En nuestro PC seguramente dispongamos de una buena cantidad de software instalado, algunos títulos más usados o importantes que otros. Pero algo que encontramos en la mayoría de los equipos actuales, especialmente en los basados en Windows, son los antivirus.
De hecho en estas mismas líneas nos queremos centrar precisamente en este sector del software en concreto. Estos, como seguro que la mayoría de vosotros ya sabréis, son programas centrados en la seguridad que nos ayudan a mantener el equipo a salvo. Decimos que son un formato de programas que encontramos en la mayoría de los equipos, debido a su importancia.
Más si tenemos en cuenta que en los tiempos que corren pasamos buena parte del día conectados a Internet. Esto nos aporta muchas ventajas, pero al mismo tiempo, si no tomamos ciertas precauciones, entraña algunos riesgos. A esto le sumamos que en el ordenador, con el paso del tiempo, cada vez guardamos y compartimos una mayor cantidad de información sensible y personal.
Ya os hemos comentado en multitud de ocasiones la necesidad, casi obligatoria, de disponer de un programa de este tipo instalado en vuestro PC. Eso sí, aunque por motivos evidentes es muy importante su instalación, puesta en marcha y actualización, hay determinados casos en los que no es necesario todo ello. Son casos un tanto puntuales pero en los que nos podríamos ahorrar el uso de un programa de seguridad de estas características.
Ordenadores sin conexión a Internet pueden evitar los antivirus
En el caso de que trabajemos con un PC que no cuenta con conexión a Internet, cosa rara hoy en día, nos podríamos plantear prescindir instalar un antivirus. La red es una de las principales vías de entrada de todo tipo de malware, de ahí esta posible decisión que podríamos tomar.
Pero debemos tener en cuenta que esta no es la única fuente, ya que los virus nos pueden llegar al conectar una memoria USB al equipo o un disco duro.
No debemos instalar un antivirus en un PC con otro software similar
Hay usuarios que aún a estas alturas piensan que en lo que se refiere al software de seguridad, cuanto más, mejor. Ese es un error que comenten más personas de la que en un principio nos podríamos imaginar. Pero en realidad eso es perjudicial para el equipo como tal, y para el software del mismo.
Más de un antivirus instalado en un mismo sistema puede crear serios conflictos de funcionamiento, lo que afecta al resto del sistema. Por tanto lo mejor que podemos hacer es instalar un antivirus, el que más nos interese, pero solo uno.
Podemos desactivar los antivirus si consumen muchos recursos
Uno de los mayores inconvenientes que nos presentan este tipo de programas en concreto, es que en ocasiones consumen demasiados recursos del PC. Esto es algo que se hace especialmente patente si trabajamos con un PC antiguo o un tanto limitado en cuanto a especificaciones internas.
Es por ello que, en determinados casos en los que necesitamos sacar un mayor partido al equipo por la razón que sea, podríamos prescindir de este software de seguridad. Por tanto lo mejor que podemos hacer es desactivarlo, aunque os recomendamos que tan solo lo hagáis de manera temporal.
En un PC con sistema operativo alternativo a Windows
De igual modo, también se puede dar el caso de que prescindamos de usar el sistema Windows de Microsoft, y no decantemos por alguna de las muchas distros de Linux existentes. En ese caso y debido principalmente a la baja tasa de ataques que estos equipos sufren, podríamos prescindir de un programa de seguridad si así lo deseamos. Algo similar sucede con los equipos basados en macOS.
Con todo y con ello algo que debemos saber que en estos sistemas operativos alternativos a Windows, los riesgos de sufrir un ataque no son completamente nulos.