El navegador es la principal vía de acceso a internet cuando queremos realizar búsquedas, visitar páginas web, descargar contenido, compartir archivos entre otras cosas, pero no es la única vía de acceso a esta red, ya que las aplicaciones también en acceso, aplicaciones que nos limitan el campo de uso a la actividad que nos ofrezcan, como por ejemplo WhatsApp, que únicamente nos permite enviar y recibir mensajes. Sin embargo, mientras que las aplicaciones con acceso a internet suelen estar bien optimizadas y consumen los recursos necesarios, en los navegadores, lamentablemente no es así.
Algunos navegadores, con la idea en la cabeza de ayudar al usuario a interactuar con internet, incluyen algunas molestas funciones entre las que se encuentran abrir las pestañas que teníamos abiertas en la sesión anterior y de la recargar automáticamente el contenido de las pestañas que tenemos abiertas por citar algunas. En ambos casos, se está haciendo un consumo de recursos del equipo innecesario que podríamos dedicar a otras áreas del sistema.
Consumo de recursos de un navegador
Conforme vamos incrementando el número de pestañas abiertas en el navegador, dependiendo del contenido que muestre, el navegador comienza a consumir recursos del equipo. El número de recursos que consume el equipo se va incrementado poco a poco, conforme el navegador las actualiza periódicamente para comprobar si se ha actualizado el contenido que había disponibles.
La cantidad de recursos que necesita un equipo para actualizar una pestaña periódicamente no es el mismo que se necesita para actualizar 10 pestañas, especialmente si el contenido que se muestra incluye elementos multimedia como vídeos, plugins en tiempo real que actualizan información entre otros.
Afortunadamente, la mayoría de los navegadores nos permiten modificar la gestión que hacen de las pestañas para así, reducir la cantidad de recursos que necesita el equipo. En equipos poco potentes, es importante tener en cuenta esta funcionalidad y desactivarla para así aligerar la carga del procesador, y poder realizar otras tareas que no sean exclusivamente navegar.
Evitar que el navegador recargue las pestañas automáticamente
Antes de recurrir a otros métodos, igual de válidos, debemos probar si, cambiando los ajustes del navegador, conseguimos que el consumo de recursos de nuestro equipo se reduzca y, podamos utilizarlo para algo más que navegar, especialmente si se trata de un equipo que anda muy justo de recursos.
Chrome
En 2015 Google introdujo una función experimental que permitía desactivar la actualización de las pestañas en segundo plano, una función experimental que no llegó a la versión final del navegador. Unos años, con el lanzamiento de Chrome 79, introdujo una nueva función dentro de los ajustes de Chrome que permitía congelar el funcionamiento de las pestañas en segundo plano, una función que finalmente se implementó en el navegador, por lo que, en la actualidad, según afirma Google, las pestañas en segundo plano dejan de actualizarse transcurrido un determinado tiempo, tiempo que desconocemos.
Sin embargo, a pesar de lo que diga Google, las pestañas se actualizan continuamente, tanto si pulsamos sobre ellas como si no lo hacemos. El único método que tenemos para desactivar la actualización de las pestañas en segundo plano es a accediendo a la web chrome://discards/. En esta sección, se muestran todas las pestañas que tenemos abiertas en el navegador. Si queremos que dejen de actualizarse, nos dirigimos a la columna Auto Discardable y pulsamos en Toggle para que dejen de actualizarse.
Esta solución no es más que un apaño que no sirve para mucho, ya que, una vez cerremos el navegador, los cambios se perderán.
Edge
Si queremos desactivar la actualización de las pestañas en segundo plano en Edge, nos encontramos con el mismo problema que Chrome, ya que ambos están basados en Chromium. Chromium en la base de Chrome, Edge, Vivaldi, Opera y otros navegadores, por los que todos comparten la base, esto incluye las principales opciones de funcionamiento, al igual que los fabricantes de Android, que comparten la base, pero luego añaden los elementos de personalización que desean. Al estar basado en Chromium, al igual que Chrome, en teoría, las pestañas no deberían actualizarse en segundo plano ni cuando pulsamos sobre ellas, sin embargo, no es así.
La única forma de poder desactivar la actualización en segundo plano es a través de edge://discard, donde en la columna Auto Discardable, debemos pulsar en Toggle para que se muestra una X, lo que significa que la pestaña dejará de actualizarse en segundo plano mientras siga abierta en el navegador y seguirá sin actualizarse, aunque accedamos a la pestaña.
Esta solución, al igual que en Chrome no es más que un apaño.
Firefox
Para evitar que Firefox actualice las pestañas abiertas en segundo plano sin que sea necesario, debemos acceder a las opciones de configuración escribiendo en la barra de direcciones «about:config» sin las comillas. A continuación, buscamos la opción accesibility.blockautorefresh. De forma predeterminada, esta opción se encuentra en false, por lo que no se está bloqueado el refresco de las páginas web abiertas. Cambiamos el valor a true pulsando dos veces sobre ese valor y listo. A partir de este momento, no hace falta reiniciar el navegador, las pestañas que tengamos abiertas no se actualizarán en segundo plano ni cuando pulsemos sobre ellas.
Firefox es el único navegador que, al no estar basado en Chromium, si permite desactivar la actualización de las pestañas en segundo plano de forma permanente, no como en Chrome o Edge.
Utilizando extensiones
Si la gestión de las pestañas que hace nuestro navegador no acaba de satisfacer nuestras necesidades y el equipo sigue sufriendo debido a sus bajos recursos, la solución pasa por utilizar alguna de las diferentes extensiones que os mostramos a continuación, extensiones que podemos instalar tanto en Chrome, como en Edge, Vivaldi, Opera y, en general, en cualquier navegador basado en Chromium, aunque la extensión solo esté disponible en la Chrome Web Store.
The Great Suspender
Como podemos deducir por el nombre, si tenemos conocimientos de inglés, la extensión The Great Suspender nos permite suspender el funcionamiento de forma manual de todas aquellas pestañas que tenemos abiertas en el equipo y que no queremos se actualicen mientras no tengamos la necesidad de consultarlas. Esta es una de las funcionalidades que deberían implementar todos los navegadores de forma nativa, pero que, por motivos que desconocemos, no lo hacen. Podemos descargar esta extensión a través del siguiente enlace.
Tab Suspender
Otra interesante extensión que debemos considerar utilizar es Tab Suspender, una extensión que se encarga de suspender las pestañas que llevamos un tiempo sin utilizar y con la que podemos obtener hasta un ahorro del 80% de recursos del equipo, liberando memoria y reduciendo el consumo de batería de nuestro equipo. Cuando pulsamos sobre la extensión, esta se actualizará correctamente y mostrará la información más actualizada hasta ese momento. La descarga de Tab Suspender está disponible a través de la Chrome Web Store pulsando en el siguiente enlace.
Auto Tab Discard
Con esta extensión podemos descartar manualmente las pestañas que no queremos que se actualicen, pero queremos mantenerlas abiertas en segundo plano en nuestro equipo, lo que nos permite reducir el número de recursos necesarios por el equipo, así como liberar memoria y reducir el consumo de batería. A diferencia de otras extensiones, Auto Tab Discard muestra en el favicon de la web un icono que nos indica que la web está en reposo, es decir, sin actualizarse, lo que nos permite rápidamente identificar y ordenarlas en la parte izquierda o derecha del navegador para tener accesibles.