Si en tu Mac empiezas a notar problemas con el software siempre es bueno seguir siempre unos pasos para intentar solucionarlos. Esto no garantiza el arreglo del ordenador, pero al menos se puede saber qué es lo que le ocurre, algo básico para poder llegar a una solución futura. En Softzone os damos algunos consejos.
Arrancar en modo seguro
Si hay algún problema en el software de tu Mac lo mejor es arrancarlo en modo seguro para descartas problemas más profundos. De este modo el ordenador arrancará con el software mínimamente necesario para hacerlo funcionar. Si el problema desaparece en modo seguro, habrá que analizar qué programa es el que está dando problemas.
Cuentas de usuario
Otra forma de descartar un problema general es abrir el Mac desde una nueva cuenta de usuario. Si el problema persiste, probablemente tendremos un problema general en el ordenador, si desaparece ya sabemos que algo está mal con nuestra cuenta de usuario.
Eliminar archivos temporales y caché
Muchas veces los problemas vienen debido a que algunos programas que se ejecutan en el ordenador crean archivos temporales que pueden dañar el sistema. Por eso de vez en cuando viene bien borrar la caché y eliminar los archivos temporales.
Eliminar preferencias de un programa
Si un programa en concreto da problemas con una cuenta de usuario específica y con otra no, lo que debemos hacer es eliminar las preferencias que esa cuenta esté dando a ese software.
Revisar la consola del sistema
La consola del sistema en Mac OS X ofrece acceso centralizado a los registros del sistema, y como tal es una forma rápida de localizar errores. A veces es complicado interpretar los mensajes que se reproducen en la consola de sistemas, pero si ves un patrón que se repite continuamente, se puede avisar a los técnicos de lo que ocurre para que estos te ayuden.
Comprobar el monitor de actividad
Esta es una de las primeras cosas que hay que hacer cuando se ralentiza el ordenador. Comprobar qué programas son los que gastan más recursos del sistema, ya sean CPU o memoria y ver si alguno de ellos lo hace de manera anómala.
Volver a instalar OS X
En un principio puede parecer una opción un tanto exagerada, pero en este sentido Apple ha hecho las cosas bien, ya que sin mucha complicación se pueden preservar las aplicaciones instaladas, la configuración, los archivos, etc. Para realizar una reinstalación de OS X, simplemente se requiere arrancar en modo de recuperación, y luego seleccionar la opción para volver a instalar OS X. Si se instala el sistema operativo desde el sitio web de Apple conviene realizar también una instalación de la actualización del software.