Es más que probable que por regla general no tengamos que preocuparnos mucho por el tamaño de los documentos que generamos en Microsoft Word, en comparación con otros tipos de fichero como los vídeos o las fotografías, ya que estos normalmente no ocupan mucho espacio.
Sin embargo, si vamos a publicar un documento de Word en Internet o lo vamos a compartir por correo electrónico u otros medios on-line, la cosa cambia, ya que vamos a necesitar eliminar todos los bytes posibles. Es por ello que a continuación os vamos a mostrar la manera de reducir el tamaño de nuestros documentos realizados con el popular programa ofimático de Microsoft.
Por un lado tenemos la posibilidad de guardarlo en formato DOCX, algo que se puede llevar a cabo a partir de Word 2007, cuando los documentos se podían guardan en este formato, en lugar de en el tradicional DOC. Decir que en estos momentos la única razón para usar DOC es si necesitamos tener compatibilidad con otras aplicaciones de procesamiento de texto antiguas, ya que una de las ventajas de DOCX, es que el tamaño de los archivos es mucho menor.
Hay que tener en cuenta que un documento de unos pocos megas en formato DOC, por ejemplo, solo ocuparía algunos cientos de kilobytes como DOCX, por lo que cuando generemos uno nuevo, es recomendable que nos aseguremos de elegir el formato DOCX, más si tenemos la intención de compartirlo por Internet.
Cambiando de tercio, también tenemos la posibilidad de comprimir las imágenes del documento, por lo que antes de insertar una foto en un archivo de Word, es mejor que llevemos a cabo las pertinentes modificaciones en un editor de imágenes independiente. Decimos esto porque si editamos dentro del propio Word, este conservará la versión original y desperdiciaremos el espacio que queremos ahorrar.
Así puedes reducir el tamaño de un documento de Microsoft Word
Al mismo tiempo también podremos usar algún formato de imagen de Word que no ocupe mucho espacio, como JPG e insertar, en lugar de pegarla directamente, ya que al pegar Word la añade como PNG o BMP, que ocupan mucho más. Finalmente, en el menú “Guardar como”, podemos seleccionar “Herramientas / Comprimir imágenes” y elegir una resolución determinada para todas ellas y así ahorrar espacio al reducir las imágenes de un documento de Word.
Para terminar os diremos que si utilizamos una fuente personalizada en un documento y alguien que no la tiene instalada lo abre, no se verá bien, por lo que Word nos permite incrustar fuentes en los documentos para que funcionen en todas partes, pero claro, esto ocupa más espacio.
Por tanto, siempre nos podemos situar en “Archivo / Opciones”, y en la pestaña “Guardar”, asegurarnos de desmarcar la opción “Incrustar fuentes en el archivo” para lograr el objetivo que buscamos en este caso.