El impuesto a las tecnológicas de la UE hará que Spotify, Zalando y Glovo sean más caros
Conforme ha ido evolucionando Internet, las leyes han tenido que hacerlo para adaptarse y no quedarse atrás, aunque generalmente siempre lo hacen tarde y por regla general, mal. Hace un par de años, la Unión Europea aprobó el Impuesto de sobre Determinados Servicios Digitales, un nuevo impuesto destinado a recaudar más dinero a plataformas que ofrecen servicios digitales, como bien podemos deducir por el nombre.
Si hablamos de empresas que ofrecen servicios digitales, hablamos de Spotify, Glovo, Zalando, Vinted, Dilvery Hero, Booking entre otros. Estas empresas se han puesto de acuerdo y han enviado una carta a todos los ministros de economía de los países de la Unión Europea para replantear el importe que se les exige a través de esta ley, ya que, si quieren seguir en funcionamiento, se verán obligados a repercutirlo íntegramente a los usuarios.
Esta carta solo la firman empresas europeas, ninguna firma de fuera de la Unión Europea se ha unido a la propuesta. Este impuesto está relacionado con los trabajos de la OCDE para hacer una reforma fiscal de calado para que empresas que trabajan en el extranjero, tengan determinadas ventajas fiscales en algunos países y solicitan que este sea eliminado, ya que les pone en inferioridad de condiciones con empresas de fuera de la Unión Europea.
Este impuesto principalmente a las empresas en crecimiento que todavía están lejos del umbral de rentabilidad y a las que cuyos márgenes de ingresos son muy pequeños, al obligarles a pagar un impuesto extra que podrían destinar a hacer que la empresa llegue a otros mercados, añada nuevas funciones y demás. Las empresas que firman esta carta son: adevinta, AirHelp, Allegro, Booking, Catawiki, Criteo, Delivery Hero, Glovo, Just Eat, Spotify, Schibsted, Trustpilot, Vinted, Wolt y Zalando
El Impuesto de sobre Determinados Servicios Digitales se aplica sobre los ingresos brutos, es decir, sobre los ingresos que obtiene la empresa sin descontar todos los gastos asociados, por lo que se está aplicando sobre un importe que realmente no es margen de beneficio que pueda tener la empresa, por lo que da igual si la empresa es rentable o no, si tiene ingresos, del tipo que sean, está obligada a pagar, aunque el balance fiscal, es decir, que los beneficios sean negativos.
Si se aplicara sobre los beneficios, que sería lo lógico, no habría ninguna polémica, ya que tampoco sería necesario trasladar este impuesto a los usuarios, al menos en su totalidad. Este grupo de empresas europea, solicita que este impuesto finalice al igual que otras medidas que también se están llevando a cabo para no perjudicar el crecimiento económico, la innovación, el empleo y la inversión ya que suponen trabas a las que no se tienen que enfrentar empresas extranjeras incrementado la dificultad para competir de forma eficaz y de tú a tú.