Si somos amantes de la música seguramente tengamos en casa una buena colección de CD adornando nuestra estantería, pues su uso ha caído en picado en los últimos años a favor del formato digital, dada su versatilidad y compatibilidad con otros dispositivos. Esta evolución también ha permitido la aparición de programas con los que es posible pasar toda nuestra música de CD al ordenador para disfrutarla con la mejor calidad.
Puedes que muchos usuarios piensen que, si pasan sus CDs de audio al ordenador, se pierde calidad, y esto es cierto si el formato que elegimos para es el MP3, que es el más conocido y usado en la actualidad. Pero en caso de que queramos pasar nuestra música con la mejor calidad al ordenador deberemos optar por el formato FLAC.
Qué es el formato FLAC y en qué se diferencia del MP3
El formato FLAC (Free Lossless Audio Codec) es un códec de sonido que reduce el tamaño del archivo sin pérdida de calidad por lo que es una gran opción si lo que queremos es almacenar música, pero sin perder la calidad original. Un archivo de audio puede ser comprimido en FLAC reduciendo entre un 50 y un 60% de su tamaño original, pero manteniendo una copia idéntica de los datos de audios originales, de forma que no se pierda nada de calidad.
El formato FLAC no soporta muestras de audio en coma flotante, sino que debe utilizarse la coma fija. Este admite cualquier resolución PCM desde los 4 bits hasta los 32 bits por muestra, y lo hace en cualquier tasa de muestreo, leyendo desde 1 Hz hasta los 655350 Hz, en incrementos de 1 Hz, y también guarda información cualquier número de canales de audio, desde 1 hasta 8
Esta es la principal diferencia de FLAC con respecto a otros formatos de compresión de audio como el MP3, que disminuye la calidad del sonido contra más sea comprimido el archivo. Además, FLAC es un formato libre y gratuito, así que no tendremos problema en utilizarlo pues también es compatible con un gran número de reproductores de música.
Usa Exact Audio Copy para convertir tus CDs en archivos FLAC
Para pasar nuestros Cds de audio al formato FLAC usaremos un programa llamado Exact Audio Copy, que nos permitirá extraer la pista de audio de nuestro CD de forma fácil y sin pérdida de calidad. Además, el programa es capaz de detectar todo tipo de errores de lectura, así como pérdidas de sincronización, consiguiendo repararlos siempre que sea posible.
Para empezar lo primero que debemos es descargar Exact Audio Copy desde su página web. Este programa es gratuito siempre que sea para un uso personal y no se use con fines comerciales. Una vez descargado procederemos a su instalación, que es rápida, sencilla y tampoco intenta instalar ningún software de terceros.
Un asistente nos guiará durante el inicio de la aplicación
Una vez instalado, lo iniciamos y nos aparecerá una pantalla con un asistente, que irá guiando durante la configuración del programa, pudiendo elegir el lector de CD y la calidad de la calidad del audio. Cómo vamos a necesitar la mejor calidad, debemos elegir el formato FLAC para continuar.
También podremos usar nuestro email para registrarnos en la base de datos de canciones Freedb con la que se nos puede adjuntar los metadatos de los archivos de manera automática y gratuita. Por último, podemos elegir en qué formato queremos que se ordenen los archivos, disponiendo de muchas combinaciones posibles. Por último, elegimos «somos un usuario experto y quiero poder usar todo el potencial de EAC».
Ya en el menú principal de la aplicación nos debe aparecer el listado de las canciones del CD que hemos introducido y seleccionado. Ahora pasaremos a conseguir los metadatos para que los archivos cuenten con toda la información disponible. Para conseguirlo deberemos pulsar en «Base de Datos» en la parte superior, posteriormente en «Obtener información de CD Desde» y por último seleccionamos «Prov. Remoto Metadata».
Una vez tenemos los metadatos comenzaremos a pasar los datos del CD al ordenador. Como ya tenemos configurado los parámetros y las canciones seleccionadas tan sólo nos queda pulsar el botón de «Acción». Posteriormente pulsamos en «Copiar pistas seleccionadas» y por último en «Comprimido», de esta forma todas las canciones pasarán a nuestro ordenador en formato FLAC. Por último, seleccionaremos la carpeta donde van a quedar guardados los archivos y esperaremos a que el proceso termine para disponer de todos nuestros archivos del CD en el ordenador con la máxima calidad.
¿Realmente merece la pena?
En el momento en el que convertimos música en formato analógico (como puede ser un vinilo) a digital (un CD, o un MP3), hay siempre pérdida de calidad. Lo que pasa es que esta pérdida puede reducirse casi al mínimo aumentando la tasa de bits por segundo hasta el punto de que es inapreciable.
El formato FLAC no es un formato de sonido analógico, por lo que, para convertir cualquier canción a este formato hay que muestrearla. Eso sí, dada su naturaleza, es capaz de guardar en su interior resoluciones de entre 4 y 32 bits por muestra, un muestreo desde 1 hasta 655350 Hz, de 1 Hz en 1 Hz, y desde 1 hasta 8 canales de sonido en cada canción. Eso sí, todo eso nos hace entrar ya en problemas, y es que su muestreo es tan grande que hace que casi casi tenga una calidad igual que la original, pero ¿a qué precio?
El principal problema de este formato es lo que ocupa. Mientras que una canción en MP3 puede ocupar entre 3 y 5 megas, una misma canción en FLAC puede ocupar diez veces eso, e incluso más. Y, además, lo más seguro es que, salvo que seamos audiófilos, y tengamos un equipo de sonido de muy alta fidelidad, no vamos a notar diferencia entre una canción en FLAC y una en MP3. Eso sí, dependiendo de la calidad del MP3. Si tenemos un oído estándar, y unos cascos normales, tirando a buenos, no vamos a notar ninguna diferencia entre un MP3 bien procesado a 320kbps y una canción en FLAC. Y si ya utilizamos cascos inalámbricos, mucho menos, ya que la calidad de la música por Bluetooth, dado su ancho de banda, cae siempre en picado.