Este servicio de Amazon quería cambiar el sector gaming; ahora está muerto
El mercado de los videojuegos, o gaming, mueve actualmente mucho dinero. Por ello, cada vez son más las compañías y grandes empresas que se quieren subir al carro para intentar sacar provecho de esta popularidad. Sin embargo, al hacerlo, se dan cuenta de que no es tan fácil como parece. Y, a pesar de invertir miles de millones en una infraestructura y un servicio, desde su nacimiento han estado abocados al fracaso. Le pasó a Google, con Stadia. Y, ahora, la historia se repite con Amazon y uno de sus proyectos más ambiciosos: Luna.
Es posible que no hayas oído hablar de Luna (primer error de la compañía). Esta plataforma buscaba ofrecer a los usuarios la posibilidad de jugar a videojuegos en cualquier dispositivo gracias a la nube. No era necesario tener una consola ni un hardware de gama alta para poder ejecutar en cualquier pantalla cualquier juego de última generación.
Este servicio en un principio iba a llegar a todo el mundo, y además estaría dentro de la suscripción Prime (lo cual es una buena idea), sin embargo, nunca llegó a salir de Estados Unidos (segundo error), por lo que fuera de dicho país nadie ha podido dar una oportunidad al servicio. Y, aquellos que querían jugar, podían hacerlo a través de una VPN, aunque la experiencia era aún peor.
Tras el desastroso lanzamiento de Amazon Luna, la mayoría de los responsables del proyecto abandonaron su cargo, y Luna quedó a la deriva. No se ha oído mucho más de este servicio hasta hoy. Y, por desgracia, no son buenas noticias.
Mismo problema que Stadia: el modelo de negocio
El problema de Luna es que repetía un modelo de negocio similar al de Stadia. En lugar de ser el Netflix de los videojuegos, lo que la gente pide, Amazon solo nos daba unos pocos juegos gratis para jugar (juegos de tercera, que no valen para nada), y se reserva los grandes títulos para una modalidad de suscripción.
De esta manera, si queremos jugar a un título de Ubisoft, era necesario pagar, además del Prime, una cuota de 18 dólares al mes, para poder acceder a algunos de los títulos de esta desarrolladora. También tenía una suscripción aparte de juegos familiares, otra de juegos retro, otra «plus» con juegos mejores a los que vienen de serie con Prime, etc.
En Stadia, además de pagar el servicio, tenías que comprar los juegos en su tienda, a unos precios desorbitados para jugarlos con lag, pixelaciones y gráficos de la era de PlayStation 1. En Luna, además de pagar el Prime, tenías que pagar suscripciones adicionales desorbitadas para «maljugar», ya que el rendimiento tampoco era de los mejores.
Amazon Luna agoniza
Como vemos, son muchos los errores que ha cometido Amazon, los mismos que cometió Google. En el mundo de los videojuegos, especialmente en algo tan puntero como el streaming, solo están sobreviviendo los que dan al jugador lo que el jugador quiere. Es decir, xCloud, PlayStation Now y NVIDIA GeForce Now. Otros muchos han intentado formar parte de este mercado, y han terminado acabados.
Ahora, Amazon ha anunciado que elimina 50 juegos del catálogo de Luna, dejándola aún mucho más reducida y agonizante. Mientras tanto, sigue sin haber planes de sacar el servicio más allá de Estados Unidos, ni de añadir más juegos a la suscripción de Prime, que para eso está ya incluida dentro de ella.
Un servicio que lleva casi muerto desde su lanzamiento al que han puesto un clavo más en el ataúd. ¿Alguien duda del futuro de este servicio? No creemos que pase de la primera mitad de 2023. Y, en esta ocasión, Amazon no va a ser tan benevolente de devolver el dinero a aquellos que confiaron en el servicio como sí ha hecho Google (un gesto que ha hecho que Stadia se despida por todo lo alto).