Google exigirá a los fabricantes de teléfonos que lancen actualizaciones periódicas para sus dispositivos Android

Aunque el sistema operativo para dispositivos móviles de Google es, con diferencia, el más usado y extendido del mundo en este sector, hablamos de Android, lo cierto es que no está exento de problemas, como hemos podido ver a lo largo de los años.
Uno de los problemas que más preocupa desde hace tiempo al gigante de las búsquedas es aquel que hace referencia a la fragmentación. Esto afecta directamente al crecimiento del software, ya que por ejemplo, en estos momentos tan solo hay un pequeño número de usuarios que ejecutan la última versión del sistema operativo móvil de la firma, y al mismo tiempo buena parte de los teléfonos Android no están debidamente actualizados con los más recientes parches de seguridad.
Es por todo ello que la firma quiere que las cosas cambien en este sentido en un futuro próximo, algo que se ha podido saber en la conferencia de desarrolladores de esta misma semana. Aquí el buscador anunció que sus políticas de seguridad van a cambiar, aunque tampoco ha querido especificar una fecha en concreto. Por lo tanto Google va a comenzar a exigir a la mayoría de los fabricantes de teléfonos inteligentes que implementen actualizaciones de seguridad periódicas para salvaguardar a los usuarios del sistema.
De hecho a lo largo de estos últimos años, la compañía de Mountain View ha tomado varias medidas para mejorar la seguridad de Android, incluida la publicación de sus propias actualizaciones de seguridad mensuales. Si bien estas se ponen a disposición de los fabricantes de teléfonos, por el momento no están obligados a lanzarlas para sus usuarios, lo que provoca que muchos terminales estén casi constantemente desactualizados.
Google cambiará su política para mejorar la seguridad de los usuarios con Android
Por tanto, el movimiento que ahora se quiere llevar a cabo es presionar a estos fabricantes de terminales para que protejan sus teléfonos, y al mismo tiempo a sus clientes. De este modo el jefe de seguridad de la plataforma, David Kleidermacher, en el Google I/O afirmó que “también estamos trabajando en la creación de parches de seguridad de acuerdo con nuestros OEM, lo que va a derivar en un aumento masivo de número de dispositivos y usuarios que recibirán parches de seguridad de manera regular”.
Eso sí, como hemos comentado, por el momento no hay ningún indicio de cuándo podría entrar en vigor esta nueva política, ni de lo estricto que sería Google a la hora de aplicarla con sus colaboradores, aunque se espera que sea lo antes posible.
Asimismo, tampoco está muy claro en qué medida este cambio ayudaría a los propietarios de teléfonos antiguos que no han recibido actualizaciones de seguridad desde hace tiempo, ya que es probable que esto se aplique a teléfonos con Android 8 Oreo y versiones posteriores.