desde el apartado de Sincronización, tenemos la posibilidad de elegir los elementos que deseamos sincronizar en este caso.
Otra de las funciones que deberíamos personalizar es la ubicación por defecto que se va a utilizar en las descargas que llevemos a cabo en internet. De igual modo deberíamos echar un vistazo a las aplicaciones que utiliza el programa para dar o quitar permisos dependiendo de la privacidad y seguridad que deseamos adoptar.