El navegador Edge es el doble de rápido y funciona mejor en equipos de bajas prestaciones
Si hablamos de navegadores web, el primer nombre que siempre viene a la cabeza de la mayoría de los usuarios en Chrome de Google. Si bien es cierto que se trata del navegador con mayor cuota de mercado, esto no se debe a que sea el mejor navegador, sino a que se encuentra disponible de forma nativa en todos los dispositivos Android y la insistencia de todas sus plataformas (buscador, Gmail, YouTube y demás) a invitar a los usuarios a utilizarlo.
Chrome siempre ha pecado de ser un devorador de recursos. Cuantas más pestañas abramos, el equipo se iré resintiendo cada vez más, lo que supone un problema especialmente en equipos de bajas prestaciones. Edge, por su parte, y a diferencia de Chrome, con cada nueva versión no solo mejora añadiendo nuevas mejoras y funciones, sino que, además, los chicos de Redmond mejoran su rendimiento para mejorar el que ya ofrece.
Edge está instalado en todos los equipos con Windows 10 y Windows 11 de forma predeterminada por lo que su rendimiento siempre es superior al de cualquier otro. Sin embargo, Microsoft no se conforme con esa posición de liderazgo y trabaja continuamente en mejorarlo. Desde la versión número 122, Microsoft ha introducido una serie de cambios en la interfaz de usuario, cambios que le han permitido mejorar su capacidad de repuesta especialmente en equipos de sin SSD y con menos de 8 GB de memoria RAM.
Edge, el navegador perfecto para equipos de bajos recursos
Con los cambios que Microsoft ha introducido desde la versión 122, actualmente nos encontramos en la versión 125, Edge es ahora un 76% más rápido en equipos que utilizan un disco duro tradicional (HDD) y que están gestionado por menos de 8GB de memoria RAM, por lo que es perfecto para equipos antiguos de bajos de recursos que sigue se pelean continuamente con Chrome cuando tienen la necesidad de abrir múltiples pestañas.
Además, para los usuarios que tienen equipos con SSD, Edge también es ahora un 42% más rápido que las versiones anteriores. Además de optimizar su funcionamiento, Edge también ha añadido mejores en la capacidad de respuesta de la interfaz de usuario que ahora es un 40% más rápida.
Para mejorar el rendimiento de Edge, Microsoft se ha centrado en modificar dos aspectos muy importantes del navegador. Por un lado, ha organizado el código de la interfaz para sea modular y que los componentes de este se puedan compartir sin tener que duplicarlo por si hace falta, aunque sea necesario.
Además, también se ha reducido el tamaño de los paquetes de código y la cantidad de código JavaScript que se ejecuta cuando se abre el navegador. Gracias a la modularidad introducida en la interfaz, el código JavaScript se comparten con los elementos que la necesitan eliminando código de duplicado que tiene la misma funcionalidad y así evitar cargarlo varias veces durante su inicio.
Los cambios que Microsoft ha introducido en las últimas versiones de Edge reciben el nombre de WebUI 2.0. WebUI 2.0 está diseñado para reducir el tamaño del código y el uso de JavaScript cuando se accede a la interfaz de usuario y un paso más en lo que Microsoft denomina Browser Essentials. La compañía de Satya Nadella, CEO de Microsoft, espera que los desarrolladores sigan el mismo camino y reduzcan la cantidad de JavaScript en las páginas web para reducir los tiempos de carga.