Cuando nos sentamos frente a un ordenador en el día a día, son muchos los elementos que entran en juego para que la experiencia sea lo más productiva posible. En primer lugar, tenemos en cuenta el hardware del propio PC, así como el sistema operativo, en la mayoría de los casos Windows. Por otro lado, como ya habréis comprobado la mayoría de vosotros de primera mano, también se ha convertido en algo básico, una conexión a Internet. Además, cuanto más rápida a la vez que estable sea la misma, mejor que mejor.
Estos son tres elementos que se podrían considerar como básicos para que podamos sacar el mejor rendimiento a nuestro ordenador. Pero eso sí, no podemos dejar de lado lo que se refiere a las aplicaciones que usamos, ya que tendremos que saber elegir las que más nos interesan en cada caso. Hay que tener en cuenta que cada vez una mayor cantidad de usuarios pasan buena parte del día frente a sus equipos. Así es como el conjunto formado por el hardware y el software del que disponemos, hace que dispongamos de un PC lo más efectivo a la vez que útil como sea posible.
La conexión a Internet debe funcionar
Pero al mismo tiempo en los últimos años ha entrado en juego otro elemento de extrema importancia para la mayoría de los usuarios, tal y como os comentamos antes. Con esto nos referimos a la conexión de Internet que la mayoría usamos de manera prácticamente continuada, ya sea por motivos profesionales, o de ocio. Esto se ha hecho aún más palpable desde que los trabajos en la nube se han convertido en algo totalmente normal. Y no solo nos referimos a entonos profesionales, sino también a los domésticos.
Hoy día muchos almacenamos en la nube, trabajamos con aplicaciones online, jugamos a través de Internet, o vemos películas y series vía streaming. Pues bien, el no poder disponer de una conexión a Internet de manera repentina, puede convertirse en un serio problema en la mayoría de las ocasiones. Esto es algo que nos sucederá si de pronto nos encontramos con un error de conectividad limitada o nula en Windows. Hay que decir que en principio tenemos varias maneras de comprobar si la conexión a Internet funciona bien.
Pero no todo el trabajo, ni cuando hablamos del PC, ni cuando nos referimos a nuestra conexión. Porque además del trabajo en la nube, no podemos dejar de lado nuestras partidas online con jugadores de todo el mundo. Del mismo modo aquí no podemos dejar de señalar el vídeo y la música streaming en plataformas como Netflix o Spotify.
Llegado el caso, unido a cualquier otro problema en Internet, nos corta muchas vías de acceso a nuestro trabajo cotidiano con el PC, lo que es un inconveniente importante. Lo mismo sucede si estamos jugando una partida online o viendo una peli en Netflix, y la conexión falla cada poco tiempo, es algo que nos puede enfadar mucho. Por tanto, en el caso de que os encontréis con este fallo, os vamos a dar algunos consejos para solucionarlo.
Medidas básicas para el error de conectividad limitada o nula
Para empezar esto es algo que se puede dar en nuestro equipo en cualquier momento, sin que lo esperemos, de ahí su peligrosidad. Además, los factores que aquí entran en juego son muchos, tanto propios como de terceros, por lo que os vamos a intentar ayudar a resolver este inconveniente. Pero es al mismo tiempo es algo que puede venir dado de manera más frecuente cuando hacemos algún cambio importante en la configuración del sistema operativo, lo actualizamos, o modificamos los controladores.
Así, a continuación, os daremos a conocer una serie de pasos que os recomendamos dar para solucionar esos posibles problemas con la conexión a Internet. Estos seguro que ayudarán en gran medida a evitar los temidos cortes, ya sean temporales o permanentes, que en ocasiones sufrimos.
Reiniciar los dispositivos
Pues bien, llegado el caso en que nos encontremos con un fallo de Internet en Windows, el primer consejo que os podemos dar es que reiniciéis el equipo por completo. Esto es algo que soluciona más problemas de los que nos imaginamos. Más si hemos realizado algún tipo de actualización, ya sea del propio Windows o de alguna aplicación o driver. Es más, no solo eso, si os encontráis con un error de conectividad limitada o nula en Windows, también deberíais reiniciar el propio router. Decir que estos son dos elementos clave para que tengamos acceso a nuestra conexión, de ahí precisamente ambos reinicios.
Aunque parezca un tanto obvio, si a pesar de haber reiniciado ambos dispositivos, y por ejemplo nos conectamos inalámbricamente y seguimos con problemas con la WiFi, deberíamos acercar el PC al propio router para así recuperar la señal.
Comprobar las partes físicas de la conexión
Por el contrario, si nos conectamos al mismo con cable, no estaría de más echar un vistazo a las conexiones. Por alguna razón alguna de estas se puede haber movido, lo que rompe todo el acceso a Internet. Es por ello por lo que igualmente os recomendamos comprobar bien todas las conexiones, una a una.
l mismo tiempo y ya que estamos de comprobaciones, es recomendable asegurarnos de que estemos usando la WiFi correcta y que la contraseña esté bien introducida. Esto se debe a que sin darnos cuenta este intentando usar otra WiFi, o que otro usuario del equipo haya cambiado la password de la nuestra.
Restaura la conexión a Internet con estos consejos
También es interesante saber que cuando Windows nos presenta un error de conexión limitada, esto es algo que se puede deber a que, por la razón que sea, tengamos la conexión de uso medido activa, aunque en realidad no sea de este tipo. Las conexiones de uso medido son aquellas en las que pagamos el acceso a Internet dependiendo del tiempo o cantidad de uso. Por tanto, para desactivar esta función integrada en Windows, nos tendremos que situar en Configuración a través de la combinación de teclas Win + I, para abrir el apartado Red e Internet / Wi-Fi / Administrar redes conocidas. Aquí seleccionamos la nuestra, nos vamos a Propiedades, y comprobamos si el selector de Establecer como conexión de uso medido está desactivado.
Cambia las DNS actuales en Windows
Otra posible solución de la que podemos echar mano es cambiando las DNS que estamos utilizando para realizar esa conexión. Esto, usar unas DNS inadecuadas, puede ser una de las razones del mencionado error de conectividad limitada o nula.
Por lo tanto, llegados a este punto, para cambiar este apartado al que os hacemos mención, accedemos al Panel de Control donde hacemos una búsqueda de Conexiones de red. Una vez aquí, pinchamos con el botón derecho en la conexión que usamos para así poder entrar en sus Propiedades. En la nueva ventana que aparece pinchamos en Protocolo de Internet (TCP/IP), y en Propiedades ya podremos introducir las nuevas DNS.
En algunas ocasiones se puede dar el caso de que los fallos derivados a los problemas en Internet o con nuestra conectividad WiFi, no se deba a un error. Esto se puede dar por alguna configuración que tengamos en Windows que no permita que esa conexión se lleve a cabo como debiera. Por tanto, en el caso de que nos encontremos con el error de conectividad limitada o nula, también deberíamos echar un vistazo a las opciones de ahorro de energía.
Aunque en un principio esto no es algo que pueda parecer directamente relacionado con este fallo que os contamos aquí, lo tiene, y mucho. Esto se debe a determinados movimientos que lleva a cabo Windows en segundo plano cuando se cambian algunos parámetros en la configuración de energía.
Opciones de ahorro de energía mal configuradas
Estas se sitúan en la barra de herramientas de Windows, en concreto en el icono de la batería donde pinchamos para acceder a las Opciones de energía. Y es que aquí puede residir el problema, ya que la función de ahorro de energía de Windows puede estar apagando el adaptador de red sin permiso. Por tanto, prueba a desactivar todos los controles de ahorro para ver si eso soluciona el fallo con Internet.
Windows no actualizado
Otra de las soluciones que suele ser bastante efectivas, tanto para los errores con Internet, con la WiFi, o con conectividad limitada o nula, son las actualizaciones del propio Windows. Con esto os queremos decir que, llegado el caso, deberíamos intentar actualizar el sistema operativo a su versión más reciente enviada por Microsoft. Esto es algo que se hace extensible a la mayoría de los errores que encontramos en el sistema operativo, a no ser que hablemos de los derivados de actualizaciones problemáticas.
De hecho, es recomendable que mantengamos el sistema operativo actualizado en todo momento. Ya sea por motivos de seguridad, como por temas relacionados con la funcionalidad, estas actualizaciones del sistema son elementos clave. Cierto es que en ocasiones nos pueden dar algunos problemas, pero estos están menos extendidos de lo que podría parecer en un principio, al menos en la mayoría de las ocasiones.
Error en la fecha y hora
Aunque puede parecer una broma, la fecha y la hora son esenciales para que nuestra conexión a Internet pueda funcionar correctamente. Esto se debe a que estos dos elementos son utilizados, junto con otras muchas variables, para establecer los protocolos de cifrado HTTPS y TLS a la hora de conectarnos a Internet y poder hacer el «handshake» con el servidor. Si la hora de nuestro PC no corresponde con la hora del servidor, la conexión quedará totalmente bloqueada.
Aunque este problema como tal no suele dar un error de «conectividad limitada o nula», puede que sí sea un factor importante a la hora de poder detectar y solucionar otros problemas que pueda tener nuestra conexión. Por lo tanto, es importante que nos aseguremos de que tanto la hora como la fecha del sistema están configuradas correctamente.
Somos víctimas de algún ataque informático
No cabe duda de que quedarnos sin internet en un momento determinado cuando estamos trabajando con nuestro ordenador puede ser un serio problema. Esto es algo que se hace extensible a los momentos de ocio que pasamos con nuestro equipo basado en Windows. Se puede dar el caso de que estemos realizando una determinada tarea y repentinamente la conexión se corte y no podamos restaurarla por los métodos convencionales. Aquí os hemos hablado de algunas medidas que podéis tomar para retomar esa conexión y volver a la normalidad.
Pero al mismo tiempo debemos tener en consideración algunos agentes externos que estén bloqueando dicha conexión y por tanto nuestro acceso a internet. En concreto nos referimos a la posibilidad de que hayamos sufrido algún tipo de ataque por uno de los muchos códigos maliciosos actuales. Estos pueden haber accedido a nuestro equipo a través del correo electrónico, algún enlace que hayamos pinchado en una web, la descarga de algún fichero, etc. Hay que tener en consideración que algunos de estos malware lo que hacen es evitar que a partir de ese instante podamos acceder a Internet.
Esto permite que el virus se ponga en funcionamiento sin que nosotros podamos echar mano de herramientas externas que lo eliminen del equipo. De ahí precisamente la importancia de disponer de un antivirus instalado y perfectamente actualizado en todo momento en el ordenador. Si detectamos un corte de conexión como el que os hemos hablado de algún otro comportamiento externo del PC, deberíamos ejecutar ese software de seguridad cuanto antes. Hay que tener en consideración que Microsoft nos propone de forma predeterminada su propia solución, Windows Defender.
Pero igualmente nos puede servir cualquier otro antivirus de terceros que tengamos instalado. Eso sí, deberíamos ejecutar un análisis del equipo en profundidad para así eliminar cualquier rastro de código malicioso y restaurar nuestra conexión.
Actualizar los controladores de red
Y para terminar también deberíamos intentar actualizar los controladores de red que tenemos instalados en Windows. Para ello accedemos al Administrador de dispositivos pinchando con el botón secundario en el menú Inicio.
Una vez estemos en la nueva ventana, buscamos el apartado de Adaptadores de red para entrar en sus Propiedades, y en la pestaña de Controladores, los podamos actualizar.
Fallos en las actualizaciones de Windows
Anteriormente os hemos comentado que estos fallos relacionados con la conectividad limitada o nula en Windows podían deberse a las actualizaciones de Windows. Pero eso sí, al mismo tiempo que os hemos comentado que actualizar el sistema al máximo es lo mejor en la mayoría de las ocasiones, eso no es siempre así. Con esto a lo que nos referimos es que las causantes de estos problemas sean precisamente estos mismos elementos.
Y es que en multitud de ocasiones os hemos hablado de los problemas de incompatibilidad que estos elementos que lanza Microsoft pueden traer consigo a Windows. Por tanto, el fallo de la conectividad limitada o nula en Windows podría venir dado por alguna reciente actualización instalada. Si echamos cuentas y el fallo concuerda con esto que os comentamos, es posible que debamos eliminarla de inmediato. Por tanto, os mostraremos cómo hacerlo.
Lo primero que hacemos, como en el caso anterior, es acceder a la aplicación de Configuración de Windows a través de la combinación de teclas Win + I. A continuación, nos situamos en el apartado de Actualización y seguridad, donde veremos un enlace llamado Ver historial de actualizaciones.
Pues bien, aquí estamos finalmente donde nos interesa en este caso, ya que en la ventana que aparece tras pulsar en Desinstalar actualizaciones, veremos un listado con las más recientes instaladas. De ese modo no tendremos más que buscar aquella que hemos añadido hace poco, y borrarla con tan solo hacer doble clic sobre la misma.
Esto hará que Windows 10 vuelve de nuevo a la versión inmediatamente anterior en pocos segundos, lo que podría solucionar el problema que estamos barajando en estas mismas líneas. Y es que esta solución que os acabamos de mostrar, a su vez es extensible a una buena cantidad de fallos del sistema, desafortunadamente.
Problemas con el antivirus en Windows
Cierto es que, en la mayoría de los equipos, se hace indispensable el uso de algún tipo de solución de seguridad. La misma nos podrá ser de mucha ayuda a la hora de proteger el equipo, sistema y datos guardados ante posibles ataques externos. Además, estos nos pueden llegar desde cualquier fuente y de manera inesperada, de ahí que estos antivirus estén vigilando de manera casi constante cuando están en funcionamiento.
Pero también hay que admitir que estos son programas en muchas ocasiones problemáticos, algo que puede afectar de manera directa al funcionamiento del propio sistema operativo. Igualmente, el antivirus puede ser el causante de que nos quedemos, repentinamente, sin conexión a Internet, ya que puede estar realizando algún bloqueo, en ocasiones innecesario. Por tanto, lo recomendable en estos casos es, en lugar de eliminarlo a ver si se soluciona el problema, desactivarlo temporalmente. Ya sea Windows Defender o cualquier otro, podemos desactivarlo para comprobar si es este software el que realmente está afectando a la conectividad general en Windows.
De ser así, lo mejor es intentar actualizarlo o incluso probar con alguna otra solución de seguridad que no efectúe ese bloqueo no deseado. De hecho, tenemos una buena cantidad de ellas disponibles en el mercado, tanto de pago como gratuitas.
Y lo mismo ocurre con el cortafuegos. El Firewall es también uno de los elementos que más problemas pueden causar en las conexiones a Internet. Una mala configuración de una regla puede hacer desde que un programa no pueda hacer uso de Internet hasta que todo el PC se quede sin conexión. Por lo tanto, igual que el antivirus, es otro factor que debemos revisar a la hora de intentar solucionar estos problemas.
Recibe avisos al perder la conexión a Internet
En el caso de que nos encontremos con que repentinamente hemos perdido la conexión en nuestro equipo basado en Windows, podemos echar mano de programas que nos ayuden en este sentido y nos avisen. Este es el caso del que os vamos a hablar en estas líneas, en concreto del software llamado Internet Connection Notification.
Normalmente estos fallos y problemas llegan cuando menos lo esperamos. Llegados a ese punto, si perdemos la conexión en su totalidad, ya no podremos movernos por la red, aunque deberíamos ser conscientes de ello cuanto antes. Y es que la cosa se vuelve un poco más problemática cuando no nos enteramos de que nos hemos quedado offline. Solo cuando falla una descarga o intentamos acceder a una web o plataforma, nos damos cuenta, lo que puede resultar un tanto molesto. Por tanto, salvo que estemos continuamente pendientes de la conexión como tal, en la mayoría de las ocasiones no somos conscientes de haber perdido la conexión.
Es más, en ocasiones ya puede ser tarde, más si estábamos descargando algo de gran tamaño y perdemos todo el progreso. De ahí precisamente la importancia de soluciones como Internet Connection Notification. Este se encarga de informarnos rápidamente en el momento perdemos en el que perdemos la conexión a Internet en el ordenador. Así podremos restablecerla de un modo u otro de manera inmediata, ya que nos informa de todo ello. Esto es algo que se lleva a cabo tanto de manera visual como sonora en el mismo momento en el que perdamos la conexión.
Por tanto, para recibir estos mensajes de aviso a los que os hacemos referencia, lo primero que debemos hacer es descargar e instalar el programa en el PC con Windows. La aplicación queda está funcionando en segundo plano por lo tanto en el en el caso de que nos quedemos sin conexión repentinamente, nos saltará un aviso visual a la pantalla, además de otro sonoro. Cabe mencionar que lo mismo sucederá en el mismo instante en el que esta se restablezca.