Dos tecnologías que hace poco menos de dos décadas eran la punta de lanza del mundo audiovisual ahora ya son cosa del pasado. Los DVD y Blu-Rays marcaron una época, y nuestra generación se hizo con muchos de ellos, ya que mostraban una calidad inaudita hasta el momento en su contenido. Pero por desgracia, se ha ido diluyendo con el tiempo.
Las versiones modernas de Windows o las reproducciones en streaming han hecho que vayamos diciendo adiós a ambos soportes. Pero aún hay esperanza para la resistencia que quiere seguir haciendo uso de sus discos. Tan solo hay que tocar, literalmente, las teclas adecuadas para que volvamos a ver nuestro contenido en estos discos sin problema.
La manera de reproducir DVDs y Blu-Rays
Desde Windows 8, la propia Microsoft decidió eliminar el soporte para que reproduzcamos DVDs, y esto se debió en primer lugar al coste de los códecs de MPEG-2 y Dolby. Así que, si tienes lector de disco en tu PC y posees Windows 10 u 11, no ocurrirá absolutamente nada…
A no ser que tengas el programa adecuado.
En el caso de los Blu-Ray, la cosa se complica más aún, ya que posee cifrados como AACS y BD+. Lo que se traduce al final en licencias más caras debido a su tecnología más puntera.
Pero nada de eso se resiste al, desde mi punto de vista, mejor reproductor que existe en el mercado: VLC Media Player. Este reproductor gratuito y de código abierto es tan potente que ni siquiera los DVD y los BR se resisten a reproducirse. Tan solo has de tener un par de datos en cuenta.
El primero es que para reproducir Blu-Rays protegidos, deberemos descargar dos archivos adicionales que llevan el siguiente nombre:
- KEYDB.cfg
- libaacs.dll
El primero es una base de datos de clave, y el segundo una biblioteca de descifrado. Así que, en pocos pasos clave, esto es lo que tienes que hacer:
Lo primero es descargar VLC desde su propia web oficial y luego conseguir ambos archivos que hemos compartido justo arriba (siempre desde fuentes fiables).
Ahora, deberás colocar «KEYDB» en la carpeta con la ruta «%APPDATA%aacs». En caso de que no exista, créala. Por otro lad, copia la carpeta «libaacs» dentro de la carpeta de instalación de VLC (por defecto, será C:Program FilesVideoLANVLC»). Por último, solo tienes que abrir VLC, dirígete a la pestaña «Medio» y selecciona «Abrir disco», Blu Ray.
¿Y si nuestro PC no tiene lector?
En caso de que nuestro portátil o PC de sobremesa no lleve lector, algo muy habitual en los sistemas modernos, tenemos una opción antes de perder la esperanza. Siempre podremos hacernos con un lector externo USB a un precio bastante razonable (20-30 euros para DVD o unos 60 para Blu-Ray). Tienen una buena compatibilidad con Windows, y normalmente traen su propio software para los propios drivers.
Aun así, aunque tengamos un lector físico que hemos podido comprar, necesitamos un programa adecuado, y es por ello que VLC juega un papel fundamental en este tipo de actividades. Podrá seguir siendo el reproductor principal sin problema.