No hay nada más molesto que estar trabajando, jugando o viendo alguna serie o película en nuestro ordenador y tener problemas con la pantalla. Estos problemas pueden ser, o bien de color e imagen, o de resolución. Aunque estos problemas pueden tener una gran cantidad de orígenes diferentes, la mayoría de las veces la causa de los problemas es la propia caché de pantalla de Windows, problemas que, por suerte, podemos corregir muy fácilmente como os explicamos a continuación.
La caché de pantalla de Windows guarda una gran cantidad de información relevante sobre nuestra configuración, como el monitor utilizado y la resolución, entre otros factores. Gracias a ella, cuando conectamos una pantalla a nuestro ordenador no tenemos que configurarla de forma independiente, sino que su configuración se realiza de forma totalmente automática, aplicando sus valores almacenados y teniéndola lista en unos segundos.
Esta caché, en ocasiones, puede dar problemas de compatibilidad con algunos monitores, haciendo que la imagen se vea en una resolución diferente, incluso mal. Por ello, lo primero que debemos hacer si tenemos problemas con la pantalla de nuestro ordenador es empezar por borrar esta caché.
Al borrarla estaremos eliminando toda esta información, solucionando todos los posibles problemas de incompatibilidad de configuraciones que pudieran estar relacionados. Además, cuando conectemos un nuevo monitor a nuestro PC este se reconocerá como un monitor diferente, aplicando una nueva configuración.
Cómo borrar la caché de pantalla de Windows 10
Para borrar la caché de pantalla de Windows 10 sin usar ningún programa ni software adicional es necesario hacer un sencillo cambio en el Registro de Windows. Aunque no tiene ningún riesgo si seguimos los pasos al pie de la letra, para evitar posibles problemas os recomendamos leer nuestra guía de regedit donde os explicamos cómo hacer todos estos cambios en el registro con seguridad.
Para limpiar la caché de pantalla de Windows 10, el primer paso será ejecutar «regedit» con permisos de administrador en nuestro Windows 10. Una vez tengamos el editor abierto nos desplazamos hasta la siguiente ruta:
- HKEY_LOCAL_MACHINESYSTEMCurrentControlSetControlGraphicsDrivers
Dentro de esta ruta podremos encontrarnos varias claves de registro (lo que parecen carpetas). Así, de todas ellas, vamos a eliminar las siguiente haciendo clic sobre ellas con el botón derecho:
- Configuration
- Connectivity
- ScaleFactors
Cuando vayamos a eliminar una de estas claves de registro nos aparecerá una ventana de confirmación. Seleccionado que sí queremos eliminarlas y listo.
Cuando hayamos borrado las 3 claves, el siguiente paso será reiniciar el ordenador. Al hacerlo, Windows volverá a generar estas tres claves de registro con sus valores por defecto, eliminando la caché y solucionando así la mayoría de los problemas relacionados con ella.
Qué hacer si sigo teniendo problemas con la imagen
Borrar la caché de pantalla de Windows 10 puede ayudarnos a solucionar muchos problemas con la pantalla de nuestro ordenador, pero no siempre es así. Hay veces que los problemas no están relacionados directamente con esta caché, sino que deben a otros factores.
Por ello, si seguimos teniendo problemas, una de las opciones que debemos mirar es intentar instalar la última versión de los drivers de nuestra tarjeta gráfica. Si hacemos una instalación limpia, además, es probable que todos estos problemas se solucionen, pudiendo volver a usar el ordenador sin contratiempos.
Si los problemas están relacionados con la resolución, la imagen o el color, podemos intentar también calibrar nuestro monitor para solucionar estos problemas.