Oficialmente, Twitter ya es de Elon Musk. Hace unos días, el magnate se hizo con el control de la compañía tras un largo proceso de negociaciones (y problemas legales), y lo primero que hizo fue echar a toda la cúpula administrativa para tomar el control total de la empresa como CEO. Y los primeros cambios no han tardado en aparecer, cambios que a muchos usuarios no están gustando demasiado y que han dado lugar a un concepto que, cada vez, está teniendo mayor impacto dentro de esta red social: Mastodon. Pero, ¿qué es esto, y por qué a Elon Musk no le gusta que se hable de ello?
Vienen muchas curvas a Twitter. Entre los planes de Elon Musk se encuentra un lavado de cara completo de la red social, eliminando el odio y el troleo y hacer de la red social un lugar mucho más amistoso y agradable. Además, también hay nuevos planes de monetización, empezando por una cuota mensual (de entre 8 y 20 euros al mes) para aquellos que quieren ver menos publicidad, tener mayor visibilidad y una cuenta verificada.
Todo esto puede hacer que Twitter pueda recuperar la confianza perdida de muchos usuarios, pero también va a hacer que todos aquellos a los que les gustaba la red social tal como era hasta ahora, empiecen a buscar otras plataformas donde pasar el rato. Y es aquí donde entra en juego Mastodon.
¿Qué es Mastodon?
Mastodon nació como una plataforma de microblogging en 2016, muy similar en todos los sentidos a Twitter. En muy poco tiempo, esta red social empezó a ganar popularidad, pasando de 50 instancias, en 2017, a miles de ellas conectadas entre sí en la actualidad.
Como podemos ver, en apariencias y funciones, es muy similar a su rival. Las principales características que diferencian a esta red social de Twitter son:
- Se trata de una red distribuida. Es decir, no tiene un servidor central, sino que se basa en una red de servidores, creados y mantenidos por usuarios voluntarios. De esta forma, es muy complicado cerrarla o bloquearla.
- Los usuarios están repartidos en lo que se conoce como «fediverso», es decir, a través de diferentes instancias de Mastodon independientes.
- Los mensajes, o «toots», son de hasta 500 caracteres.
- Prima la libertad de expresión, siempre desde el respeto. Las instancias las controlan los administradores (generalmente, los creadores) con la ayuda de algunos moderadores independientes. Para evitar conflictos culturales, se suele controlar la interacción con otras instancias. Además, por normal general, está prohibido el contenido tóxico, ofensivo o relacionado con el nazismo
- Es totalmente gratuita y de código abierto. No tiene publicidad, ni funciones de pago, ni nada.
Siempre que ha habido algún cambio relacionado con Twitter, los usuarios han empezado a migrar en masa a esta otra red social. O, al menos, han intentado darle una nueva oportunidad, ya que casi siempre todos acababan volviendo. Aunque, es posible que esto cambie con la nueva era de Elon Musk.
¿Peligra el reinado de Twitter?
En pocas palabras, no. Twitter es un gigante, popular, sencillo de usar y, al fin y al cabo, donde está la mayoría de la gente. Es por ello por lo que, aunque es cierto que Mastodon está ganando usuarios, la mayoría de estos, al final, acaban volviendo a Twitter, ya que es allí donde se encuentran los contenidos que le interesan.
Desde luego, la migración masiva de usuarios reales (recordamos que uno de los problemas de Twitter, y con el que va a acabar Elon Musk, son los bots), es un problema. Si al final hay un éxodo masivo de usuarios, y se crean muchas comunidades interesantes, puede que sí logre mirarle a los ojos. Pero, hoy por hoy, lo tiene complicado, y para el nuevo CEO no supone ninguna preocupación, aunque no le quite el ojo de encima.
Si quieres dar una oportunidad a esta red social, puedes entrar a ella desde este enlace. Quién sabe, puede que se convierta en tu nuevo Twitter.